Love Is Scary./Naruhina/Sasusaku/Saiino/Nejiten/Shikatema/Gaamatsu

Cap 24.

-P-pero tu y yo..nosotros, yo quería que..

-P-perdón, Naruto. Pero el no quiere que estemos juntos, por más que los demás de mi familia quieran mi padre es el que decide mi futuro.

-Ese futuro es tuyo, no de él-le agarró los hombros-yo voy hablar con él, voy a convencerlo.

-Aún no, espera un mes. No es el momento, aún está molesto conmigo.

-Es una tontería lo que está haciendo.

-Pero es mi padre, el sólo quiere lo mejor para mi.

-Lo sé.

Se sentó en la banca. La escuela como cansaba, y más si de había enterado que el padre de la chica que ama no lo quiere como yerno, eso si dolía. ¿Ahora qué iba hacer?, pues eso era muy obvio, iba a pelear por ella.

-No quiero que te separen de mi lado. Yo de verdad no quería que por mi culpa te castigaran.

Ella negó con la cabeza. Se sentó a su lado, una sonrisa se posó en su rostro.

-No es tu culpa. Yo le oculté a mi padre que teníamos citas.

-Si, pero si yo no fuera tan tonto, distraído, hiperactivo..-ella  lo calló. Lo calló de la mejor forma posible, era un beso tierno y fue algo corto

-No, tu no eres nada de eso. Pueden verte de esa forma, pero yo te veo de otra.

-Hinata.

-M-me gustas mucho. Te amo y siempre lo he hecho-bajó su mirada. Se llenó de gran valor-no dejes que te hagan ver un tonto sólo porque los demás lo dicen, tu eres más que eso. En el fondo tienes un gran corazón, bondadoso, amable y confiado, eso es admirable en ti. Eres el chico más positivo, y nunca sabes cuando rendirte.

-En eso tienes razón. Nunca se cuando rendirme, dattebayo-se sonrojó soltando una sonrisa nostálgica.

¿Era posible que cada día más se enamoraba de ella?, cualquier hombre sería muy feliz de tenerla a su lado. Tal vez el no la merecía, pero la amaba demasiado como para dejarla ir.

-Y aunque mi padre me castigue, no hará que yo deje de amarte.

-¿Aunque te comprometa con otro chico?

-Aunque me comprometa con otro chico-sonrió

-Te amo, Hinata. Voy hacer todo lo posible para que tu padre me quiera, y así podré pedir tu mano.

-¿M-mi mano?

Ella enrojeció. Mientras tanto el soltaba una risa algo cómica, la acercó a ella rodeándola de la cintura.

-Si. ¿o acaso no quieres que nos casemos y tengamos hijos?

El sonrió. El corazón de ella latía como nunca, jamás se imaginó que el le estuviera proponiendo matrimonio en el pateo de la escuela. Tal vez no de la forma casual, pero se lo estaba proponiendo, y ella con gran felicidad aceptó y le besó antes de que el lo hiciera.

Después de todo, ese amor iba a durar más de lo pensado.

Valió la pena para ambos haberse confesado uno al otro lo que sentían.

-Debemos entrar a clases, ya está apunto de acabarse el receso. Antes de que Kakashi-sama nos castigue.

-K-Kakashi-sensei llegará tarde.

-Ah verdad que si-se detuvo sorprendido-entonces vamos caminando tranquilos. Mejor y platiquemos sobre nuestros futuros hijos.

Ella volvió a enrojecer.