Capítulo 27

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Ángel

Me levanto para ir a la escuela, pero me di cuenta que era sábado y me volví a dormir, pero me levanta el sonido del celular. Contesto sin mirar.
-    ¿Hola? – dije con mi voz de recién levantado. A mi no me gustaba que me levantaran
-    ¿Estabas durmiendo? – me pregunta la persona
-    Mjmm y quiero seguir durmiendo – le digo
-    ¿No sabes quién soy? - obviamente no sabía quien era
-    Nop – no me había fijado en quien era
-    Soy César. – al fin le reconocí la voz
-    ¿Qué paso? - abro los ojos y me siento el la cama
-    Vamos a salir. - eso suena interesante
-    ¿A dónde? - espero que escoja un buen lugar
-    No sé a comer. - exacto a comer
-    ¿Tu y yo solos? – me vuelvo a acostar en la cama
-    No yo con Reyna y tú con Skyler.
-     ¿A qué hora?
-    A las ocho.
-    Déjame preguntar a ver si quiere. Ahora que me acuerdo te tengo una excelente noticia. Y una pregunta. – le digo un poco emocionado
-    La pregunta primero
-    ¿Sabes? Te voy a dejar con duda. – rio mental mente
-    No entiendo.
-    Te dije que te iba a hacer una pregunta y te iba a dar una buena noticia ¿verdad?
-    Si
-    Pues te voy a hacer la pregunta.
-    Pues dale.
-    ¿Cuándo empiezan las inscripciones de bandas?
-    El miércoles y el viernes es la selección ¿por? – me quedo callado para que analice – No sé por qué preguntas porque no tenemos vocalista, ósea la banda no esta completa. – una pequeña risa sale de mi – Ángel, no me digas que encontraste vocalista. – me quedo callado otra vez – Ángel – casi grita – No te quedes callado. ¡Ángel! – me grita
-    Yo te dije que te iba a dejar con la duda. – río – ¿Dónde vamos a comer?
-    No me cambies el tema. – estaba enojado
-    ¿Dónde vamos a comer? – le vuelvo a preguntar
-    En Golden Coral. – me dijo mas calmado
-    Pues allá nos vemos.
-    ¿Me vas a dejar así?
-    Sip. Bye
-    Bye
Cuando termino la llamada me vuelvo a recostar y me vuelvo a dormir. Cuando me levanto ya eran las 2 de la tarde. Me aseo y salgo de mi cuarto. Me dirijo a el cuarto de Skyler. Le toco la puerta y espero a que ella abra. Se tarda un poco, pero abre.
-    ¿No te da la curiosidad de verme tocar? – le digo
-    ¿Ni un hola o unos buenos días, perdón tardes? - me dice algo enojada
-    Woa. Si estas enojada no es mi culpa, no vengas a desquitarte conmigo. - levanto las manos
-    Perdón, yo se que no es tu culpa. Es la frustración.
-    ¿Frustración de qué?
-    Olvídalo.
-    Bueno la voy a dejar pasar porque quiero enseñarte como yo toco. Acuérdate soy el mejor. – le guiño un ojo
-    Como digas. – ríe
Nos fuimos al sótano donde tengo mi batería hace tiempo no toco, pero se que no he perdido la chispa. Entramos al sótano, destapo la betería ya que tiene una sabana para que no tenga tanto polvo y me siento en la silla. Sentarme aquí me trae recuerdos dolorosos.
-    ¿Estas bien? – Skyler me saca de mis pensamientos
-    Si ¿por qué?
-    Es que te quedaste ahí mirando sin decir nada. – hace una media sonrisa
-    Es que me estaba acordando de cosas... - no dije mas nada porque no quería que Skyler supiera
-    ¿Qué cosas?
-    No es nada importante. – sonrío sin ganas
Empiezo a tocar. Me dejo llevar por la música y saco mi mente de lo que estaba pensando. Se me había olvidado la sensación de tocar la batería. Cuando termino de tocar la batería Skyler me aplaude.
-    Es verdad, eres muy bueno tocando la batería. – me dice
-    Y tu muy buena cantando.
-    Claro que no. – rueda los ojos
-    Tú sabes que sí. – río
-    Quiero escuchar más. Sigue tocando.
-    Me cambiaste el tema, pero está bien voy a seguir tocando.
Seguí tocando. Estuve mucho tiempo tocando. Decidí tomar un descanso. Como siempre Skyler se ofreció a cocinar y obviamente no me negué. Skyler me manda a buscar su celular porque siente que se le olvido un ingrediente y quiere verificarlo. Entro a su habitación y busco su teléfono. Escucho que algo cae al piso. Había un cuaderno en el suelo. La mitad de mi interior me dice que lo deje ahí y no lo abra, pero la otra mitad me dice que lo abra. No debería hacerlo así que dejo el libro en donde creo yo que estaba y sigo buscando el celular. Después de una búsqueda infernal lo encuentro. Iba a salir, pero no podía con la curiosidad. Busco el libro y lo agarro. Mientras lo abría me decía mentalmente "Ángel no lo hagas devuelve el libro" "¿Y si es un diario y te enteras de algo que no deberías saber?" Cuando lo abro empiezo a leer. Era como un cuento o algo así pero no estaba completo. Tenia como tres o cuatro oraciones. Parece ser que es interesante pero como que se quedo sin ideas. Talvez por eso estaba enojada esta mañana. Escucho que Skyler me llama y rápidamente pongo el libro donde estaba.
-    ¿Por qué tardaste tanto?
-    Porque no encontraba tu celular. Aquí esta. – le entrego el celular
-    Me faltaba un ingrediente.
-    ¿Cuál?
-    Una de las salsas.
-    Oh. ¿Cuándo le falta a la comida? Tengo hambre.
-     No mucho
-    Skyler. – me mira – Cuando estaba buscando tu teléfono encontré algo más...
-    ¿Qué encontrarte? – me dice un poco nerviosa
-    Tu libreta. Te lo juro no quería abrirla, pero la curiosidad me mató y...
-    Bueno, - me interrumpe - ya lo leíste que puedo hacer. – se da la vuelta
-    Perdón. No era mi intención no debí haber le...
-    Tranquilo, - me vuelve a interrumpir – no te tienes que disculpar. – me dice sin mirarme
-    Pero como quiera lo que leí fue interesante
-    ¿Enserio? – se da vuelta
-    Si. ¿por eso era que estabas enojada? ¿Por qué no podías escribir?
-    Si, es que me frustra no tener ideas para escribir.
-    ¿Y qué piensas escribir?
-    Pues...
-    Espera – la interrumpo – antes que se me olvide César nos invitó a salir. ¿Te interesa ir?
-    Claro
-    Bueno, puede seguir contando su historia.
-    Pues si como te decía...

SkylerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora