Vampire Story (H.S.) | Ella Bel

DULCE PLAN DE VENGANZA

Timbre del receso.

-Musica para mis oidos -suspiré.
-Jennifer no hemos estado en clase.

Era verdad, no entramos a la clase de matemática. El profesor era un señor lentudo aburrido con mas canas que neuronas que ya no deberia enseñar ¡Tiene mas años que la mismisima biblia! Y ya nos sabíamos las clases como unas genias.

-Pero ahora si podremos ir al comedor -sonrei y jalé a Perrie.
-¡Perrie! ¡Jane! Amo sus vestidos, ¿iran el sabado? -se acercó Maison, mirando indiscretamente nuestros escotes; con Jessy, su amiga enamorada.
-¡Pool party! -gritó ella.
-¿Sería legal perdernos esa fiesta? -preguntó Perrie.
-Nos vemos el sábado -guiñé el ojo a Maison y se mordió el labio.

Seguimos caminando y Kean, un idiota de sociologia, pasó por nuestro lado diciendo:

-¡Dios! ¡Les doy! y no consejos -nos sonrió picaramente. Era un descarado de lo peor.
-Púdrete -le saqué mi hermoso dedo del medio y él se fué carcajeando.
-¿Y que le harás a Lucas? -me preguntó Perrie.
-Me conoces. Tengo a mi esposito y él me ayudara.
-Me emociona -chilló dando un saltito y yo reí por su actitud infantil.

Entramos al comedor saludando y reuniendonos con compañeros, amigos, robafamas y envidiosos. Eramos las típicas populares, nos conocemos la universidad mejor que nuestras mansiones. Nuestros tacones resonaron en el vacío que nuestra presencia desapareció. Claro que estaban los típicos ratones de biblioteca al fondo con tantos libros que la mesa amenazaba con caerse.

-Jane, Jane te estuve buscando -dijo agotado Lucas acercándose aquí. Mi sangre combustionó y Perrie se alejó un poco dándome espacio-. ¿Dónde miércoles te habias metido?
-Te aseguro que no me revolcaba con tu enemigo -le planté una cachetada que dejó marca.
-Perra -musitó y alzó la mano para devolverme el golpe, pero Kean le agarro la muñeca y le hizo una especie de llave.
-¿Qué me dijiste? ¡Anda! ¡Repite si eres tan machito! -le grité llamando la atención de los que llegaban.
-Ya te conseguiste perro faldero, y uno de mal gusto eh -se burló y Kean le dobló más la muñeca haciéndolo gemir.
-Y tú consolador, que además aulla y ladra.
-¿A quién le has dicho zorra y perra?

Dijo esa voz chillona que despreciaba tanto y me causaba asco. Miré sobre mi hombro una blusa de ramera, una minifalda de ramera y un rojo puta en sus labios inflados.

-Pues al aborto fallido que estoy viendo -dije volteándome y mirándola fijamente a los ojos.
-Y qué te has creído tú para llamarme así.
-No vales perder mi tiempo -giré y volví a dirigirma al maldito infiel de Lucas-. Te tengo unas sorpresitas.

Hize una seña a Kean que lo soltara y al hacerlo Lucas se cayó haciendome reir burlonamente.

-Tienes un corazón de piedra -me dijo frotándose la mejilla roja.
-Y tú más semen que cerebro -contraataqué y me fuí con Kean y Perrie dejándo a todos los espectadores que llegaron con nosotros con la boca abierta de la impresión y algunos asentían satisfechos. Todo el King's college se había enterado de la infidelidad. Sonreí cínicamente a Georgie que pasó por mi lado susurrando "apuesta". Me senté en una mesa y varios se sentaron conmigo. Conversamos hasta que el receso terminó.

-Iré donde el psicólogo -susurré a Perrie.
-¿Porqué? -me preguntó sonriendo al frente.
-Me siento sola y mis padres nunca están en casa -fingí tristeza y ella captó al instante.
-Suerte -se despidió de mí y entró a su clase de historia universal.

Vamos Jane, no hay marcha atrás, siempre segura y el profesor es todo mío.
Entré a su despacho, que tenía la puerta abierta, y él estaba leyendo un libro. Alzó la vista a mí y sus ojos grises casi me intimidan. Me indicó con una mano que tomara asiento. Negué con la cabeza, dí la vuelta y cerré con seguro.