Skyler

Capítulo 28

Skyler

Y así estuvimos varias horas, hablando de lo que pretendía escribir. En la tarde pusimos una sábana en la grama y nos acostamos a mirarla puesta del sol. A veces sentía que esto era un sueño y tenía miedo despertar. Mi vida ha cambiado desde la muerte de mi madre. No cambiaria mi vida por nada del mundo.

-    ¿En qué piensas? – me pregunta Ángel

-    En mi vida y en todo lo bueno que he vivido después que llegue aquí y que no lo cambiaría por nada en el mundo.

-    Yo tampoco lo cambiaria. – suspira - ¿Qué hora es?

-    Las siete ¿por?

-    Lo de César

-    ¿A qué hora es?

-    A las ocho

-    Pues déjame prepararme.

-    Tomate tu tiempo, tienes de sobra

Nos levantamos y recogimos la sabana. Entre a mi cuarto, para asearme y prepararme para la salida. Cuando termino de prepararme agarro mi libreta y empiezo a escribir. Ángel me toca la puerta.

-    Vamos a llegar tarde.

-    Perdón perdí la noción del tiempo.

-    Bueno nuestro Uber nos está esperando

-    Ok déjame agarrar mi cartera y nos vamos. Ah y una cosa más. Te ves muy guapo

-    Gracias. – se sonroja un poco – Tu también te vez bonita

-    Gracias. – le saco la lengua

-    De nada. – me saca la lengua – Después de ti dama.

-    Gracias caballero. – nos reímos los dos de nuestras estupideces

Cuando llegamos César y la novia estaban afuera esperándonos. Ángel saluda César y yo saludo a su novia.

-    Hola, soy Reyna.

-    Hola yo soy Skyler.

-    Hay que lindo nombre. – dice con una gran sonrisa en su cara

-    Gracias a mi me gusta el tuyo, nunca había escuchado ese nombre. – reímos

-    Bueno chicas vamos a entrar. – dice César

Ángel ofrece su brazo así que nos fuimos al restaurante. La estábamos pasando muy bien. Reyna me agradó bastante.

-    Ángel. – César lo llama y el mira - ¿Cuál era la buena noticia?

-    Ya tenemos vocalista. – dice Ángel muy emocionada

-    ¿Enserio? – responde César con la misma emoción

-    Si – Ángel me mira

-    Y ¿quién es?

-    Skyler. – me sonríe y yo me sonrojo

-    Bueno eso lo veremos el lunes en el salón de música.

Y así estuvimos hablando y hablando. Ya éramos las ultimas personas en el restaurante, así que pagamos nos despedimos de César y Reyna y nos fuimos. Estábamos muy cansados. Llegamos y Dany estaba en el sofá viendo televisión. Intentamos pasar si que se diera cuenta, pero no funciono.

-    Ángel ven aquí. – Dany lo llama, el me mira asustado – necesito decirte algo importante

No se dé que estaban hablando, pero parecía que Ángel le molestaba o le preocupaba algo. Lo único que alcance a escuchar fue: "Se lo voy a decir mañana, hoy la pasó mi bien y no quiero arruinarle el día". Estaba demasiado cansada para preguntar así que no lo hice. Ángel se pone de pie y me dice "Vamos a descansar que estoy muy cansado ¿tu no?" yo asiento y el finge una sonrisa. Me deja en la puerta de mi cuarto y el se va para el suyo.

-    Buenas noches. – le digo antes de que entre a su cuarto

-    Buenas noches. – me responde

Me quito la ropa y me doy una ducha muy corta. Las duchas me ayudan a dormir mejor. Cuando termino me pongo el pijama y me acuesto a dormir. Me levanto bien temprano, eran como las seis de la mañana. Intento volverme a dormir, pero no puedo, así que me pongo a escribir, porque tampoco tengo ganas de salir.

Mi historia se trata de una loba que era un guardián del sol. Esos tipos de hombres lobos obtienen su energía del sol, ellos protegen la luz de la obscuridad. También en mu historia existen los guardianes de la luna que protegen el brillo de la luna de la oscuridad. La loba llamada Alessia pensaba que era la única guardiana del sol que quedaba en la tierra. Muchos lobos sabían de su existencia y por esa razón ella huía de todas las personas que le querían hacer daño, porque si capturaban a cualquiera de los dos tipos de guardianes le daban una gran recompensa por capturara la viva o muerta. Ella vivía en el bosque porque no podía vivir en una ciudad y siempre estaba en su forma lobuna ya que no tenía ropa. Un día ella estaba tomando agua y recibe este olor a chocolate. ¡Era su mate! Ella nunca quiso conocer a su mate así que empezó a correr en dirección contraria de donde provenía el olor. Ella logro evitar a su mate, pero sabía que no podía evitarlo toda su vida. Lo evitó por unos cuantos días, pero un día volvió el olor y empezó a huir otra vez, lo único que unos lobos la rodearon y la atacaron, pero su mate la salvo. Ella estaba muy débil así que la llevo a su casa, desde entonces ella y el se empezaron a conocer y se dieron cuenta que los dos eran guardianes, la única diferencia era que ella era del sol y el de la luna. Él tenía un libro de una leyenda que decía que los guardianes del sol y la luna iban a tener una guerra con la obscuridad y que el poder de los dos guardianes reencarnará a mas guardianes y liberaran la tierra de oscuridad. Ellos se prepararon muy bien para la guerra. Reclutaron a los pocos guardianes que había para vencer a la oscuridad. Cuando llego el día ellos y la oscuridad estaban frente a frente. La oscuridad le sobrepasaba por muchos, pero a ellos no les importo. Empezaron a pelear y los guardianes estaban ganando por que las dos fuerzas de los guardianes era mayor. ¡Ellos ganaron! Y había mucha paz en el reino después de mucho tiempo. Y ellos vivieron felices por siempre.

Estuve escribiendo varias horas. Mi concentración fue interrumpida porque alguien me tocaba la puerta.