El arte de caer {Terminada}

Capítulo Seis.-

-Jazmín, Jazmín, ¡JAZMÍN!.- Gritaba desesperado Drew.-

Despertó de golpe sentado en la cama, miró a su alrededor, había sido un sueño, un horrible sueño, bueno, desde cuando apareció Dafne solamente. Drew vió que no era su habitación, era la de su madre, pero ella ya no estaba, mejor pensó, así no hubiera escuchado como gritaba por Jazmín. Se levantó y se dirigió a su habitación para ducharse, iría a buscar a Jazmín, estaba decidido. Alrededor de las 10.00 am. Las Familias Hamilton y McHale se dirigían al hospital a buscar a Jazmín, habían decidido almorzar juntos para celebrar la mejora de salud de Jaz. Jazmín se alegró de ver que estaban todos juntos pero vió a Drew y su cara cambio, no realizó ningún comentario ya que no quería matar el bello momento, Drew caballerosamente la sostenía del brazo para asegurarse de que estuviera bien, los dejaron un momento a solas para cancelar la cuenta del hospital y Jazmín pensó que era momento de hablar con él.

-¿Qué desayunaste hoy que nació una caballerosidad en ti?.- Dijo Jaz apoyándose en la entrada del hospital.-

-Ja, que chistosa. Nada solo quería compensarte de alguna forma que le hayas mentido a tu madre para defenderme.- Dijo Drew desinteresadamente.-

-Aunque no lo creas, no quiero que mi madre piense erróneamente acerca de ti, sé que en algún lugar de tu interior tienes sentimientos.- Dijo apuntando a Drew, achinando sus ojos.-

-Bueno, como quieras. Esta caballerosidad que estás viendo no durará por mucho tiempo, tiene fecha de caducación.- Dijo Drew chistoso.-

-Te creo.- Dijo Jazmín chistosa.-

Ambos creían que comenzarían a llevarse mejor en poco tiempo, aunque les costará un poco más de paciencia.

Las familias se dirigieron hacia el departamento de los McHale, cocinarían pizza, como festín. Cuando ya estaban comiendo alegremente, Jazmín dio una noticia.-

-¿Saben? Tengo ganas de trabajar, como un pasatiempo, no importa cuanto sea mi sueldo, solo lo haré porque quiero. ¿Qué piensan?.- Dijo Jazmín con alegría.-

-Me parece excelente, si así es como quieres gastar tu tiempo libre, es tu decisión. Te apoyo cariño.- Dijo con ternura Marie.-

-Me parece increíble, puedes ahorrar tu propio dinero y gastarlo como tú quieras, aparte algunos trabajos son divertidos.- Dijo sonriente Pattie.-

Drew guardó silencio, se encontraba muy ocupado con su trozo de piza como para opinar. El almuerzo continuó en partes de que carrera ambos querían estudiar, Drew se retrasó un año debido a su crisis emocional, por culpa de Dafne y Jazmín le correspondía de acuerdo a su edad. Jaz quería estudiar Teatro al igual que Drew, cosa que ellos no sabían. Y continuo el resto de comida con chistes por parte de todos, Jazmín impresionó con su humor negro y a veces, solo ella terminaba riéndose, en cambio Drew era corto y preciso y carcajadas por montón. Terminado el almuerzo Pattie y Drew tuvieron que irse, Pattie debía controlar de nuevo el restaurant y Drew, bueno, Drew robar aire en el local. Jazmín se fue a recostar un rato y pensó en una idea y decidió contárselo a su madre.

-Madre.- Llamo Jazmín a su madre.-

-¿Paso algo hija?.- Pregunto Marie preocupada.-

No nada, solo, pensé en una idea y quise compartirla contigo.-

-Háblame sobre eso hija.- Dijo Marie intrigada.-

- Estaba pensando si, quizás, podría ir a pedirle trabajo de mesera en el restaurant de la tía Pattie. ¿Crees que sea buena idea?.- Pregunto Pattie expectante.-

-Prefiero que trabajes con alguien que conozco a que trabajes con alguien que no sea confiable. Pattie es confiable, no veo porque diga que no, me parece buena idea.- Dice alegremente Marie.-

- Gracias madre, ¿Crees que sea una buena hora para ir?.- Dice Jazmín.-

-Por supuesto, ¿Quieres que te vaya a dejar?.- Preguntó Marie.-

-No, quiero tomar aire fresco, caminar no hace mal. –Dijo Jazmín.-

-¿Hija te sientes bien? Tú eres sedentaria, evitas a toda costa el deporte.- Dijo divertida Marie.-

-¡Madre! ¿Cómo te atreves a decir eso de mí?.- Dijo Incrédulamente Jazmín.-

-Oh perdóname hija por la tremenda mentira.- Dijo Marie guiñándole un ojo a su hija.-

-Bueno madre, ¿Me ayudas a escoger mi vestuario? Quiero ir presentable y bonita.-

-Claro Jaz.- Dijo cariñosamente su madre.-

Luego de 10 minutos viendo vestuario, se decidieron por un pantalón negro apitillado, una camisa ploma con terminaciones femeninas, una bufanda colorida y un abrigo negro para cubrirse del frío invernal que amaneció Doncaster. Se despidió de su madre, hermano y las niñas y emprendió rumbo hasta el restaurant de Pattie. Al cabo de unos minutos llegó al frontis del restaurant, suspiro y entró, se dirigió a la oficina de Pattie y tocó su puerta nerviosamente.

-Adelante.- Respondió Pattie al golpe de la puerta.-

-Hola tía Pattie.- Dijo sonrientemente Jaz.-

-Jaz, querida, adelante.- Dijo Pattie alegremente.-

-Em... bueno... yo....- Dijo Jaz nerviosa.-

-Dime querida, tranquila.- Dijo dulcemente Pattie.-

-Bueno, yo, ¿Se acuerda que le comente sobre quería trabajar? Bueno, estaba pensando que quisiera trabajar con una persona que conozca y sea de mi confianza, y por eso... Quería preguntarle si ¿Podría trabajar para usted como mesera?, En verdad si quiere me quedo con la propina solamente no la presiono a nada ni...- Pattie la interrumpió.-

-Querida, sería un gusto que trabajaras para mí, tendrás un buen sueldo y tendrás las propinas de los clientes, en caso de que te cueste adaptarte Emmy te podrá ayudar, ella es una mesera, es muy amigable y simpática, estará encantada de poder ayudarte. ¿Qué te parece?.- Dijo Pattie contenta.-

-¡Perfecto, me parece perfecto! Estoy muy contenta por poder trabajar para usted.- Dijo felizmente Jaz.

-Excelente Jaz, tendremos que firmar contrato por temas de ley. ¿Lista?. Dijo Pattie sonriendo.

-Lista.- Dijo con seguridad Jaz.

Cerraron el contrato y se dieron la mano como sello de contrato, ambas sonrieron, luego hablaron horas, se entendían a la perfección y tenían gusto parecidos, cayó la noche y Jaz decidió volver a su hogar, Pattie le ofreció llevarla y ella prefirió caminar, se despidió de ella y salió de su oficina, pero no sin antes volver a darles las gracias y recibir un beso en la frente de parte de Pattie, Se dirigió a la salida del restaurant, iba a cruzar cuando un automóvil sonó la bocina reiteradas veces por ella y giró su cabeza y se sorprendió con lo que vió.

-¿Quieres que de nuevo te atropelle? Veo que te quedo gustando...Dijo Drew graciosamente.

-¿Y esto se convirtió en una costumbre? ¿Atropellarme cada vez que me veas en el restaurant?. Dijo Drew con la misma gracia.

-Podría ser pelirroja, podría ser.- Dijo Drew y comenzó a reírse.

- Podría ser pelirroja, podría ser ja-ja-ja no. Dijo Jazmín imitando su tono de voz y terminando la frase cortante.

-Por cierto... ¿Qué haces acá pelirroja?.-Dijo Drew intrigado.

-Soy la nueva mesera de tu madre. ¿No estas feliz?.- Dijo Jaz contenta