Después de aquel domingo, parecía que las cosas se fueran encarrilando. Marinette consiguió que su padre le levantara el castigo por insistencia de Sabine, eso sí, advirtió de ayudarlos durante los fines de semana en la panadería hasta nuevo aviso.
Por otro lado, en la mente de la muchacha persistía la duda por el comportamiento de su compañero, no logrando conciliar bien el sueño en la noche anterior. Daba gracias que volvería a verse con el rubio en clase y podría disipar el desasosiego que la abrumaba.
Al llegar al centro de estudios, los nervios la asaltaron de repente, no solo por la inquietud que se había instalado bajo su pecho desde su último encuentro con el joven Agreste, sino también porque era su primer día de instituto siendo su novia oficial.
¿Cómo debía reaccionar al verlo?¿Sería correcto besarlo al saludarle o quizás debería actuar como siempre?
Sus pensamientos se vieron interrumpidos cuando al cruzar el pasillo principal alguien palmeó su espalda, haciendo que se sobresaltara y girara en redondo con la exaltación apreciándose en sus rasgos.
- ¡A-alya!- exclamó asustadiza, llevándose una mano al pecho-. ¡Me has dado un susto de muerte!
- Uy, perdona...- bromeó con una sonrisa torcida, examinándola de arriba a abajo-. ... Mm... Interesante.
La azabache arqueó una ceja, mirando a su amiga con curioseo.
- ¿Ocurre algo?- inquirió en un tono precavido.
- No, nada...- negó en un canturreo, ojeándola con pillería-. ... Solo que pensaba que vendrías en silla de ruedas.- su opuesta hizo una mueca irresoluta, haciendo que la morena se aproximara más a ella para susurrarle con incitación-. Me refiero por la follada con Adrien.
- Po-por dios, ¿por qué tienes que llamarlo así?- espetó con las mejillas intensamente sonrojadas.
- Soy clara, chica.- murmuró con indiferencia, soltando una risotada-. ¿Y bien?¿Te dolió?¿Folla bien?
- N-no pienso contestarte a eso.- refutó encaminándose hacia el aula.
- Eso quiere decir que... ¿Es pasiva?
- No empieces tú también con eso...
- Entonces, dame detalles.- animó con voz provocadora-. Venga... ¿Te gustó?¿Cuánto le mide la poll...?
- ¡Y-ya!¡Para!- protestó la ojizarca escandalizada, deteniéndose justo frente la puerta del salón-. E-eso no es algo que te incumba.
- ¡Vamos!- lloriqueó con la curiosidad tirando de ella-. Por favor, cuéntame...- peticionó con las manos juntas en forma de súplica.
La euroasiática sabía perfectamente que la Césaire no iba a rendirse fácilmente, mirándola por el rabillo del ojo en una postura resignada.
- Bu-bueno, solo diré...- se relamió los labios, abrazándose a sí misma con la vista puesta en el suelo-. ... Que folla... Muy bien.
- Gracias, Bugaboo.
La aludida se tensó de repente al oír esa masculina y conocida voz proveniente de sus espaldas, volteándose mecánicamente con los ojos abiertos ampliamente y sus pómulos teñidos de un subido carmesí.
Adrien estaba junto a Nino, el cual se posicionó al lado de Alya en el acto mientras la de cabellos oscuros intentaba mirar a la cara a su novio.
- A-adrien...- nombró con la respiración agitada y el pulso desbocado.
El susodicho lucía con el pelo ligeramente alborotado, sonriendo con coquetería ante la mirada anonadada de su pareja y la entretenida de la de sus respectivos compañeros de lentes.
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||+18|| ▪TURN ME ON ▪ ➤ ADRINETTE
Fiksi PenggemarDefraudado por su madre, Adrien Agreste se convierte en un casanova sin ningún tipo de aprecio hacia las mujeres; aprovechándose de su atractivo para acostarse con ellas sin sentimientos ni lazos de por medio. Su máscara de perfecto insensible parec...