I'M A ZOMBIE [Zombie Tord Y Tú]

I

La lluvia cae, el cielo oscurece dejando a la vista gotas de agua caer repetidamente. Zombies caminaban de un lado a otro, lentamente, el agua no les afectaba pero si lo hacia pudrirse más de lo que ya estaban. Entre ellos estoy yo, un zombie común como los demás o mejor dicho un idiota como los otros.

Desde hace ya un año que habia dejado de llover, es increíble volver a observar la lluvia caer y mojarnos lentamente hasta quedar empapados. Tenía hambre, demasiada, no habia comido algo desde hace ya unas semanas y la búsqueda de algo vivo era escaza. A veces pienso que todos somos unos idiotas sin cerebro, literalmente.

Y aqui estoy en uno de los aeropuertos principales, observo a mi alrededor y solo encuentro zombies, zombies y más zombies ¿Qué no puede haber alguna otra cosa que no sea un zombie? Ha claro, todo eso nos lo comimos.

No podían faltar aquellos zombies que ya se pudren y solo parecen huesos con vida, se puede decir que serian otro tipo de especien, otro grupo. Ugh ¡Que asco ese se esta arrancando la piel! Por favor no lo hagas. En unos años yo estaré así, sentado en el suelo arrancandome la piel pedazo por pedazo.

No me gusta estar aqui, no me gusta ser lo que soy, siempre esperamos a que un grupo de humanos venga en busca de alimentos para después acorralarlos y al final pues devorar sus sesos...lo normal. Por suerte tengo a uno de los idiotas de mis amigos pero a este se le quiere, ese peli naranja que se cree el rey del mundo y su "precioso" narcisismo a si mismo.

Ví que al verme solo hizo un intento de sonrisa que no le salió nada mal, me acerqué a paso lento e intenté sentarme en la silla que fue todo un falló pero lo hice.

—...comida...comer—dijopara darme un pequeño golpe en el brazo e irse trás los demás.

—...comida...—respondí para seguirlo a paso lento.

Y por su puesto olvide decirles que intentamos hacer una conversación que no son más que solo gruñidos pero solo sabemos sobre una palabra y esa es "comida" que por supuesto hace referencia a los sesos de aquellos humanos que vienen en busca de alimentos. Creó que con el pasar del tiempo iremos aprendiendo más palabras.

Ahora estoy siguiendo a otros zombies que son como mi familia, siempre vamos en grupo, ahora nos dirigiamos hacia un lugar en donde se supone que se encuentran un grupo de humanos, para poder comer algo después de mucho tiempo o eso es lo que pienso.

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—¡Despierta hija hoy es tú dia de trabajo!—gritó el odioso de mi padre desde la puerta de mi habitación, yo solo dí un gruñido como respuesta—. ¡T/N, te estoy hablando!

—Si, ya voy papá—respondí con un gruñido para después verlo salir de la habitación y luego sentarme en el filo de la cama—. Cuando será que me dejará domir.

Mi nombre es T/N tengo 23 años y estoy en la armada, soy la hija del Líder Anderson, sí mi padre es el líder increíble ¿no?. Vivo en este pequeño pueblo desde los 15 años, antes de que la infección llegase y se llevará todo a nuestro alrededor.

En este mismo momento me estoy dirigiendo a las puertas que conectan hacia el otro lado. Recuerdo que hubo un momento en donde las personas enviaban a los enfermos hacia el otro lado y así dejarlos morir allí. Aquellos recuerdos no me dejan en paz, ya que en cada uno de ellos aparece un jovén separado de la multitud sana, llorando entre toda la infectada, lo único que recuerdo es que este tenía unos dos ojos rubís demasiado hermosos.

Se preguntarán ¿Cómo? En el momento en que nos revisaron y salió que no estabamos infectados mucho antes de subir al helicóptero, lo ví, y allí estaba llorando entre toda esa multitud desesperada. Supuse que estaba infectado.

No era la primera vez que saldría de aquellas puertas de metal, a veces salia a escondidas con mi hermano, siempre estuve pensando en por que aquellas paredes de metal ya se encontraban mucho antes del ataque de la infección. Me pregunto si ellos ya sabían que eso iba a ocurrir.

A mi lado observe a mi amigo: Edd un chico simpático, regordete pero lindo(se puede decir que es como un rollo de canela, recuerdo que siempre se enoja cuando lo llamó pastelito)quien junto con sus manos me saludó cariñosamente; claro que yo también le devolví el saludo. Pero aquel momento se perdió al observar llegar a más chicos y a Yuu aquél chico de cabellera amarilla, mi hermano, lo malo es que soy la única chica.

—Hija, ten mucho cuidado allá—advirtió mi padre con tristeza, yo solo regresé a verlo con un poco de nervios ya que sabiamos que algunos jóvenes entraban allí pero ya no volvían.

Solo asentí para luego escuchar las puertas abrirse y darnos paso para entrar. Espero que toda esta misión sirva para algo.

Dimos unos pasos para finalmente ingresar hacia el otro lado en busca de alimentos y medicinas.

▪C O N T I N U A R Á▪

-latomatito-