Conviviendo Con Youtubers

Capítulo 4.

Rubén P.O.V.

Vi como _____ se metía a su departamento. Y molesta. Bueno... esta en todo su derecho. Luego le pediría perdón.

Corrí para alcanzar a Yanett, sí, es mi novia, pero es una zorra.

-¡Yanett!.-grité llegando al portal.

-¿Qué quieres, Rubén?.-dijo volteándose.

-Es difícil pero...

-Terminamos.-dijo cruzandose de brazos.

-Oh mira que no era tan difícil.

-Si, si. ¡Adiós!.-dijo subiendose a su coche.

Entre al edificio y vi a _____ y a Vegetta abrazándose...¿WAT?

_____ P.O.V.

-¿Para qué acupas mi ayuda precisamente en esto?.-dijo Vegetta mientras bajabamos las escaleras del edificio. 

-Porque entre tu, Mangel, Chetto, Willy y EDDisplay, eres tu el que al menos tiene una neurona viva.

Se paró y me miró con una ceja alzada.

-Vaaaaale-dije mirándo al suelo.-Ellos no quisieron ayudarme. ¡Pero tu eres un buen amigo! ¡A que sí!

-Uh si.-lo miré triste.-¡Es broma mujer!.-dijo abriendo sus brazos y lo abrazé.-Ahora hay que darnos prisa que la entrevista es a las cuatro en punto.-asentí y salimos del edificio.

¿Adivinen quién tiene una entrevista de trabajo en una tienda de videojuegos?

-Oye...ultimamente no has subido vídeos a tu canal eh.-soltó de repente.

-¿Con que eres sub eh?.-dije alzándo una ceja y se encogió de hombros.-Bueno, tal vez mañana suba uno, es que no he tenido tiempo.

Entramos a aquel local de videojuegos que tenía no se que nombre porque no vi bien. Vegetta fue a hablar con el chico del mostrador y luego un hombre de unos treinta años venía bajando las escaleras, mientras yo miraba cada juego con atención.

-_____.-dijo Vegetta llamando mi atención y lo miré.-él es Jorge, el dueño, te hará la entrevista arriba y yo te esperaré aquí.-asentí y salude al señor ese.

Subimos las escaleras y entramos a una oficina. Me hizo una señal para que me sentará en una silla que estaba enfrente de su escritorio y así lo hice.

-Muy bien.- Tomó una hoja y me la puso en frente.-llene este formulario.

Y así lo hice. Erán preguntas comúnes como tu edad y tontería y media.

Al cabo de unos quince minutos que se me hicieron eteeeeeeeernos, terminé. Le di la hoja y el nomas asentía conforme la iba leyendo.

-Así que hace vídeos en Youtube.

-Sep.

-Muy bien...bueno, su horario es de Lunes a Jueves. Cualquier duda puede preguntarle a el joven Ignacio.-dijo señalando detras mío.

Volteé como el exorcista y di un pequeño salto. Él chico del mostrador estaba atras de mi quién sabe desde hace cuánto tiempo, la verdad no lo había notado.

-Ho..o...ola..-dijo acomodandosé los lentes. Ay que lendo.

-Hola.-dije sonriendo.

-Por hoy es todo, mañana empieza su turno.-dijo el viejo. Asentí y salí de la oficina junto con Ignacio.

-Oye..¿Te puedo decir Nacho?.-dije mirándolo.

-Si..esta bien.-dijo sonriendo.

-¡Ey Vegetta! ¿Adivina quién tiene el emple..¿Y el chico que llegó conmigo hace unos minutos?.-dije mirándo a Nachito.

-Oh, él dijo que tenía que ir a no se donde...

Rodeé los ojos. Alguien amanecerá colgado de un puente.

-Bien. ¡Nos vemos mañana Nachito!.-dije saliendo del local.

Jodeputa. Pero va a ver. Si lo veo, probablemente lo castre y venda sus estúpidas extremidades en el mercado negro..¡Al 3x1 señoritas!.

Saqué mi celular para marcarle a aquel weon pero iba tan distraída que chocarón conmigo.

-¡FIJATE!.-le grité a esas dos personas que habían tirado su cafe ensima mío, levanté la cabeza..era una chica y un chico. Los fulminé con la mirada...¿es que acaso todos quieren morir?

-¡Eh que no me mirés así! ¡Fue la Liz!.-dijo el chico de pelo castaño con ojos azules señalando a la chica..valla que era guapo. Miré está vez a la chica, tenía el cabello castaño y ojos azules igual que el chico.

-¡Callate Nick! ¡Tu me empujaste!.-dijo mirándo al chico, y así empezaron a discutir, pero mi paciencia tiene un límite.

-¡CALLAOS O JURO QUE OS CASTRO-señalé al chico-Y OS SACÓ LOS MALDITOS OVARIOS!.-señalé a la chica. Suspiré.-Me llamo _____.-dije extendiendo mi mano ya mas calmada.

-Yo soy Nick.-dijo el chico tomando mi mano y sonriendo.

-Yo soy Liz.-dijo la chica tomandola igual y sonriendo.

-¡Y somos gemelos!.-dijeron los dos al mismo tiempo extendiendo sus manos.

-Bueno yo ya me tengo que ir.-dije riendo y ambos me miraron tristes.-Pero ponemos quedar otro día.-sonrieron.

Intercambiámos números y me acompañaron a casa. No paraba de reír con estos chicos.

-¡Asta luego mi amor!.-dijeron ambos alejandose a lo que yo reí.

-¡Adiós!.-grité entrando al edificio.

Subí los escalones asta mi piso y me encontré a Mangel hablando con Rubius afuera de su apartamento. Ambos me miraron y luego mirarom mi blusa manchada con líquido. Rubius abrió la boca para decir algo pero lo interrumpí.

-Si no quieres que diga una serie de palabras inapropiadas, mejor ni hables.-cerró su boca y miré a Mangel quien estaba a punto de reír.-Calla.-pasé por en frente de ellos y abrí la puerta de mi apartamento.

Encendí la luz y miré el reloj; 9:36 pm. Suspiré. Alex aún no llegaba. Tome mi celular y entre a Twitter.

¡Wolaaaas perras! Si si, me jui po' mushio tiempu..¡PERO HE VUELTO BITCHES! En 20 minutos directo de preguntas y respuestas equis and ye. Manden su preguntas con el jashtag #suajforevah.

No vemoh'.

Apagué mi celu y fui a preparar todo. Faltaban solo unos segundos para iniciar el directo.

-¡Princhipesas! ¿Cómo estann? Buano, empezemos con las preguntas...-entre a Twitter y comenzé a leer en voz alta preguntas normales, asta que...

-Siguiente pregunta. @Rubius5 ¿Qué hago para soportar a mi vecina si está menstruando?...-seguido de esto escuche unas risas del otro lado de la pared. Rubius.-¡JODETE!.-grité volteando a la pared.-Buano, asta aquí el vídeo de hoy, espero que les haya gustado y nos vemos lueguih chequetos'-guiñé un ojo.-¡Siaaaau!.-Y apagué la cámara.

Sin pensarlo dos veces me diriguí al departamento de Mangel y Rubius. Ni toqué la puerta, solo entré y los vi a los dos con su computadora en MI CANAL de shutub. Como no se habían dado cuenta de mi precensia, con cuidado fui a la cocina, serví dos vasos con soda de fresa y fui a donde estaban ellos.

-¡Feliz día de la menstriación!.-grité echandoles a cada uno un vaso.-¿Adivinen quejeso?.