XVII

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JAYDEN POV

El camino hacia el lugar que Emily describió se está convirtiendo en una verdadera odisea encontrarlo, no tenemos algo seguro de en qué parte esta o por donde debemos ir, solo seguimos nuestros instintos y confiamos en la mejor amiga de Kiara.

El atardecer ya está haciendo su aparición en el cielo, los colores rosado y naranja están tiñendo todo lo que encuentran a su paso, y sinceramente la esperanza de encontrar a Kiara sana y salva es lo que más me importa en estos momentos; los arboles comienzan a rodearnos y con eso el tiempo empieza a agotarse.

– ¡Detente!–grito Emily logrando asustar a Aria y a mí.

– ¿Qué pasa?–pregunto Aria confundida.

–Creo que estamos cerca–respondió Emily–conduce, pero más despacio–dijo a lo que yo empecé a manejar de nuevo, pero esta vez con mucha más calma.

Literal estaba conduciendo como una estúpida tortuga, mientras que Emily era la única que observaba detalladamente todo el lugar ya que ella fue la única que logro verlo cuando se desmayó.

–Chicos en serio no estoy segura de esto–dijo Aria.

– ¿Por qué?–pregunte sin despegar los ojos del frente.

–No sabemos realmente donde tienen a Kiara–contesto ella– ¿y si en verdad es una trampa de Nadia?–pregunto con nervios.

–No lo creo–respondí–además Emily es la mejor...

–Aquí es–dijo Emily feliz–detente–hablo de nuevo y yo obviamente le hice caso.

– ¿Estas segura?–pregunto Aria.

–Cien por ciento segura–contesto Emily abriendo la puerta del auto para luego salir de este.

Aria y yo también nos bajamos del auto y empezamos a seguirla hasta un punto en el que ella se detuvo enfrente de varios árboles y su mirada se perdió con el vacío que estaba allí.

– ¿Por qué te detuviste?–pregunte confundido.

–La noche ya ha reclamado lo suyo–contesto ella–está demasiado oscuro y no tenemos nada con que alumbrar–hablo de nuevo.

– ¿Estas bromeando?–pregunte con sarcasmo.

– ¿Por qué?

–Somos estrellas–respondió Aria.

–Nuestra naturaleza es brillar y guiar a las personas en el camino–dije yo.

–Tienen razón–dijo ella con algo de vergüenza.

Aria y yo nos colocamos enfrente de Emily y nos relajamos un poco en medio de la oscuridad, no había ruido en ningún lugar y lo único que podía escucharse en ese lugar abandonado eran nuestras respiraciones, poco a poco de nuestro cuerpo comenzó a brotar una luz realmente brillante y agradable.

–Ves–dije y luego los tres comenzamos a caminar de nuevo.

Nos adentramos a ese bosque totalmente nuevo para nosotros ya que ninguno ha estado en este lugar, ahora el ruido que se puede escuchar es el de nuestros pasos ya que las hojas secas juegan en contra de nosotros, el crujir de las hojas es demasiado fuerte y eso provoca que Aria se llene de nervios.

–Traten de caminar despacio–dijo Emily.

–Está bien–respondimos Aria y yo al mismo tiempo y en ese preciso momento un fuerte trueno inunda el lugar y comienza a rugir por el cielo.

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