Atrapado ®

Capítulo 34

Debo parecer una verdadera ridícula.

La penetrante mirada de Julie parece traspasar lo más profundo de mi alma.

-claro, vamos- Matt sujeto firmemente mi mano. Y comenzando a caminar trate de despedirme de Mari y Wilson. Julie que se vaya bien a la mier...

-mi auto esta cerca- interrumpió Matt. Mi mano seguía entre la suya.

-bueno-  me deje guiar por el chico.

llegando junto al dichoso automóvil, Matt quitó la alarma, y ,como si fuera la reina Isabel, abrió la puerta del copiloto, realizó seña con sus manos indicándome que entrara. Me siento una princesa. OK no. Esperó a que subiera para cerrar, rodear el auto y montarse en el lugar del conductor.

-¿adonde iremos?- pregunté, mientras me colocaba el cinturón de seguridad. 

- ¿adonde quieres ir?-

Me encogí de hombros.

Matt comenzó a conducir. Todo esta muy silencioso, no es que me incomode pero que aburrido. El estéreo esta apagado, apunte con mi dedo esperando una respuesta del chico, este me observó y se limitó en asentir con su cabeza. Sonreí y encendí el aparato esperando escuchar algo que sea agradable para mis oídos.

-cualquier música menos tus chinos, por favor- dijo con una sonrisa burlona.

-si seras idiota, - rodé mis ojos-  no son chinos, son coreanos- me observó y soltó una pequeña carcajada la cual me dediqué a observar. Matt se percató de mi mirada y su sonrisa se extendió.

-puedes observar y tocar, no me molesta si eres tu quien lo hace- dijo mientras colocaba su brazo en la ventana y Una mano en el volante.

Wooo este tipo se ve bien Hasta cuando conduce.

-cállate, idiota- susurre lo ultimo y comencé a cambiar las estaciones de la radio. Solo había rock, rock y más rock.- no me gusta- dije fastidiada.

-entonces mejor lo apagas.-

Apague el dichoso aparato el cual no sirvió para nada. -¿adonde vamos?- pregunté dándome cuenta que estábamos cerca del parque.

- ya veras- dijo sonriendo.

-Ok, eso sigue dando miedo- apunte con mi dedo su rostro.

Todos sabemos que Matt Lewis da miedo cuando es amable. ¿no?

- cállate, tarada- dijo tratando de ponerse serio.

-oye, yo soy la chica que te gusta, así que me tratas como se debe- dije con la intención de que se avergüence aunque sea un poco.
Él me miro serio y pude ver como se removió incómodo en su asiento.

- deja de decir idioteces- dijo mientras mantenía la mirada en la carretera.  

Solté una sonora carcajada- como tu digas- respondí en tono de militar.

Se estacionó afuera de una tienda, mire curiosa.

-baja - dijo Matt, apagando el coche y abriendo su puerta.

Rápidamente lo imite, la tienda era toda blanca y las puertas de vidrios permitían ver varias personas sentadas dentro disfrutando de: café,  batidos y algunos postres. Parecía un lugar bastante tranquilo.

- entremos- ordenó Matt.

Asentí y camine hacia la puerta, con Matt detrás de mi, empuje está para ingresar al local, pero no se abrió, volví a empujarla hacia dentro y fuera, y nada.