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Laboratorio #115 de la Synthetic's Life
9 de Marzo del año -107*

Gritó de forma agónica, expulsando de su cuerpo aquel ser, que había albergado durante seis meses.

Pudo escucharlo llorar, y producir una serie de sonidos extraños, como un pequeño cachorro quejarse.

Su vista fue nublándose poco a poco, hasta finalmente perder la consciencia.

—Es un macho, la número treinta y seis tuvo un macho —pronunció una mujer vestida con bata blanca, guantes y barbijo, tomando a la criatura en sus manos.

El pequeño no dejaba de llorar, moviéndose inquietamente en las manos de aquella médica.

—Tres kilos ochocientos. Cincuenta y dos centímetros de largo —pronunció mientras lo pesaba y medía—. Sus ojos se encuentran cerrados. Es uno de ellos.

—¿Cuál es el estado de la gestante? —preguntó una voz del otro lado de la habitación.

La médica dejó al niño en una incubadora, y se acercó a la joven madre.

—Sus signos vitales son muy débiles. Quizás no pase la noche.

El pequeño bebé continuó llorando, un llanto que expresaba claramente la necesidad de su madre, de sentirla.

La incubadora donde se encontraba, tenía un número en su tapa, ochenta y tres.

-o-o-o-o-

—Veinticinco años después—

—Coman —ordenó uno de los guardias, tirándoles un plato de comida a cada jaula, dónde se encontraban los muchachos.

—Siempre tan amable —ironizó un joven rubio, tomando el plato de plástico.

Tomó entre sus uñas el trozo de carne, y lo alfateó, antes de llevárselo a la boca, y darle un mordisco.

—¿Qué tal está, 83? —Preguntó curioso uno de los jóvenes.

—Asqueroso, o sea, normal —le dijo encogiéndose de hombros—. No tiene nada.

—¿Alguno sabe algo de 118? —preguntó preocupado un joven castaño—. Después del último experimento, no lo he vuelto a ver.

—No —dijo otro muchacho, moreno—. Tal vez se está recuperando. Ya saben como son esos hijos de putas.

"¡Ya dejen de hablar, y terminen!" exclamó una voz desde un alto parlante, escuchándose muy molesta.

—Puff, parece que no coge desde hace tiempo —rio el rubio, revelando una exótica dentadura blanca, y de dientes que terminaban en punta, curvados levemente hacia atrás.

—Mejor que no te escuche diciendo eso, 83. Según oí —murmuró 107, el moreno—. La mujer lo engañó con el director —rio con lo último.

Una risa ronca y divertida se escapó de 83.

—¿Por qué no me sorprende? Si no es más que un gordo soberbio. De seguro ni satisfacer a la mujer podía.

"Tienen tres minutos para acabar. 83 y 98, contra la pared. Conocen el protocolo."

—No terminé el manjar aún —le dijo 83, enseñándole el plato.

"Me importa una mierda, lo hubieras pensado antes de perder el tiempo."

—Es una lástima desperdiciar esto —negó con la cabeza, sonriendo con burla—. Por cierto ¿Cuál es el ingrediente secreto del chef? ¿Lo que cagó ésta mañana? —preguntó haciendo reír a sus compañeros.

Sí, de seguro le darían una buena golpiza. Pero no le importaba.

Después de todo, siempre buscaba salir herido. Sólo de esa forma, podía ver a Cassandra Meyer. Una de médicas encargadas de las sanaciones.

...

*-107 el guión corto, representa al número desconocido del año ❤💕

¿Kha? ¡¿Otra historia?! Si uwu jajajaj aquí está la historia de las que les hablé en Synthetics Girl ❤💕
A modo de introducción, empezaré con la historia de 83/Lyon 💕❤

83/Lyon -Rebelión #1-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora