Chang Kyun había saltado el muro de casa de Ho Seok con tan poca gracia, que ahora caminaba hacia la parte trasera de la casa con la camiseta del pijama rota por haberse enganchado con una rama, y una rodilla sangrando por la caída tan tonta que había tenido contra el césped.
Por suerte, solo una de las perras de Ho Seok había presenciado algo tan patético.
No sabía qué iba a hacer al volver a casa. Podía fingir que eso no había pasado y simplemente tirar la camiseta o, sino, decirle a su madre que a ver si podía coserla. Total, era una camiseta de pijama, qué más daba si se veían las puntadas y el hilo. Lo malo iba a ser tener que aguantar el regaño de su madre por no haber picado al timbre como una persona normal en vez de saltar el muro como el niño salvaje que era. Lo malo de tirar la camiseta, era que tendría que tirar también los pantalones, porque Chang Kyun no soportaba no tener los pijamas a conjunto. Y esos pantalones de pijama eran de los pocos que tenía con bolsillos.
En medio de su encrucijada personal llegó hasta la piscina. Tenía intención de escalar hasta la segunda planta y colarse por el balcón, ya que ese ventanal estaba siempre abierto, pero no hizo falta, ya que se encontró a Ho Seok en la piscina.
Durmiendo, pero en la piscina.
La imagen era curiosa. Ho Seok podría haber pasado por un ricachón, tumbado sobre una colchoneta con una copa en la mano y uno de sus perros tumbado sobre su regazo. Al menos de no haber sido porque el perro que tenía encima no era un chihuahua o algo parecido, sino su perra Victoria, que era un cruce de pastor alemán y Golden Retriever de treinta y cinco kilos. Le quitaba cierto glamour a la imagen.
Tampoco era demasiado elegante que la colchoneta en cuestión fuese un colchón inflable de matrimonio que ocupaba media piscina.
El menor de los perros, que era solo un cachorro de pitbull cruzado con quién sabía qué, estaba a los pies del colchón. Había además un pastor belga tumbado en la escalera de obra, con la cabeza apoyada en el escalón superior donde apenas había un dedo de agua. Y luego la perra mil leches que le había descubierto con la cara contra la hierba, a la cual no le gustaba el agua y que ahora se dedicaba a perseguirle.
De la dóberman no había ni rastro, lo cual era muy raro, ya que Papillon vivía alrededor de Ho Seok. Cualquier persona desde fuera lo hubiese visto como muestra de fidelidad de parte de la perra hacia su dueño, aunque Chang Kyun estaba convencido de que el animal se pensaba que Ho Seok era uno más de la manada donde ella era la líder y la madre (aunque a ninguno de aquellos lo hubiera parido ella).
Si mal no recordaba los nombres de los animales, el pastor belga de la escalera se llamaba Ginger, la que seguía a todos lados a Chang Kyun en ese momento era Vainilla, y el cachorro era Ramen.
La gente solía reírse al escuchar el nombre del pequeño de la manada, y se burlaban con cariño de la obsesión que tenía Ho Seok con esa comida. Ho Seok solía sonreír y dejarlo pasar, pero en la historia de cómo ese cánido había conseguido nombre no había ni un solo motivo que pudiese hacer a alguien sonreír.
Chang Kyun lo recordaba perfectamente. Había sido a mediados de mayo cuando aquello pasó. Estaban aprovechando que el buen tiempo había empezado para subir a la terraza con un mantel y varios sillones a cenar juntos: ellos dos, Joo Heon y Sun Mi. Les hubiera gustado comer algo casero en vez de haber calentado algo en el microondas o el horno, pero con Hyun Woo en Seúl y Ki Hyun habiendo salido con Min Hyuk a hacer cosas a otra ciudad, no les quedaron muchas más opciones.
Se acordaba de Ho Seok teniendo que irse a tirar la basura con los restos de la cena a los contenedores de dos calles más arriba, porque los que había delante de casa de Chang Kyun estaban tan llenos que era imposible echar una bolsa más allí.
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Summer Time » Wonkyun. MONSTA X
RomanceEn la casa de Chang Kyun había una ventana que no cerraba y por la que Ho Seok aprovechaba para colarse, con la intención de meterse en su cuarto y acaparar su sofá. Chang Kyun solía decir que lo odiaba, pero hay mentiras que por mucho que se repit...