Capitulo 19

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Luego de soportar todo el viaje al idiota de Matt y Derek.

-ya estamos acá- respire aliviada-

-¿que pasa gordi? ¿no te gusto nuestras compañia?- preguntó Derek haciendo un puchero con sus labios.

- ¿estas idiota? claro que no me gusto tu compañía- ambos se miraron y estallaron en una carcajada.

-son un par de...-

-Señorita Morgan y Joven Lewis ya que venían todo el camino muy amistosos serán compañeros de excursión.- comunico el profesor.

Matt automáticamente sonrió como un maniático.

-pero profesor...-

-nada ya lo decidí, haber si así se llevan un poco mejor.-

-bueno, pero si muero ya sabe quien fue- dije señalando al idiota

-cállate estúpida- paso por mi lado golpeando su hombro con el mio.

-¿que paso?- llego Mari a mi lado.

-¿que va a pasar?me toco el idiota como compañero- dije frustrada

-yo quería ser tu compañero- dijo Wilson con un puchero en sus labios.

Que lindo...

-bueno- interrumpió Mari- tenemos que ir prepararnos y ubicarnos en las cabañas, para luego salir a escalar.

-¡¡¡odio escalar!! ¡¡ y más si es con el idiota- grite.




-¡¡Dios como duele!!- gritó.

-no seas tan cobarde, solo es un tropezón- dije restando importancia a la situación.

-¿cobarde?-preguntó con evidente furia en sus ojos- ¡¡Eres una maldita insensible e hija de puta!!- grito Matt frotando con sus manos su tobillo.

Luego que fuimos a acomodarnos salimos a escalar y como parejas que somos salimos juntos, pero también estábamos con Derek y Martina, también son pareja. Pero estos desaparecieron o se fueron por otro camino, la verdad no se.

Ahora mismo estamos en una colina o algo parecido, donde no hay nadie y para colmo Matt acaba de tropezar y doblarse el tobillo.

¿que más puede pasar?

-esta bien, pero cálmate damisela.

-¿damisela?-

-claro, en los libros siempre pasa la damisela se lastima y cae para que después el chico lindo la cargue.

-pues menos mal que fui yo, si tu te hubieses caído tendría que haberte cargado.

rodé los ojos-¿estas consiente de que soy la única persona acá y que podría irme y dejarte solo?-

-pues vete, no te quiero acá estúpida.- gruñó.

-¿sabes que? me voy a quedar.-

-¿porque?- preguntó mirándome fijamente.

-tu que sabes que te encuentren muerto, degollado o algo parecido- suspire- ¿sabes a quien van a inculpar?- me apunte con el dedo- a mi-

-que estupideces dices-

-bueno¿porque no intentas volver a pararte?-

-imposible, me duele-se quejo.

-esta bien- me puse en cuclillas- súbete, te llevaré-

-¿eres idiota? no me subiré a tu espalda-

-Eres un llorón y una mamita- dije incorporándome de nuevo.

-cállate, ya te dije que duele-

-como quieres, me sentare acá a esperar que alguien venga-

-¿traes tu celular?- preguntó-

-si, pero no hay señal-

-claro, que idiota-golpeo su palma en su rostro

-yo siempre lo digo- me encogí de hombros-

Pasaron rápidamente las horas y las noche nos azoto.

estábamos en silencio. un escalofrió recorrió mi espalda me envolví en mis brazos, en ese instante una sudadera fue a parar a mi espalda.

-gracias- susurre- ¿como se encuentra tu lesión?-

-sobreviviré- Matt sonrió.

Atrapado ®Donde viven las historias. Descúbrelo ahora