Friends?

17. Ain't My Fault.

"No es mi culpa,
Continuas encediéndome.
No es mi culpa que me tengas tan ido.

No puedo hablar ahora,
Estoy buscando y me gusta lo que estoy viendo,
Ahora mismo haces que me sienta como impactado,
Ahora mismo no podría hablar, incluso si quisiera.

Tengo que conseguirlo mientras esté caliente.

OMG ¿qué es esto?
Te quiero metido en mis asuntos.

Bebé insisto, por favor no me culpes por lo que sea que pase después.

No puedo ser responsable,
Si te meto en problemas.

Mira, eres demasiado irresistible,
Sí, eso es seguro.

Así que si pongo tus manos donde no alcanzan a ver mis ojos,
Entonces tú eres el que me ha atrapado.

No es mi culpa si viniste aquí con ese aspecto,
Acabas de hacerme tropezar y caer en tu regazo,

Un chico malo, con un cuerpo más caliente que el sol.

Tu cuerpo me está llamando,
Y sé que donde quiera que esté,
Es exactamente donde yo quiero estar..."

Únicamente un par de horas nos separan de una de las nuevas experiencias que sé plenamente, tendremos Harry y yo.

Me encuentro tan nervioso ahora mismo.

¿Qué pasará?

¿Cómo serán nuestros rivales?

¿Podremos demostrar lo buenos que podemos ser en la cancha?

Para que me engaño, realmente esas preguntas ocupan al menos un 15 por ciento de mi mente, el otro 85 son preguntas con respecto al chico de rizos quién está sentado a mi lado poniendo atención a resolver los ejercicios de matemáticas.

¿Roncará por las noches?

¿Le gustará dormir del lado derecho o del izquierdo de la cama?

¿Le gustará abrazar a alguien mientras duerme?

¿Babeará?

¿Dormirá con pijama o sólo su ropa interior?

Sería un verdadero gusto verlo con sólo una prenda cubriéndolo. Mordí mi labio imaginándolo pero de inmediato me obligué a negar y continuar con los últimos dos ejercicios que me faltan.

—Chicos ya casi se acaba el tiempo y sólo voy a revisar otros tres trabajos, si no terminan lo traen de tarea pero ya no va a contar más a parte que tendrán doble trabajo por los ejercicios que tienen de tarea. Si quieren hacerlos aunque no siempre los hacen todo el grupo verdad —escuché al profesor hablar con cinismo y sarcasmo distrayendome justo cuando casi termino el último, puto viejo.

Termino por fin levantándome de inmediato y justo a tiempo chocando con Harry quien ya viene en sentido contrario con su hoja de ejercicios pulcramente firmada.

Me hace una mueca al instante que pasa a mi lado haciéndome sonreír al tiempo que le pellizco la cintura.

Regreso a mi lugar y el profesor abandona el aula provocando suspiros de alivio de todos en el lugar, de verdad que nadie soportaba su genio de la chingada y su maldita manera de despreciarnos como alumnado, diciendo que somos unos estúpidos y blah, un sinfín de insultos más.