Guarde los casetes en mi casillero y al cerrarlo observe que Daniel venia hacia mí.
—Lu... Lucrecia— Daniel estaba pálido y con los ojos bien abiertos, parecía estar agotado, lo deje solo con Diana y al parecer sus temas de conversaciones lo cansaron a tal grado que el pobre no podía ni siquiera pronunciar mi nombre sin tartamudear, sentí mucha culpa y fui hacia él.
—Daniel...— alce mis brazos y él se abalanzo hacia mí.
—A donde lo llevas?! — grito Diana con su grupo de mosquitas que iban detrás de ella.
—A un lugar donde no te pueda ver— dejándola con las palabras en la boca me fui abrazada junto a Daniel, luego de caminar un poco nos sentamos y su color blanco se fue aclarando hasta el verdadero color de su piel.
—Lucrecia por favor, no me vuelvas a dejar solo con ellas, de lo único que hablaban era de lo bellas que eran o de cada chico que pasaba por el frente, fue una verdadera pesadilla— me comentaba mientras daba los últimos suspiros, yo con mis dos manos le toque la cara y alzándome un poco le bese la frente.
—Prometo que no lo vuelvo a hacer— puse mi cabeza sobre su cuello y el rodeo mi cintura, así nos quedamos hasta que sonara el timbre para la próxima entrada.
—Vamos? — yo asentí a su pregunta y tomados de la mano fuimos a la siguiente clase que era con ese profesor; al llegar le solté la mano a Daniel y le susurre.
—Perdóname— no quería arriesgarme, el profesor se alteraba cada vez que me veía con Daniel, tal vez quería hacerle algo pero si quisiera hacerlo la única razón seria que estuviera enamorado de mi, o que sintiera algún tipo de celos hacia él.
—Buenos días señorita Lucrecia...— yo pase antes que Daniel pero él no me hizo caso, después de que me saludara el joven me tomo de la mano y me llevo hasta mi asiento, observaba como se manoseaba las manos a cada que me veía con Daniel y como esa clase nos tocaba formar parejas para el trabajo, yo no tuve más opción que estar entre el profe y el chico.
—Te pasa algo? — me pregunto Daniel.
—No yo...— pero antes de responder me interrumpió.
—Le pasa algo señorita— sentí que su mano estaba sobre mi hombro, en ese momento no tuve más que calmarme y seguirle la corriente.
—No profesor, más bien ya termine el trabajo que hice con Daniel— le entregue las hojas en la mano y luego me sonrió.
—Gracias señorita...— al pasar por mi lado tomo un poco de mi cabello y lo dejo caer con sus manos, luego de eso me senté con un gran suspiro.
—Has tomado mucha confianza con el profesor? — me pregunto el chico sin mirarme.
—Por favor Daniel no pienses así, sabes que está loco, podría hacerte daño y es lo que no quiero— trataba de hacerlo razonar pero como todo chico imagino que estaba celoso y le daba toda la razón de estarlo.
—Pero no por eso debes estar tan confianzuda con el— me dijo todavía sin mirarme, no creía que estuviera molesto, solamente algo celoso.
—Daniel...— me acerque con la silla —Yo solamente te quiero a ti, no debes pensar que tengo alguna clase de relación con el profesor él es mucho mayor que yo!!! Además, tú eres más simpático— lentamente subió la cabeza y al mirarme le di una pequeña sonrisa, luego tomo con su mano mi cuello y me halo hacia él, quise besarlo pero recordé que nos estaba mirando el profe y solamente chocamos nuestras frentes. No vi en ese momento la su expresión pero la verdad tampoco quería hacerlo. Cuando el timbre sonó Daniel y yo salimos primero y el profesor no nos detuvo.
—qué bueno!! — en eso llegaron mis otros amigos.
—Daniel!!!! Amigo, necesito tu ayuda!! — vino Dylan corriendo hacia nosotros.
—Daniel, mis padres me compraron mi primer auto pero al traerlo aquí escuche algo raro, lo bueno fue que se detuvo justo donde me iba a estacionar ¿podrías revisarlo?— parecía preocupado.
—Claro amigo, Lu nos veremos en la otra hora— me dio un beso en la mejilla y se despidió de Celia, me detuve a hablar con ella y al fijar la vista por encima observe a Jake ¿Qué estaba haciendo?.
—Celia emm... acabo de recordar que debo entregar unos libros que deje en la biblioteca, nos vemos más tarde!!! — deje a mi amiga con la curiosidad pero era mejor que esperar allí a que termináramos de hablar. Después de correr hacia los pasillos no encontraba al chico por ningún lado.
—Jake? — lo llamaba una y otra vez pero nadie me respondía, solamente me dije que se había escondido, tal vez alguien lo vio o sintió miedo de repente al verme con Celia. Antes de regresar por donde había venido, escuche el rechinido de una puerta, era la de un salón. La mayoría de los salones de ese piso estaban abandonados, así que no creía que alguien pudiera estar allí.
—Jake? — camine lentamente hacia el salón pero antes de entrar alguien me había halado del brazo.
—Seño... señorita Lucrecia— quise gritar era el!!!!! Parecía un demente, me miraba de arriba abajo una y otra vez con ojos bien abiertos.
—¿Qué hace usted aquí? — sus manos que sostenían mis brazos temblaban, como si quisiera estrangularme. No le conteste, solamente miraba aterrada, tome mucho impulso y valentía para empujar al maniático y despojarme de él. Baje las escaleras a toda prisa y justo como la primera vez había chocado con...
—JAKE!!! — grite, de inmediato me chito con el dedo en la boca y tomándome de la mano corrimos hacia un salón y de pronto cerramos la puerta, el salón estaba oscuro y tenía muchos pupitres, todos llenos de telarañas, me sorprendió que el chico de repente haya tomado mi mano. Me guio hasta el escritorio y encima de el había una carpeta cuyo nombre estaba tapado con polvo, mire al chico y solamente sople....
—Profesor Frank? — me dije —Que es esto? — otra vez había olvidado que Jhon no hablaba, pero aun así tomo una tiza y dibujo en la pizarra un casete.
—Si la respuesta está en los casetes, ya es tiempo de que los vea— tome la carpeta y rápidamente abrí todas las gavetas que pude pero no encontré nada que me pudiera ayudar.
—Todo lo que busco debe estar aquí... Jake?— el chico había desaparecido de nuevo.
—Jake? — de un susto caí al suelo al escuchar que la puerta se abría...
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Lucrecia
HorrorLa historia denominada "Lucrecia" trata de la vida de una joven del mismo nombre, cuando se muda con sus siete tios hacia otro pueblito se aventura a horrores y sustos con los cuales no pensaba encontrarse. Conocera el amor asi como tambien el terro...