Más que amigos. | Newt y tú | Correr o Morir.

× Capítulo 13 ×

Narra _____.

Todos nos miramos y salimos dispuestos a ver a la misteriosa chica. Me acerqué a Chuck para saber qué ocurría.

- ¿Por qué ríes? - Le pregunté con el ceño fruncido. Él apunto hacia la graciosa escena de la chica lanzando rocas desde lo alto de la cabaña de Alby hacia el resto.

- Creo que no le agradamos - Escuché a Newt.

- ¡Déjenme en paz! ¿Qué quieren de mi? - Gritó la chica.

- Solo queremos hablar - Le dijo Gally, él esquivó una roca que iba directo a él - ¡Hey! ¡Una roca más y... - No pudo seguir ya que una piedra impactó en su cabeza. Reía a carcajadas.

- ¡Hey, hey, espera! - Le habló Thomas.

- ¡Déjenme tranquila! - Gritó de regreso ella.

- ¡Soy Thomas! ¡Soy Thomas! - Se apresuró a hablar. La chica se detuvo - Voy a subir - Avisó mientras lo hacía.

Me quedé con el ceño fruncido.

- Creo que solo iremos tú y yo - Apareció Minho poniendo su mano en mi hombro.

- Así parece - Suspiré y le dediqué una sonrisa.

- Creo que te vienen a ver - Sonrió pícaramente, me volteé y vi a Newt quien se dirigía hacia mí - Nos vamos en 5 minutos - Dijo para luego irse.

- Hey - Me llamó acercándose - ¿Has dormido bien? - Dijo ya en frente mío.

- De maravilla - Le dediqué una sonrisa.

- Ya sabes que si tienes problemas puedes ir conmigo a pasar la noche - Me guiñó un ojo haciendo que me derrita por dentro, Dios era tan perfecto. Yo asentí.

- ¿Esta noche será la fiesta de la chica? - Pregunté mirando hacia ella y Thomas quienes conversaban.

- Sí, Alby habló conmigo y me dijo que será esta noche - Hizo una pausa - Y me preguntaba si te gustaría charlar un rato, c-conmigo.

- Newt, siempre pasamos las fiestas juntos - Reí volteandome hacia él.

- Pero necesito hablar contigo... de algo importante - Me miró esta vez algo serio.

- ¡Hora de irnos, larcha! - Apareció Minho detrás de mí.

- Sí, claro, ya voy - Le hice una señal esperando a que se retirara, lo cual no hizo, y suspiré - Vamos.

Pasé por el lado izquierdo de Newt y le hablé.

- Te espero en la noche - Le besé la mejilla y me fuí corriendo de ahí.

Narra Newt.

Estaba decidido. Sí. Esta noche sería la perfecta para declararme a _____.

Me quedé sonriendo viendo como entraba con Minho al laberinto, terminé rápido mi trabajo para poder ir al bosque a pensar en cómo se lo diría.

Me senté y me dispuse a pensar. ¿En qué momento lo hago? ¿Cómo se lo tomará? ¿Seguiremos siendo amigos despues de todo? ¿Ella sentirá lo mismo?.

Al cabo de unas horas pensando en todas las cosas probables que sucedan ocurrió lo mismo de siempre, comencé a arrepentirme.

- ¡Dios! ¿Y si no vuelve a hablarme? No podré vivir con eso - Grité alterado tapandome la cara con ambas manos.

- ¿Problemas de amor? - Me dijo una voz que me hizo sobresaltar.

- T-Thomas, ¿Q-Que haces t-tú aquí? - Tartamudeé un poco por los nervios.

- Nada - Se sentó a un lado mío - Sólo esperaba a encontrarme con algún Romeo que ayudar con su Julieta - Alzó sus cejas pervertidamente. Se veía gracioso, no voy a mentirles.

- ¿D-De que hablas?

- Vamos, Newt, se necesita ser ciego para no darse cuenta de que te gusta _____.

- ¿A-A mí? Pfffff, jamás.

- Bueno, entonces no te molestara que le pida que sea mi novia - Dijo poniéndose de pie.

- ¡No! - Grité causando que de seguro todo el área me escuchara.

- ¡Lo sabía! - Me apuntó con su dedo y dando pequeños saltitos. Solo me tapé la cara para evitar que viera mi sonrojo.

- Cierra la boca - Lo jalé hacia abajo tratando de que bajara la voz por lo menos.

- ¿Lo admites? - Dudé un poco pero asentí con la cabeza.

- ¡No puede ser! - Me abrazó - Solo déjame decir... - No siguió y me quedé con el ceño fruncido.

- Decir... - Dije tratando de que terminara de hablar.

- No puedo hacerlo, yo lo prometí - Susurró - Nada - Se apresuró a decir y se fue del lugar.

Me volví a sentar tratando de que pudieran volver las ganas de declararme a _____, pero fue imposible.

Narra _____.

Traté de hacer todo lo más rápido posible, tenía que hablar con Thomas, él era el único que me aconsejaba últimamente y se ha vuelto algo así como mi mejor amigo, bueno, aparte de Newt, habló todo el día de él y no hablaré sobre Newt con Newt.

Les pedimos a Sartén, Winston, Jeff y Clint que nos acompañarán, no sé por qué, solo fue idea de Minho.

Entramos y fuimos directamente a la sección 7, debíamos apresurarnos ya que ese era el lugar de los penitentes.

- Aquí es - Me detuve haciendo que todos pararan frente a las puertas dónde estaba el penitente ya aplastado, tenía algo vizcoso y raro, entre ello, un aparato.

- Que puto asco - Comentó Minho sacando el aparato y colocando cara de asco.

- Debemos averiguar qué es - Hablé mirándolos a todos.

- Sí - Me apoyó Sartén - Tienes razón.

- Lo que sea que hagamos, hagámoslo en el área, no quiero conocer a los amigos de esa cosa - Nos miró Jeff, todos asentimos y volvimos al área.

Minho dijo que hablaríamos de eso en otro momento ya que tendría que hacer otras cosas. Aproveché y fuí rápidamente a buscar a Thomas.

- ¡Thomas! ¡Thomas! - Gritaba por todos lados pero no recibía una respuesta.

- ¡Clint! - Corrí hacia él - Clint, ¿Has visto a Thomas?.

- ¿Hablas de...ése Thomas? - Dijo apuntandolo quien venía del bosque.

- ¡Thomas! - Exclamé corriendo para luego abalanzarme sobre él. Quedé encima de él con mis manos en el suelo para no caerme.

- Necesito hablar contigo - Le mirándolo directamente a los ojos.

- Claro, pero... ¿Podría ser en otro lugar? Creo que todo el mundo nos mira.

- Oh... Claro - Me puse de pie y le ofrecí una mano, la cual aceptó.

Volteé hacia los demás y noté como nos miraban.

- ¡Aquí no hay nada que mirar, larchos! - Les grité y tomé a Thomas del brazo para llevarlo al bosque. Cuando al fin nos sentamos me dispuse a hablar.

- Necesito tu ayuda - Suspiré - Es sobre Newt - Me miró pícaro y luego de un montos de señas extrañas habló.

- No adivinaras que me dijo hoy de ti.

- Thomas, no quiero que me digas.

- Pero, _____, te gustará saber.

- ¡Thomas dije que no! - Me hizo un puchero y se cruzó de brazos.

- Pienso en decirle lo que siento - Suspiré nuevamente. Él abrió sus ojos como platos para luego formar una sonrisa de oreja a oreja en su cara.

- ¡Es la mejor idea que hayas tenido, _____! - Me dijo abrazándome, solo asentía con la cabeza mientras reía.