—Oye, ¿podemos hablar de algo?
Ho Seok llevaba tanto rato callado que, cuando dijo eso, Chang Kyun ya se había olvidado que él seguía tumbado en su sofá. Se sobresaltó de tal modo, que pudo ver perfectamente cómo el coche con el que jugaba en la consola se desviaba inevitablemente de su ruta, chocaba contra un muro y explotaba por los aires.
Cuando la pantalla de "fin del juego" apareció delante de sus narices, él tragó saliva preguntándose si la muerte tan penosa que acababa de tener era un preludio de lo que le iba a caer encima en la vida real.
Apagó la consola y la dejó apartada a un lado, todo ello muy lentamente. Con los ojos muy abiertos y confusión más que palpable en la cara, llevó su mirada hasta la de Ho Seok.
Si había hecho algo mal, no tenía ni la más mínima idea de qué podía tratarse.
—¿Qué hice ahora? —susurró.
Ho Seok le miraba desde la distancia. Él estaba sentado a los pies de la cama y Ho Seok se encontraba tumbado sobre el sofá. Había quizá cinco metros entre los dos. No era la primera ni sería la última vez que estaban cada uno en una punta del dormitorio, pero en aquella ocasión a Chang Kyun le obligó a tragar saliva.
—No has hecho nada malo —respondió Ho Seok, rascándose la nuca—. Es una tontería, ¿vale? Pero... por favor no te rías de mí, Kkukkung. Llevo cuatro años intentando preguntarte esto.
Chang Kyun le miró con intriga.
—¿Tú recuerdas cuándo nos acostamos por primera vez?
—A mediados de noviembre de 2014, sí. El día once si mal no recuerdo. ¿Por qué?
Se removió incómodo sobre la cama, y reculó hasta que su espalda chocó contra la pared que había a su espalda. Encogiendo las piernas, Chang Kyun las colocó contra su pecho, las abrazó y apoyó la barbilla sobre sus propias rodillas.
Ho Seok movía los dedos nerviosamente sobre sus muslos.
—¿Por qué me trataste tan mal ese día?
Chang Kyun abrió los ojos como platos.
—¿Qué es eso de que te traté mal?
—¿Tú recuerdas qué pasó?
—Te acabo de decir justo el día en el que pasó, cómo esperas que no me acuerde.
La distancia que había entre los dos empezó a hacérsele demasiado incómoda, impersonal incluso, y pronto se levantó y se colocó delante de Ho Seok. Nada más verle acercarse, Ho Seok había agachado la mirada, arrancándole un suspiro a Chang Kyun.
—Yo estaba molesto ese día —murmuró Chang Kyun—. Los padres de mi madre invitaron a tus padres a comer con nosotros, tú estabas en Estados Unidos para ver a tu hermana pero te viste arrastrado a todo el lío. Durante la comida no hubo los comentarios más afortunados y Hyung Won se hartó y salió corriendo de allí. Yo lo hice cuando todos acabaron de comer y lo pude hacer pasando desapercibido, y tú me seguiste porque pensaste que estaba igual de molesto que mi hermano.
—Lo estabas —murmuró.
—Lo sé, estaba muy enfadado. Habíamos tenido varias veces la conversación donde yo te decía que la violencia y el sexo son dos caras de la misma moneda, y tú me dijiste que podía acostarme contigo si quería, si un orgasmo me iba a tranquilizar lo mismo que pegarle una paliza a quien tú sabes que quería pegarle una paliza. Yo hacía meses que me moría por acostarme contigo así que te dije que sí y acabamos haciéndolo sobre la mesa de un despacho que ya no utiliza nadie.
Se calló. Estaba esperando algún tipo de intervención de Ho Seok respecto a lo que acababa de decir, pero Ho Seok mantenía la mirada seria con los labios ligeramente fruncidos sobre sus propias manos, que mantenían los dedos entrelazados entre sí.
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Summer Time » Wonkyun. MONSTA X
RomanceEn la casa de Chang Kyun había una ventana que no cerraba y por la que Ho Seok aprovechaba para colarse, con la intención de meterse en su cuarto y acaparar su sofá. Chang Kyun solía decir que lo odiaba, pero hay mentiras que por mucho que se repit...