Enamorándote nuevamente

9

Sun Mi llevaba unos cuantos minutos tocando el timbre de la casa de su amiga sin respuesta. ¿Acaso habría olvidado que habían quedado para desayunar juntas? Kim Yong Eun también estaría ahí. De las tres amigas, era la que más problemas tenía para reunirse con ellas pues vivía en otra ciudad, pero siempre que podía viajaba un par de horas sólo para estar con ellas.

 La maquillista estaba a punto de darse por vencida y llamar la guardia nacional para que salvaran a su amiga, lo último que quería era encontrar a Eun Ah tirada en el salón después de un ataque similar al de hace 5 años. Justo cuando estaba sacando el celular para llamarla, la puerta se abrió.

 Eun Ah tenía el cabello revuelto, la respiración acelerada y ... aún estaba en pijama.

 -¿Por qué tardaste tanto? Estaba a punto de romper un vidrio para ver que estuvieras bien. Espera un segundo... son las 9 de la mañana, ¿Por qué sigues en pijama?- dijo Sun Mi entrando de lleno a la casa y dirigiéndose al jardín.- Oye, nena ¿estás bien? Estas sonrojada. ¿estás enferma?

 Justo en ese instante, el timbre volvió a sonar. Eun Ah abrió la puerta y vio a Kim Yong Eun sonriente con un ramo de flores en una mano y una bolsa con víveres en la otra.

 -¡Hola, señoritas! Buen dí... Eun Ah, ¿por qué sigues en pijama?- Sun Mi soltó la risa y Eun Ah se sintió como su la hubieran agarrado en plena travesura.

 -¡Ya! ¿Qué tiene de malo que esté en pijama a esta hora?... Simplemente me quedé dormida, es todo. – contestó agachando la cabeza.

 -¡Omo! Y hasta roja estás.- dijo Yong Eun agachando la cabeza también para ver el rostro de su amiga- Tú tienes algo, ¿tú qué opinas Sun Mi?

 - Estoy de acuerdo. Pero como tengo hambre, sugiero que pongamos nuestras prioridades en orden. Así que primero nos cuentas que te sucede, luego te vistes y al final comemos.- sentenció Sun Mi arrancando carcajadas a sus amigas.

 -Buen intento, pero no. Ya saben donde están las cosas en la cocina. Me daré una ducha rápida, me cambio y regreso. Y no empiecen a hacerse historias en la cabeza.- Eun Ah salió rápidamente y se encerró en el baño. Nunca había tenido un sueño erótico tan real como este. Tan vívido que ni siquiera había escuchado el timbre hasta tiempo después, incluso le había hecho olvidarse del desayuno con sus amigas. Aunque la realidad era que se sentía frustrada, justo cuando estaba a punto de llegar, abrió los ojos y todo se fue al garete.

 Frustración sexual, un gran sentimiento para iniciar el día.

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Media hora después, las tres amigas se encontraban sentadas en el pequeño jardín.

 Sun Mi y Kim Yong Eun no habían dicho ni una sola palabra pero sabían que algo había cambiado en su amiga. Las dos  la miraban atentamente con asomo de risa en sus ojos. Eun Ah no sabía mentir. Y la verdad era que desde que se conocieron no les guardaba secretos, se contaban gran cantidad de cosas; siempre listas para apoyarse unas a otras.

 -¡Bueno, está bien! Les voy a contar.- dijo Eun Ah dándose por vencida y provocando la risa en sus amigas.

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 -¡Que!- Soltaron Sun Mi y Kim Yong Eun al mismo tiempo - ¿Soñaste que?

 -¿Por qué me gritan?- dijo Eun Ah sintiéndose avergonzada.

 -A mi honestamente me da mucho gusto que te estés dando la oportunidad de conocerlo, o volver a conocerlo o lo que sea- dijo Sun Mi, metiéndose un trozo de fruta a la boca rápidamente, dándose cuenta de que había hablado de más.

 -¿Volver a conocerlo? Tú sabes algo, Sun Mi. – dijo Eun Ah - ¿Acaso Taecyeon y yo...?

 -Eso vas a tener que preguntárselo tu misma. Aunque por lo que nos cuentas, platicar no es lo que quieres, si sabes que me refiero.- bromeó Sun Mi provocando que su amiga se sonrojara; incluso les había contado que había escuchado claramente como él le decía "Me vuelves loco".

 - Bueno, el punto es que te gusta y a él le gustas. ¿Recuerdas lo que nos contabas, sobre esos sueños raros con alguien que te decía lo mismo en sueños, pero nunca veías nada, ni de quien se trataba? Tal vez, ahora puedas descifrarlo, siempre pensé que era un recuerdo tratando de salir. Sal con él. Puede que recuerdes algo..- comentó la más joven de las tres.

 Sun Mi y Eun Ah se miraron mutuamente.

 -¡Wow! Eso sonó profundo. ¿Desde cuándo te volviste tan inteligente Yong Eun?- Dijo Eun Ah burlándose de su amiga.

 - Si. ¿Quién eres tú y que le hiciste a nuestra amiga?- prosiguió Sun Mi

 -¡Ya! Dejen de burlarse de mi.- protestó Kim Yong Eun.

 Las tres amigas se reían en el jardín mientras bebían jugo y desayunaban. Justamente en ese instante, el celular de Eun Ah vibró. "Tienes un mensaje."

 Ella lo abrió y en el mensaje se leía: "Ten un hermoso sábado. ¿Comemos mañana? Tu chofer personal."

 Eun Ah sonrió. Al parecer tenía una cita.