Mi Paciente [vkook]

Capítulo XXX Parte 10/20

El señor Min kaminari, salía de su impecable oficina y se dirigía a su auto con su lustroso traje negro.

Una vez llegó a su casa, bajo del auto y se adentro a su casa con suma seguridad. Iba directo a su escritorio pero unas voces interrumpieron su trayectoria. Dejó sus cosas en un sillón y se sacó la chaqueta para dirigirse con nuevo rumbo hacia la cocina. A pasos de atravesar la puerta unas carcajadas explotaron dentro, el señor Min sintió que su alma se iba a sus pies cuando reconoció esa tan peculiar risa.

-- yugyeom carajo, te dije que hirvieras el agua, que mierda hiciste.

-- no lo sé hyung, explotó de repente, agradece a dios que no estábamos cerca.

Yoongi se acerco a su hermano y lo tomó de ambas mejillas para comenzar a estrujarcelas y apretarlas con demaciada fuerza.

-- que tan inútil puedes llegar a ser, he?, tienes suerte que este de buen humor-- y lo soltó-- es mejor que vayamos a buscar algo con lo que limpiar este desastre-- y se dio la vuelta para encontrarse con la figura de un hombre apoyado en el marco de la puerta.

-- señor Min.

-- yo-yoongi.

-- si--y se toco el pecho-- creo que soy yo.

-- yo-yo-- parecía abatido, pero de un segundo a otro volvió a ser el mismo hombre arrogante de siempre-- que haces aquí.

-- pues después de tantos años volví para ver a mi hermano.

-- podían hacerlo en otro lugar, porque tuviste que venir aquí, no se si te abras dado cuenta pero no eres bienvenido aquí.

-- papá-- interrumpió yugyeom.

-- no tranquilo esta bien-- respondió yoongi-- ya estoy acostumbrado de todas formas-- y sonrió para no demostrar que las palabras de ese hombre le habían dolido-- tengo algo que decirles, algo importante.

-- pues habla entonces, no tengo tiempo que perder en miniedades.

-- no tranquilo no perderás demaciado tiempo, ¿podemos ir a sentarnos?

Y aquel hombre solo se dio la vuelta y camino hacia el comedor.

-- ven tu también yugyeom.

-- está bien.

Una vez los tres hombres sentados en la mesa, yoongi comenzó a sentirse nervioso, pero solo basto ver la cara de su padre para volver a tener la misma decisión de antes.

-- tengo cáncer, a los pulmones y al hígado, también un tumor cerebral.

Varios minutos de silencio pasaron hasta que el señor Min decidió hablar.

-- si este es un nuevo truco para sacarme dinero, quiero decirte que este es otro nivel.

-- yo no quiero tu asqueroso dinero, nunca lo he querido, solo pensé que debería decirles, ya sabes, a pesar de todo son mi familia.

-- yo-yoongi, qu-que, esto, esto es una broma no es así, es un truco para vernos sufrir verdad, no-no es necesario...

-- no pequeño yugyeom, no tengo tan mal gusto para las bromas.

El señor Min corrió con fuerza la silla y camino a paso decidido hacia su escritorio.

-- NO QUIERO QUE NADIE ME MOLESTE-- fue lo último que dijo antes de cerrar la puerta.

-- vaya, eso fue justo lo que esperaba que pasara.

Yugyeom se levantó con fuerza botando la silla en la que se encontraba sentado. Corrió dando la vuelta a la mesa, yoongi por su parte se levantó, cuando yugy llegó a su altura le plantó un golpe, y apenas el mayor volvió su rostro para mirarlo el menor salto a sus brazos haciendo que ambos cayeran al suelo.

Y.

LLoraron.

Abrazados como dos niños pequeños que le tienen miedo al monstruo de abajo de la cama, se aferraban el uno al otro, se nesecitaban, ambos lo sabían, entre lágrimas yugyeom trataba de hablar pero lo único que salían de su boca eran balbuceos, estuvieron bastante tiempo así, hasta que ambos se calmaron y de apoco fueron separándose.

-- ve.

-- a dónde.

-- con papá, puede ser un hombre horrible pero a pesar de eso es nuestro padre, se que en el fondo le afecto bastante la noticia, por favor intenta hacer las pases con él.

-- lo intentaré, pero no prometo nada.

Yoongi se levanto dejando a su hermano aún en el suelo, cuando iba a dar el primer paso para alejarse una voz lo interrumpió.

-- ayúdame a pararme maldito bastardo, no puedo creer que me hayas querido dejar aquí.

Yoongi sonrió porque sabía que su hermano pequeño hacía lo mejor que podía para tratar de relajar la tensión.
Estiró su mano la cual fue tomada por el menor y en el momento en el que yugyeom se iba a levantar, yoongi dejó de hacer fuerza y yugy volvió al suelo.

-- oh, lo siento, no tengo tanta fuerza como antes, disculpa a tu hermano enfermo.

-- que humor tan negro tienes bastardo.

Y sin más yoongi se fue directamente al escritorio de su padre, quizo tocar la puerta pero los sollozos que escucho dentro lo hicieron detenerse. Su corazón se encogió en su pecho cuando escucho a su padre llorar. Sin tocar mi pedir permiso yoongi se adentro a la gran habitación que hacía de escritorio para su padre.

-- CARAJO, creí haber dicho que no quería que me molestaran.

-- ¿sigo siendo una molestia para ti?-- pregunto yoongi sentándose en una silla enfrente de su padre.

-- T-tu haz sido una molestia desde que te convertiste en un marca de mierda.

-- porque te afecta tanto mi decisión, yo soy tu hijo maldición tenias que haberme aceptado, pero tu cerebro es tan pequeño para comprender el cambio, que a base de golpes y empujones quisiste cambiar algo que ya estaba hecho.

-- eras mi hijo consentido...

-- y lo sigo siendo, si no, porque razón estarías llorando.

--.....

-- sabes cuantas veces quise volver, miles, pero sabes porque no lo hice, pero aun después de todo lo que paso, tenía la esperanza de que me buscarías y me traería de vuelta.

-- te busque.

-- no lo suficientemente bien al parecer.

-- llore por ti.

-- Cuántas veces he tenido yo que llorar por tu culpa.

Se quedaron en silencio, analizandose el uno al otro, viéndose a los ojos para saber si realmente se decían la verdad.

-- hac-hace cuanto tiempo te diagnosticaron.

-- hace un mes y medio, que sepas que vine aquí por yugyeom, quiero llevarmelo por unos días, espero no te moleste-- y ladeo su cabeza.

-- haz lo que quieras-- yoongi se levantó de la silla-- pero antes-- y se quedó de pie al lado de la puerta. El señor Min rodeo la mesa, se acerco a su hijo, que lo miraba desconfiado, movió su brazo, como si fuera a darle un golpe, y yoongi sonrió, pero el señor min hizo todo lo contrario, hizo algo que estuvo esperando por años, abrazo a su hijo mayor con todas sus fuerzas, yoongi no respondió, pero tampoco supo el momento exacto en el que las lágrimas comenzaron a caer de sus ojos.

Siento el retraso este es un poco más extenso para compensar