El arte de caer {Terminada}

Capítulo Ocho.-

Drew asumió que debía reaccionar, ya era tiempo.

-¿Debería hacerlo?- Pregunto Drew cortantemente.

-Por supuesto.- Dijo Dafne con aires de superioridad.

-No estés tan segura, ya no eres importante.- Dijo Drew tratando de cortar la conversación. Estaba dispuesto a retomar el trote pero un brazo delicado lo detuvo.

-Drew, estoy arrepentida.- Dijo Dafne tratando de provocar arrepentimiento.

-¿Por qué volviste?.- Dijo Drew cortamente dándole la espalda.

-Por ti Drew. Me di cuenta que lo que hice fue un error, nunca te deje de amar.- Dijo Dafne simulando lágrimas.

-No pensabas lo mismo cuando me engañabas a mi espalda.- Dijo Drew zafándose de su agarre. Disculpa, pero, no tengo tiempo para seguir hablando, tengo cosas importantes que hacer.- Se despidió Drew sin siquiera mirarla y retomó el trote lento el cual llevaba,

No podía procesar, le dolía la cabeza volver a pensar en ella, seguía idéntica, su cuerpo espectacular, que de pronto ya no le parecía tan espectacular, le vino a su mente imágenes de Jazmín sonriendo con dulzura como el la conocía, sonrisas que no demostraban mentiras como las de Dafne. Cerró sus ojos para evitar seguir recibiendo esas imágenes, y de pronto, le comenzó a faltar el aire, ya no sentía sus piernas. Se detuvo y se recostó en el pasto que había a su costado, comenzó a respirar aceleradamente, sentía que ya el aire que tenía no era suficiente y ya no podía mirar bien, veía borroso, supo que no podría salir de esa situación y decidió llamar a su madre.

-¿Aló? ¿Hijo porque no me respondes?.- Pregunto Pattie preocupada.

-Ma... ma... madre...-Intentaba hablar Drew.

-¿¡Drew que sucede?!.- Grito Pattie horrorizada.

-Ma... madre, estoy en el ... parque, no puedo mover...me ni respir...ar, ven por... favor.-Dijo Drew haciendo el mejor intento por hablar.

-No te preocupes en segundos estoy ahí.- Dijo desesperada Pattie.

Drew sintió que si su madre no llegaba pronto, moriría. Pattie salió desesperada de su oficina, buscando desesperada a Jazmín, ojala no estuviera atendiendo todavía, la necesitaba y pronto, sabía que su hijo estaba teniendo un ataque de asma y necesitaba llevarlo al hospital y tenía que llevarla con ella, la encontró detrás del mostrador ordenando bebidas con su uniforme. Pattie se dirigió desesperada.

-¡JAZMÍN! Ven ayúdame pronto.- Grito como loca.

Jazmín se acercó rápidamente.

-¿Qué sucede Tía?-Dijo Jaz preocupada.

-Es.. Es Drew... Tiene un ataque de asma y necesito ir a buscarlo, ayúdame.- Dijo con algunas lágrimas en sus ojos.

-¡Por supuesto! ¡Vamos!-Salieron corriendo del restaurant. ¿Dónde está?.- Pregunto temerosamente Jaz.

-Está en el parque, vamos para allá.-Dijo Pattie.

Pattie encendió el motor del automóvil y se dirigió al parque, se demoró segundos solamente y al acercarse vieron un cuerpo tirado en el suelo, era Drew. Rápidamente paró el automóvil y ambas bajaron corriendo hacia Drew. Drew las miro y las abrazó, pero aun sentía que no tenía suficiente aire, comenzó a cerrar sus ojos y se desesperaron, lo subieron al automóvil y Pattie manejo lo más rápido posible hasta el hospital.

-Drew, Drew, mírame, mantén tus ojos abiertos por favor.- Dijo Jazmín muy preocupada.

Drew intentaba mantener sus ojos abiertos, la miraba mientras ella le daba aire y lo acariciaba, lo tenía en sus brazos, lo abrazaba lo que más podía pero sin lastimarlo, Drew la miraba fijamente y la abrazaba también, con ella se sentía mejor, no sabía que abrazarla lo hacía sentirse tan bien. Llegaron al hospital y lo bajaron urgente, Drew comenzaba a tornarse morado en la parte de su cara, lo hospitalizaron y esperaron las mejoras impacientemente.

-Tía...- Dijo Jazmín apenada.

-Dime cariño.- Dijo Pattie esbozando una sonrisa.

-Llamaré a mi madre.-

-Por favor... La necesito.-

Jazmín marcó a su madre y ella contesto su móvil.

-Hija ¿Cómo estás?.- Pregunto alegremente Marie.

-No muy bien.-Admitió Jazmín.

-¿Paso algo? Me estas preocupando.- Dijo Marie.

-Drew está hospitalizado, sufrió un ataque de asma y ahora estamos esperando respuestas del avance de él.

-¡Dios mío! Voy inmediatamente para allá.- Colgó Marie el móvil sin decir más.

-Viene inmediatamente para acá.- Dijo Jazmín.

-Gracias linda por todo tu apoyo.- Dijo Pattie emocionada.

-No se preocupe, siempre estaré aquí.-Dijo Jaz abrazándola.

Mientras ocurría esa bella demostración de afecto, sale de la habitación de Drew el doctor Hamilton.

-Familiares del sr. Harrison.- Dijo el doctor.

-Aquí.- Dijeron ambas mujeres.

-Bueno, Drew está fuera de riesgo, está estable, recupero la presión arterial normal, respira normal. Lo dejaremos en observación para ver cómo avanza el tratamiento, nada de qué preocuparse, le recetaremos algunos medicamentos y un inhalador que siempre debe llevar con él, ¿de acuerdo?.- Dijo calmadamente el doctor Hamilton.

-Entendido doctor.- Dijo Pattie al fin respirando y recién comenzando a recuperar el color piel claro que era normal en ella.

A Jazmín le volvió el alma al cuerpo, contuvo la respiración por mucho tiempo al no saber nada de Drew, de pronto sintió los brazos delicado de Pattie rodearla, ella le correspondió cariñosamente, recuperando de a poco el aliento faltante. Su madre llego a paso apresurado al lado de ellas, lo primero que hizo fue abrazar a su amiga y preguntar cómo estaba Drew, conversaron un largo tiempo, mientras Jazmín agonizaba en su asiento, sentía que de pronto su espalda pesaba demasiado, el aliento no volvía del todo, esa sensación no se iría hasta que lo pudiera ver y si tuviese mucha suerte lo volvería a abrazar.

Pattie la observaba y la notaba extraña, sabía que es lo que pasaba, existía una posibilidad de que a ella le atrajera Drew. Ella la estimaba mucho, no la quería ver sufrir, sabía que Drew si la podría dañar, a menos de que Drew empezará a sentir lo mismo, conocía a su hijo y existía una posibilidad, por los lados era posible. Pero Pattie rápidamente fue sacada de sus pensamientos cuando el doctor Hamilton le dio aviso de que Drew podía recibir visitas. Se levantó de su asiento y se dirigió a la habitación de Drew, entro cuidadosamente explorando su alrededor.