I'M A ZOMBIE [Zombie Tord Y Tú]

XIV

(Aviso: Capitulo largo ♡)
Disfruten~ ♡

El camino para llegar hasta aquellas casas abandonadas—que se encontraban cerca del muro—fue en un completo silencio, la noche había caído sobre nosotros. Estuve pensativa sobre lo que había ocurrido hace unas horas, la duda y la tensión me mataban a cada momento.

Tord se encontraba serio, me di cuenta por su mirada que estaba perdida en el camino. Lo miré de reojo algunas veces preguntandomé que estará pensando, me siento afligida por aquello. Escuchar a Tord—un zombie— intentar hablar claramente como un humano, no es algo que se vea a diario, siento que algo no anda bien.

¿Los zombies han cambiado?, ¿Tord ha cambiado? desde el momento en que lo ví y en la forma en que me cuidó y me protegió supé que él es diferente a los demás. ¡Ugh! Mi cabeza va a explotar de las millones de preguntas que tengo ahora. No entiendo que ocurré, Tord logró hacer recapacitar al grupo de zombies que casi me devoran en ese momento. A veces pienso que Tord es como un Dios o algo así.

Para nuestra mala suerte tuvo que llover y además de que el carro en el que nos encontrabamos no tenía techo, por lo que permitía que el agua entrará; Tord se mantuvó callado y yo...estuve con frío.

A lo lejos logré observar un pequeño rincón de casas que se encontraban no tan cerca del muro pero lo suficiente como para llegar en auto allá. Decidí que era mejor quedarnos a descansar en una de estas, por lo que me estacioné en frente de una. Salí del auto y me dirigí hacia la puerta de la casa que para mi gusto era demasiado bonita, tenía dos pisos y su vista desde afuera hipnotizaría a cualquiera...ya me imagino como sería dentro.

Volteé a mirar a Tord quien solo salió del auto y caminó hasta estar a mi lado, observé la perilla de la puerta por lo que la agarré e intenté girarla.

—¡Maldición!—exclamé intentando nuevamente abrirla— Esta cerrada.

—Déjamelo a mi...—escuché decir a Tord, por lo que solo dí un asentimiento y me quité de la puerta para que pudiera hacer lo suyo.

Miré como retrocedió unos pasos para después correr hacia la puerta y derrumbarla de un solo golpe. Al entrar, lo ayudé a levantarse y lograr observar el lugar el cuál estaba completamente oscuro.

—Iré a buscar unas velas/candelas, quedaté aquí.—ordené mientras comenzaba a caminar pero un agarré en mi brazo me detuvo.

Regresé a mirar a Tord quien era el que sostenía mi brazo con poca fuerza, como queriendo no lastimarme.

—No...te vayas, no quiero...quedarme solo.—escuché decir a Tord en tono de súplica, intenté observarló en la oscuridad—lo que fue en vano ya que no se veía casí nada—, logrando observar su mirada que parecía un poco triste.

—Tord...—murmuré mirandoló—No me iré a ningúna parte otra vez ¿si?—miré como su rostro se mantuvó con esa mirada triste que me hizó sentir un poco mal en ese momento.— Solo déjame ir por unas velas y volveré ¿De acuerdo?—hablé por último antes de sentir que el agarré que tenía en mi brazo...ya no estára.

En el momento en que me soltó comenzé a caminar con la poca luz que tenía hacia la cocina, donde se suponía que deberían estar unas pocas velas.

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Aquella casa estaba en completa oscuridad, no se veía casi nada. Escuche decir a T/N que iría por unas velas para poder alumbrar el lugar, pero no quería quedarme solo, por lo que agarré su brazo impidiendolé irse. Temía que ocurriera algo y yo no esté allí para impedirlo, pero la mirada confiada de T/N hizó que soltará el agarré que tenía en su brazo.