Skyler

Capítulo 41

Ángel

Después de ese ataque de ansiedad de Skyler estaba preocupado. No quería que pasara por lo mismo que yo.  Tampoco quería practicar, estaba dispuesto a no ir este año a las competencia, no me importaba. No la podía convencer, así que decidí seguir y hacer la práctica. Al llegar todos nos acomodamos y le pide un baúl viejo a Skyler para que se sentara. Cantó extremadamente bien esta vez. Después de practicar por varias horas, Skyler se veía muy bien, con energía y feliz, pero nada me costaba preguntarle si estaba bien.  Lo cual me contestó que si, estaba un poco más tranquilo. Después de hablar un poco me fui a la habitación me aseé y me quedé en mi cama, pensando y preocupado. Después de unos minutos decidí ir a Cuarto de Skyler. Salgo de mi cuarto y me dirijo a hacia su cuarto. Me detengo en frente de su puerta. Iba a tocar, pero me arrepiento, así que volví a mi cuarto y a mi cama. A los pocos minutos me tocan la puerta. Me levanto y la abro, era Skyler. La casualidad era demasiada. Después de tener esa charla con ella me voy a dormir. A la mañana siguiente me levanto, me aseo y me visto. Al salir veo a Skyler esperando por mí. Nos fuimos a la escuela. Skyler no se veía nerviosa, extrañamente se veía calmada. Hicimos nuestro  las audiciones. Tenía mucha confianza, Skyler cantó como nunca y todos estábamos coordinados. Terminamos de almorzar y nos fuimos a clases. Al salir de todas las clases fuimos a ver si entramos a la competencia. Deje que Skyler fuera la primera en enterarse, pero al final fui yo. Cuando la abrace sentí que había algo mal ella. Ella no reaccionó ni se movió, parece que estaba en shock. Era normal. De un momento a otro ella se fue y la vi entrar al baño. Le pregunté a Reyna si podía ir a ver si estaba bien y ella aceptó. Se tardaron un poco pero después salieron las dos juntas y me calmé un poco. Al llegar a mi casa, entro a mi cuarto y me acuesto, para después levantarme y asearme y volver a la cama. Me duermo, pero no por tanto tiempo, salgo para beber un poco de agua y veo a Skyler en el suelo, tenía miedo de que le haya pasado algo pero después la veo que levanta el brazo. Después de eso y de una platica me fui a prepararme para salir. Salimos y llegamos al restaurante. Salude la los chicos y nos sentamos. Empezamos a hablar. Pedimos nuestra comida y seguimos hablando. Skyler no había dicho nada hasta que llegó la comida y nos dijo buen provecho. Al terminar la cena nos despedimos y llame a mi madre para que nos buscara. Cuando llegó nos llevo a casa. Nos dijo que iba a llegar muy tarde que no la esperemos. Al decir eso se va y yo me voy a mi cuarto. Estaba cansado. Me cambio y me acuesto. Me vuelvo a levantar con mucha sed,  así que salgo y me llevo la sorpresa que Skyler estaba despierta en la sala acostada en el sofá mirando el techo. Debe estar aburrida. Decidí ponerle nuestra cuenta de Netflix y hacerle un perfil después de eso me despedí de Skyler y me fui al cuarto.  Se me había olvidado tomar agua. Después de unas cuantas horas de dormir me levanto otra vez por sed. Salgo de mi habitación, veo que Skyler se había ido a su cuarto. Voy a la cocina y me sirvo un vaso de agua. Me lo tomo y lavo el vaso.  Iba a ir a mi cuarto, pero escucho algo caerse dentro del cuarto de Skyler. Quería ignorarlo, pero no pude. Algo me decía que tenía que abrir esa puerta. Tenía un mal presentimiento, pero decido acercarme. Me acerco a la puerta de Skyler, la escucho hiperventialndo y llorando. Abro la puerta rápidamente. Y la veo en el suelo con el cuello ensangrentado. Me siento al landó de ella y la agarro

— Hey, estás pasando por lo mismo de la otra vez.– le digo con una voz calmante

— Ángel no respiro. – le agarro las manos para que se deje de rasguñar el cuello. Sus manos estaban cubiertas de sangre y no podía ir a buscar vendas porque me tenía que quedar para que pudiera pasar el ataque e ansiedad

— Vas a estar bien, tranquila. – le secó las lágrimas las cuales no dejan de salir. Con cuidado la coloco en el suelo y le oprimo el pecho, lo cual hace que ella me empuje y hace que algo caiga, pero no le prestó atención