Liam:
-Por favor no te la lleves. Por favor no la alejes más de mi.
Me encontraba sólo, de rodillas en la pequeña capilla que había en el hospital. Nunca antes me había preocupado por mi religión, sí, estaba bautizado y esas cosas, pero no iba a misa ni mucho menos. Pero todo el do en momento como estos recurres a tu Dios.
-Déjala conmigo...
Dije mientras algunas lágrimas amargas bajaban por mis mejillas.
-No son sus planes.
Escuché a mi lado. Sabía que era Zayn de nuevo, llevaba toda la noche a mi lado, sin alejarse de mí. A veces no lo vaía, a veces simplemente le escuchaba, pero cuando estaba sólo él aparecía a mi lado.
-Tu que sabes...
Dije llorando de rabia e impotencia.
-Creo que puedo saber más que tu en estos asuntos.
Dijo mienttras ambos mirábamos a la cruz que había sobre un pequeño altar.
-Me pican las alas cuando estoy aquí.
Dijo riendo. Le imité soltando una pequeña carcajada.
-Irónico.
Dije tras secar mis mejillas y sentarme a su lado.
-Bueno, en realidad no soy un ángel de Dios, es algo extraño, porque tampoco le pertenesco al diablo. Es como cuando dos padres se divorcian y tienen custodia compartida, algo así soy yo.
Dijo cerrando sus enormes alas.
-Vaya Malik, siempre te has creído más importante de lo que eres.
Le dije encendiendo un cigarrillo.
-Pregunta arriba para que veas que no miento.
Dijo él arrebatando mi cigarrillo de mis labios. Le miré con mala cara cuando lo tiró por la pequeña ventana que había a nuestro lado.
-No fumes, a ella no le gusta.
Dijo Zayn volviendo su mirada al frente. Bufé agachando la cabeza.
-Ahora mismmo sólo quiero volver a verla feliz.
Dije apoyando mis codos en mis rodillas y cruzando mis manos.
-Sabes que eso depende de ella.
Dijo él cruzandose de brazos.
-Lo sé, y me da mucha más rabia aún, no pode rhacer nada me hace sentirme inútil.
-No, nadie a dicho que tu no puedas hacer nada.
Dijo él enigmatico.
-¿Te quieres dejar de tonterías y decirme que puedo hacer?
Dije frustrado. Él bufó y se puso de pie.
-Siempre lo quieres todo hecho Payne, pero esta vez no será tan fácil.
Y desapareció sin decir más nada. Estas cosas me hacían pensar que etsaba loco, que los porros que alguna vez me había fumado años atrás comenzaban a hacerme efecto. Me reí yo sólo por mis tontas ideas y salí de la capilla. Vagaba perdido por el hospitalsin saber que hacer. Realmente no quería subir a su habitación y quedarme allí sentado sin poder hacer nada. Pero ¿qué otra cosa podía hacer? No sé si ella me necesitaba a su lado, no sé si realmente quería que estuviese con ella. Pero había algo que me empujaba a hacerlo. Supongo que Zayn tendría algo que ver en esto. Subí hasta su planta en el ascensor. Cuando llegué habían una chica que su cara me resultaba familiar con dos hombres grandes y corpulentos. Al otro lado del pasillo estaba Niall.
