Y por eso es que
ya nadie cree en cuentos,
ni en historias románticas,
o sus propias fantasías.No existe un príncipe azul,
ni de otro color, si te lo preguntas,
hay más villanos que héroes,
y, lo siento, pero es la verdad.Si quieres salir de la torre,
no le esperes, que no vendrá,
si dependes de él la fastidias,
porque estará jugando al GTA.Si para despertar
requieres de su beso de amor,
lamento mucho comunicarte
que dormirás el resto de la eternidad.Vestida de arapos no esperes
que se enamore de ti de primeras,
probablemente preferirá a tu hermanastra,
la del vestido de menos tallas.Te adelanto desde ya
que si besas a una rana
y se convierte en príncipe
no te querrá de por vida como dice.Pero siendo realista,
prefiero una rana que habla
que a un tipo
al que hacer sitio en mi cama.Todo príncipe que
dice para siempre,
es triste pero real,
no se quedará ni a desayunar.Bienvenido a la realidad, amigo,
donde no hay cuentos de hadas que valgan,
príncipes azules que te rescaten,
ni mucho menos ese clásico amor de ensueño.-H