Choose © [Paulo Dybala]

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-¿Por qué yo? -rodeé los ojos.

-Porque... -se rascó la nuca- No sé, haceme la segunda.

-Suspiré- Pero sabes que está mal, ¿no? -lo miré fijo.

-Si, pero sos la única con la que puedo contar -elevó sus hombros- Además nos viven jodiendo y la viven flasheando, ¿no?.

-Si... -tragué saliva- Además somos mejores amigos -asentí sin dejar de mirarlo- No pasa nada po...

-Unos meses -asentimos- Bueno, entonces, ¿trato hecho?.

Estiró su mano y algo nerviosa la estreché con la mía.

Mas vale que no haga nada malo.

(...)

Y si, había aceptado un trato demasiado riesgoso con Paulo. No sabía los motivos, jamás me los había dicho, pero sin embargo lo había aceptado.
Se trataba de fingir ser su novia por unos meses. En el trato se habían aplicado varias reglas, y más mías. Dentro del trato Paulo había puesto el no decirme el por qué, hasta que terminase todo.

Y bueno, me hubiese costado mucho decirle que no, se lo debía despues de todo.
Y aunque se me hacia loca la idea de ser "la elegida" me parecía un buen gesto como amiga.

(...)

-¿Pero qué dices? -los ojos de Sanni saltaron media galaxia.

-Que es mi novio -sonreí.

-¿En serio? -se paró del asiento.

-Si -susurré- Sentate, antes de que llames la atención de la gente y escuchen de lo que hablamos -hice una mueca.

-Pero es que -gritó en silencio- No me lo creo.

-Bueno... -elevé mis hombros- Era muy obvio ¿no?.

-Sii -relajó su cuerpo- Sabía que le gustabas, aunque... -frunció el ceño- Parece medio pronto.

-Si -suspiré- Pero en fin, lo importante es que estamos juntos y...

Paré de hablar cuando ví que Gonzalo y Paulo entraban a la cafetería. Mi corazón dió unos latidos demás y mis manos me transpiraban un poco.
Apenas conecté la mirada junto con la de Paulo, éste me sonrió y guiñó un ojo.

Por dios.

-¿Qué hacen acá? -le pregunté a lo bajo a Sanni.

-Los invité -se llevó el batido a la boca- ¿Por qué?, ¿está mal?.

-No pero...

Se acercaron.

-¿Interrumpimos algo? -Gonza le sonrió a Sanni.

-La verdad...

-No -me interrumpió Sanni.

-Bueno, entonces, ¿nos podemos sentar? -Paulo señaló el lugar vacío que se encontraba al lado mío. Gonzalo había optado por sentarse en frente con Sanni.

Asentí.

-¿Cómo estas? -Gonza le susurró en la oreja a Sanni.

Yo sólo miré a Paulo algo nerviosa. Acto seguido, paso uno de sus brazos por mis hombros, acercándose más a mi.

-¿Y?, ¿no hay chape? -Gonza nos miró- Los novios se saludan con besos.

Mire a Paulo nerviosa, y pude notar su cara super relajada. En cambio yo, me estaba por morir.

-¿Y? -ahora fue Sanni.

Paulo me miró con cara de ¿me acerco?, y yo no hice nada. Simplemente lo miraba.
Hasta que en dos segundos, negué con la cabeza. Asintió y me dió un beso en el cachete.
Sentí un alivio.
No estaba lista.

-Buuu -los dos nos abuchearon.

-Bueno che, basta -dije sonriendo nerviosa.

-¿Pidieron algo? -preguntó Paulo.

-Gonzalo le hizo seña a la mesera, y enseguida vino- Cuatro batidos, porfavor.

Cuando se retiró, noté que Sanni, Paulo y Gonza habian empezado a mirarse nerviosamente, intentando decirse algo.

-¿Qué pasa? -fruncí el ceño.

-Nada... -agregó Gonza sin mirarme.

-Ganni -susurró Paulo.

-Na -sonreí- Que sea joda

-No lo es -se resignó Sanni.

Me paré de la mesa y los abracé con fuerza a los dos. Estaba orgullosa de mis pimpollos.

La mesera trajo los batidos y me senté con algo de vergüenza.

-Por las parejas de la Juventus -Soltó Paulo elevando el batido.

-Por las parejas -Siguió Gonza.

Y yo, que moría de nervios por dentro.

Sabiendo, que todo era una mentira.