-Hola, chicos, ¿qué os pongo?
-Hola Jake.-Saludó Beth. Sus mejillas adquirieron la tonalidad de una rosa.
-¡Beth! ¿Qué tal? Nunca te he visto por aquí, en cambio a tí...-Apuntó a Frank con el boli que sacó de un bolsillo del delantal que llevaba.
-Sí, soy Frank, encantado.
-Mucho gusto. ¿Y vuestros amigos?
-Louie y Jerry.-Señaló Beth a sus amigos.
-Perfecto. ¿Sabéis lo que váis a tomar?
-Yo un batido helado de chocolate, pero sin nata, por favor.-Pidió Beth amablemente y con una sonrisa.
-A mí uno igual, pero de vainilla.-Dijo Louie sonriendo también.
-Yo un café y un donut.-Comentó Jerry.
-Y yo un Banana Split.
-Un clásico. En seguida os lo traigo.-Se marchó con desparpajo y entró en el interior de la cocina. Beth lo observó hasta que se dió cuenta de que sus amigos habían fijado la vista en ella.
-Jake.-Anunció Louie frunciendo el ceño.-Tu "atropellador".
-Sí. Pero me ayudó con aquel tío en la tienda. Y esa palabra ni existe, no inventes.
-Exista o no, no cambia nada, ¡es un conductor temerario que te ha atropellado!-Reprochó el mismo.-¿No será que atrae a los problemas?
-Te has saltado tres semáforos en rojo con tal de venir aquí lo más rápido.-Recordó Jerry sonriendo.
-Mismamente.-Corroboró Beth, un poco más animada al ver que al menos uno de apoyaba.- Y te aseguro que no hay nadie aquí que atraiga más los problemas que yo.
-Eso no es verdad, y continuando con lo de Jake, a mí no me ha caído tan mal. He de admitir que es amable y se desenvuelve bien. ¿Cuántos años tiene?-Inquirió el pelirrojo.
-Ni idea, pero parece tener un año más que nosotros.-Contestó Beth dubitativa.- ¿Y tú, Frank, qué opinas?
-Qué a ese chaval lo conozco. Me suena mucho su cara. Demasiado, diría yo.
-Es cierto, a mí también, pero no creo que sea un admirador tuyo.-Bromeó Louie rascándose la barbilla.-Le voy a preguntar su apellido y su edad, ¡de algo me suena!
-No seas descarado, por favor.-Rogó Beth entrelazando sus manos a modo de súplica.-¡Louie, por favor!
-No prometo nada.
-Por favor.
-Sí, ya.-Sus ojos almendrados se entrecerraron aún más al suspirar. Se rascó la cabeza, cavilando sobre la identidad del chico.
Jerry comenzó a soltar curiosidades y nuevas noticias sobre sus avances científicos en cuanto tuvo ocasión, y sus amigos lo escucharon atentamente, pues les interesaba el tema. El tener ante ellos a un Einstein o a un Tesla en proceso no era moco de pavo.
-¿Eso significa que te vas a ir a la Universidad pronto?-Preguntó a modo de resumen Frank.
-Todavía no me han confirmado ni negado nada.-Repitió Jerry con ilusión.
-¡¿Eso importa?! ¡Debemos celebrarlo!-Rió Beth. Jacob regresó con las bebidas. Las tendió, colocando la de Beth con más cuidado. Antes de marcharse, le sonrió y creyeron ver que también les guiñó un ojo. Estaba eufórica cuando las miradas de despecho de sus amigos lo confirmaron.-¡Por Jerry y la NASA!
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Beth Winchester
Short StoryBeth es la hermana pequeña de los famosos Winchester, Dean y Sam, dos hombres con un trágico pasado y una larga vida abarrotada de historias. Aún con la cacería entre manos, los hermanos tienen pensando asentarse en un pueblucho hasta que ella acabe...