Estuve vagando por aquel condado. Y al fin pude ver un gran cartel que ponía. BIENVENIDO AL CONDADO DE ORANGE. Era mi ciudad, estaba en casa.Pero no creo que estar aquí me ayudase.
Todo seguía igual, las casas se mantenían con su brillo, el césped tenía el mismo verde que siempre, las fuentes seguían llenando de belleza aquellas plazas en las que las palomas revoloteaban e intentaban escapar de los niños pequeños. Todo, absolutamente todo seguía igual.
A lo lejos pude divisar como cada persona disfrutaba de su nueva vida. Todo era tan maravilloso.
Seguía observando, la gente me empezaba a sonar. Y al fin vi a mis amigos, familia. Se dirigían todos juntos, estaban reunidos. Pensé que no tramaban algo bueno.
Todos vestían igual, todos llevaban ropa negra, cada cual presentaba su tristeza de distintos modos. Puede que algún familiar hubiese fallecido. Pero no era así.
Se dirigían al antiguo cementerio, aquel del que me desterraron un día. ¿Por qué iban ahí? La dirección que tomaban era la misma en la que estaba enterrada.
¿Que estaba pasando?
Y me di cuenta, hoy hacia ya 3 largos años de mi muerte. Supongo que irían a verme. Bueno a verme no, yo ya no estaba ahí. Me acerqué a ver el cementerio. Estaba reformado. Parecía la casa de algún duque. ¡Que suerte la de la gente que este enterrada aquí! Me dije.
La alma pérdida me dijo: Tú sigues aquí, ¿no lo sabías? Fruncí el ceño, no sabía de qué me estaba hablando.
A mí me sacaron de aquí hace ya bastante, ¿que me esas diciendo? Le repliqué. Me miro a los ojos, giro la cabeza de lado a lado y me dijo: aún tienes cosas que aprender, sígueme.
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Un último adiós
ParanormalUn" supuesto" coma acabó con su vida, pero sus esperanzas de vivir seguían siendo infinitas. Su única manera de seguir era cruzando la luz, pero no todo es tan fácil como en los cuentos de hadas. Me gustaría dedicar este libro a ella IVRS.
