En busca de la felicidad (Hayes Grier Fanfiction) Book #2

CAPITULO→ 13

-Como eso por ejemplo-digo. Ya es tarde para que Matt hable, ya esta manejando y no hay dios quien pueda hablar con él. Se ha concentrado, la hemos cagado, bien gorda. Un silencio ahogador se posa en todo el coche. No aguanto el silencio. Voy a explotar.- ¡Que alguien saque tema joder!-grito, Matt estaciona el auto y Hayes me mira confundido.

-¿Porqué as hecho eso?-pregunta Matthew cabreado

-Perdón Matt, no aguanto estar encerrada en sitios en silencio...-digo

-Comete a Hayes y punto, ya esta-dice él.

-Por mi bien-dice Hayes

-¿Iva con segundas?-pregunto

-Si, iva con segundas-dice Matt

-MATT COMO SE TE OCURRE-me enfado- Vale que se la coma a la noche cuando estoy medio borracha o consciente a solas con él. ¿Pero en plena luz de el día con tigo en un coche? Ni hablar.-digo y Matt comienza a reír

-Hey, yo pensaba que decía de que nos besaramos, no que me la comieras-dice Hayes ruborizado. Rodeo los ojos y miro a Matt

-Vale que tenga habre. Pero ahora, en un futuro tal vez, solo tal vez se la coma. Pero ahora no.-digo

-Haber, si lo estas deseando.

-Esperar, estais...-le interrumpimos

-Esto no va contigo Grier-decimos Matt y yo.

-¿Qué no va conmigo? Estaís hablando de mi poya como si nada...-dice él.

-¡Mira! Ya teneis tema de conversación, hala, ahora a hablar de la poya de Hayes-dice Matt, arraca el auto y comienza a poner rumbo a no se donde.

-Bueno y que ¿De que tamaño es?-digo como si nada y Hayes abre los ojos como platos- ¡Que! Matt ha dicho que hablemos de eso...

-No quiero hablar de Mr. Hayes-dice y río a carcajadas

-¿Tu erección tiene nombre?-digo entre rísas.

-¿Si algún problema?-contesta enojado. Me acerco a sus labios.

-¿El señorito Hayes Grier esta enfadado?-digo

-Si, el señorito Hayes Grier esta enojado-dice

-¿Como puedo recompensartelo?-le pregunto

-Comemela-dice, le doy una cachetada en la cara, la mano se la lleva a la zona roja.-Au...-dice

-Seras estúpido...-digo. Matt no se ha enterado de nada. Menos mal...

-Perdón...-dice pero me cruzo de brazos y miro a mi ventanilla. Enojada por cierto.-sabes que no me gusta verte así conmigo. Pero disfruto cuando te hago cosas como estas por que por lo menos estoy contigo.-No le hablo, sigo viendo la ventanilla como si algo especial como por ejemplo un pandicornio comiendo bambú de nutella estuviera corriendo en una moto de nieve por la carretera.-Oh venga... ¿Que puedo hacer para que me perdones?-no le contesto. Estoy enfadada, que haga lo que él quiera, no le voy a perdonar jamás. De pronto noto una mano en mi mentón. Me gira. Le miro a los ojos azules tan preciosos que tiene. Estan mirando mis labios. Miro los suyos. De pronto sus labios rozan con los mios. Cierro los ojos y automaticamente mis manos se posan en su pecho. Los mueve lentamente. Agarra todo el brillo de labios que anteriormente me he colocado con su lengua. Le dejo paso. Su miembro entra en mi cabidad bucal y comienza a pelear con el mio. El beso aumenta. Pero algo nos corta el royo. Matthew a parado el coche, me voy a cagar en él. Abre la puerta mia. Hayes saca la lengua de mi boca. Y comienza a ponerse nervioso.

-¿Creen que no he visto ni he oido nada?-dice Matt, me llevo las manos a la cara. Hayes se rasca la nuca.-Tranquilos, no se lo voy a decir a nadie.-suspiramos. Miro a mi alrededor. Es la casa de Matt. Salgo del coche y Hayes se coloca a mi lado. Caminamos acia la puerta en un puto silencio ahogador. El rubio abre la puerta y un royo de papel hígienico sale disparado acia nosotros, Hayes me agacha.

-Gracias, creo...-digo confusa, Hayes sonríe con esa perfecta y delineada sonrísa de dientes blancos. Espera... ¿Me gusta Hayes Grier?

-¿CHICOS QUE OS HE DICHO DE MONTARLA?-grita Matt. Vamos dentro, todos menos Nash y Cameron estan aqui. Me siento en el sillón y miro al suelo pensativa.

¿Me gusta Hayes Grier? ¿Me he enamorado?

Esas dos preguntas se hacen sin parar en mi cabeza. No lo puedo creer. Siento algo por él.

-Hey, mini Dallas, ¿Porqué así de pensativa?-pregunta Carter

-Nada Cartah, nada...-digo, me levanto. Hayes esta raro. Al igual que yo, los dos pensando. Esto me huele mal...