Summer Time » Wonkyun. MONSTA X

Otras compañías #43

Chang Kyun no era una persona que se llevara bien con demasiada gente. Las personas solían tenerle estima porque, a pesar de sus rarezas, era una persona muy lista y muy amable, pero rara vez Chang Kyun quería (o requería, más bien) profundizar sus relaciones con el resto. Ho Seok era prácticamente la única persona cuya compañía era realmente cómoda para Chang Kyun. Prácticamente, porque había alguien con quien Chang Kyun se sentía todavía más a gusto que con Ho Seok, mucho más cómodo, casi en paz. Esa persona era su mejor amiga.

Se habían conocido a finales de primaria y desde el principio habían sido casi inseparables. Él era un año mayor que ella, pero eran tan parecidos en tantas cosas, al menos en las que exteriorizaban, que había sido difícil que no surgiera ese tipo de afinidad. Cualquiera que les hubiera visto juntos o conocía a ambos, podría jurar que, de haberles dicho que eran hermanos, se lo hubieran creído sin dudar ni un solo segundo. Ella se parecía muchísimo más a Chang Kyun de lo que se parecería jamás Hyung Won a él.

Ella volvió de sus vacaciones ese día caluroso de agosto y, recién se bajó del autobús que paraba prácticamente frente a casa de Chang Kyun, se acercó con la intención de picar a la puerta y darle una sorpresa al contrario.

No obstante, para cuando quiso tocar al timbre, sus ojos se encontraron con algo que logró dejar esa acción a medias.

Una vez sus ojos y los de Ho Seok (que estaba subido en el muro a punto de saltarlo para colarse en casa de los Chae) se encontraron, los dos se miraron en silencio varios segundos antes de que a Ho Seok le cambiara la cara de golpe.

Bajó de un salto del muro y se acercó hasta a la chica con prisas para terminar por abrazarla.

Ella, al igual que él y al igual que Chang Kyun, no eran demasiado de contacto físico a no ser que fuera de parte de personas muy cercanas, pero no impidió que se riera ante el gesto de Ho Seok y dejara que Ho Seok la levantara varios centímetros del suelo antes de volverla a dejar sobre la acera.

—¡Mina! ¿Dónde andabas? Hacía como seis meses que no sabía nada de ti.

La chica, riendo un poco más, dejó que él siguiera meciéndola entre sus brazos mientras ella le acariciaba la espalda y recargaba la cabeza en su hombro.

Myou Mina y Lee Ho Seok nunca habían sido personas especialmente cercanas, o que tuvieran demasiadas cosas en común que compartir como para considerarse amigos, pero sí era cierto que, incluso sin haber hablado demasiado el uno con él, sin saberse entender demasiado bien, se tenían gran estima mutua. Ho Seok, que rara vez tendía a ponerse protector y que, más bien, necesitaba que se pusieran así con él, sí que tenía cierta inclinación a serlo con Mina, tal y como Chang Kyun lo era con él y también con ella.

Ho Seok se había metido en problemas en el instituto en tres ocasiones contadas. En las dos primeras le habían arrastrado a cosas de las que él no quería formar parte, en la tercera casi lo terminan expulsando por tratar de defenderla a ella.

—En Japón, acabo de volver al país... Quería darle una sorpresa a Chang Kyun.

Ho Seok se separó y la miró con picardía. Mina, en respuesta, parpadeó con confusión y esperó a que él le diese una explicación del porqué de su expresión. Pero Ho Seok no dijo nada, simple y llanamente apartó sus brazos de ella y se volvió a acercar al muro de la casa ante la mirada de estupefacción de ella clavada en su espalda.

Se subió a la fachada y la saltó, para acto seguido abrir la puerta desde dentro e invitarla a pasar mientras le tendía una mano.

—Démosle una buena sorpresa entonces. Ya verás la cara que pone al verte. No le has avisado que venías, ¿verdad?