¿pero que más da? Si ámbar lo queria lejos y cada ves que la veía con benicio ella le correspondía gustosa, si ella intentaba dejar todo atrás... ¿por qué él no?.
Tal vez la vida le estaba diciendo que era hora de olvidar y empezar una nueva historia con esta puerta, que debía jugársela por su amor del pasado y ver si podía funcionar, si volverian esos sentimientos junto a ella, su amiga, que tal vez su tiempo no fue hace dos años sino ahora.
Él le sonrió tenuemente y se acerco a ella, tomo su rostro entre sus manos, su corazón no se aceleraba, pero el de luna se podría salir de lugar. Rozó sus labios, dudando una ultima vez, esperando un milagro, una señal, una interrupción inoportuna de esas que siempre le pasaban con ámbar... Otra vez pensando en ella ... Pero no, no llego, así que termino de impactar sus labios con los de ella, el beso era timido, sin mucha emoción para él, era de esas cosas que esperas que pasen pero no era increible como lo imaginabas.
Se separaron lentamente, él abrió sus ojos de inmediato, ella segundos después. Luna trataba de descifrar el rostro de su acompañante, queria saber que significa esa inexistente expresión, pero es que simón no sabia que cara poner o que decir, ni terminaba de entender que habia hecho, sólo sabia que habia tomado una decisión y debía seguir con ella.
Voltearon a ver a la puerta cuando escucharon el portazo de esta ¿quien mas podia entrar así? Sí, solo ella.
Simón trago duro y respiró entrecortado, se preguntaba que había hecho en su otra vida tan malo para que le pasaran estas cosas, para no besar a luna solo tenia que tener una excusa para no responder a su amiga, o novia, realmente no sabia.
Pero lo que no sabía es que la razón para no besarla era el amor que le tenía a ámbar, lo que acaba de pasar fue un mero impulso, uno del que ahora en adelante tendría que hacerse cargo y este traería mas problemas del que se imaginaba.
Se observan desde la distancia, el con él nudo en la garganta sin saber como enfrentar a la rubia, antes de “corresponderle” a luna no tenia claro como iba a hacer o como reaccionaria frente a ámbar, aunque ella era la que lo queria fuera de su vida... No deberia importarle.
Pero cuanto le importaba.
-¿interrumpo algo? - pregunto rompiendo el silencio, su mirada viajaba de la chica al chico repetidas veces - ¿no me van a contestar? - simón miro a luna que todavía se encontraba en shock por la respuesta de él.
-amor, nos vemos mañana y hablamos mejor - cuanto le había costado decirle así, pero pensaba que asi lo aceptaria más rapido que fuera luna a quien se lo dice y no a ámbar.
¿que curioso no? Estar babeando por la mexicana casi dos años atrás y ahora no solo babear sino soñar con la rubia y tambien querer vivir junto a ella.
-¿amor? - pronuncio en un hilo de voz, no, no eso no podia ser verdad, no lo aceptaba. Luna se levanto y le iba a dar otro beso en los labios queriendo volver a sentirlo y confirmar lo anterior, pero simón corrio un poco la cara, lo más disimulado que pudo, para que terminara besando su mejilla, sabia que estaba siendo un cabron, pero todavía no se atrevería a mostrar todo frente a ámbar - amor... - cayo en la realidad, sentia perder el control de su cuerpo, de su mente, de sus palabras, de todo. Nuevamente.
Cuando la de baja estatura se fue (confundida todavía) quedaron intercambiando miradas nuevamente, simón agarro su guitarra y se dirigió hacia la salida, ámbar veía con detenimiento cada uno de sus movimientos.
-digo... - busco romper el silencio antes de que se fuera, quería escucharlo de sus labios - como los veo tan juntos, a dos centímetros, no sé... - él se detuvo a su lado, él no deseaba enfrentarla, aunque no fueran nada y el mexicano creía que ella no lo queria, sentía como si la traicionará, como si le fuera infiel - solo digo... -
