I'M A ZOMBIE [Zombie Tord Y Tú]

XXIII

El sonido del crujir de las ramas secas al ser aplastadas se escuchaban entre la soledad de toda la zona, la brisa se iba tornando más fría con el pasar de los minutos y Edd cada vez se encontraba más cansado, había caminado por largas horas desde que salió de la zona segura y eso lo había debilitado en gran cantidad. 

Suspiró sintiendo la brisa helada chocar contra su rostro y remover sus cabellos con suavidad; chocando sus manos, suavemente comenzó a frotarlas intentando darles calor. Sentía que las mismas iban a quedar congeladas por las bajas temperaturas que la oscura tarde estaba trayendo. Debía estar en alerta y buscar un lugar seguro y cálido donde pasar la noche, pero por ahora decidió sentarse en una de las rocas de la zona descansado por un minutos. 

Con su mirada inspeccionó todas las cosas que lo rodeaban y el lugar en donde se encontraba, todo era tan solitario y vació, solo se escuchaba el sonido del viento y una que otra basura arrastrada por el mismo. Ya no le era tan raro no haberse encontrado con ningún soldado en toda la zona, era muy obvio que ninguno estaría a esas horas pues el frío aumentaba en grandes cantidades casi llegando a congelar ciertas cosas. Edd no era la excepción, estaba congelándose allí, decidió mejor apresurarse y encontrar alguna casa en donde pasar la noche; Al ponerse de pie, estiró su cuerpo intentando mantener la compostura para no caer en cualquier momento pues su mochila comenzaba a pesar por lo cansado que estaba. Cuando supo que ya puede continuar comenzó a caminar con cuidado en busca de un lugar seguro y cálido, solo deseaba tener suerte y no encontrarse con ningún zombie en el camino.

En otro lugar no muy lejos, Patryck caminaba rápido en dirección al hogar de su ex-novio, estaba preocupado su rostro lo demostraba había visto como en la masacre T/N  era llevada con lágrimas en sus ojos por Edd. Él no se había enterado de la aparición de su amiga, y le sorprendió demasiado verla intentar entrometerse y si es posible morir en el intento de salvar a unos "simples" zombies. No tuvo tiempo de ir cuando se enteró de su llegada por lo que tuvo que esperar hasta la noche para ir a buscarla en el lugar en donde esté. Cuando llegó se paró frente a la puerta de aquel departamento en donde su ahora ex y su amigo se encontraban, sabía que iba a ser un poco incómodo, pero tenía que hacerlo debía comprobar que ambos estén bien y a salvo.

Llamó a la puerta tocando varias veces, sin recibir alguna respuesta, volvió a tocar esperando que esta vez contestarán, pero igualmente no lo hicieron. Se estaba alarmando, intentó abrir la puerta por la perilla de la misma para comprobar si estaba cerrada, sin embargo, se sorprendió al ver que estaba abierta y sin ningún seguro. 

"Que raro" pensó a la vez que empujaba la puerta entrando sin ningún problema por ella, observó el lugar analizándolo sintiendo un gran silencio en todo el departamento, estaba confundido mientras se encontraba terminando sus horas de labor pensaba que ambos amigos no se moverían del lugar en donde estaban, al parecer estaba equivocado. Investigando el lugar solo se encontró con una carta en la mesa de la cocina, no le gustó para nada su contenido, recuerdos comenzaron a invadir su mente como si puñales fueran.

—... ¡Me largo Patryck, no puedo seguir aqui! —gritó el peli castaño con lágrimas corriendo por sus mejillas— ¡Tú no harás nada que me impide largarme de este horrible lugar!

Esos malditos recuerdos, no le agradaban para nada, Edd era todo un idiota en esos tiempos. Pero aún así, no lo culpaba ambos habían perdido a un amigo que querían demasiado

— ¡Estarás bien, amigo, solo aguanta! ¡Por favor! —decía alarmado, mientras aplastaba la herida sangrante de su amigo escuchando el gruñir de los zombies acercarse con mayor velocidad. Su amigo se estaba desangrando y su mirada comenzaba a decaer al igual que su corazón— ¡Vamos Matthew, por favor aguanta amigo!