Random System » MONSTA X. Oneshots

⚠ Should I do #41

✿ Mongirls: Lee Min Ji (Lee Joo Heon)

⚠ Maltrato infantil, Acoso sexual, violencia doméstica

Echando la cabeza hacia atrás y dirigiendo su mirada al techo, suspiró con desgana mientras esperaba que el chico que había entre sus piernas acabara. Min Ji no tenía ningún interés en él, menos en lo que estaba haciendo. No podía sentir más que indiferencia mientras el otro se movía.

Cuando acabó, salió de entre las piernas de ella y, con las manos temblorosas, se subió el cierre del pantalón y salió corriendo de la habitación.

Ella, suspirando de nuevo, se incorporó y volvió a colocarse bien la ropa interior. Siquiera sentía asco, no más que un desinterés terrible. Recordaba muy vagamente el nombre de ese chico, casi con esfuerzo. Iba un curso por debajo y había escuchado que le llamaban Kyun. Su nombre completo ni le interesaba antes ni iba a empezar a hacerlo tras lo que acababa de suceder.

Cuando quizá diez minutos antes el chico se le había acercado mientras ella estaba fumando tranquilamente en el parque que había frente a su casa y se le había confesado, ella le había mirado con curiosidad.

Subiéndose la falda para enseñarle sus piernas y de paso su ropa interior, un "¿Te gusto de verdad? ¿o es esto lo que quieres?" había salido de sus labios.

La respuesta que obtuvo fue tan obvia que no pudo causarle menos sorpresa.

"Haz lo que quieras, solo acaba rápido" era lo único que le había contestado al chico.

Tras arrojar la colilla al suelo para apagarla con la planta de su pie descalzo, había cruzado la calle esperando que el chico la siguiera.

Había subido las escaleras hasta su habitación, se había tumbado en la cama tras quitarse la ropa interior, con las piernas abiertas, y le había dejado hacer con ella lo que le viniera en gana. No podría haberle importado menos.

Siquiera se molestó en fingir que gemía, que sentía algo en general. Lo que sucedía en su cuerpo parecía ajeno a ella, a ella no le importaba en absoluto. El dolor no la llenaba, el placer que se suponía que debía obtener del sexo tampoco.

¿Había sido así toda su vida? Posiblemente. Si no era así, tampoco recordaba una época donde se hubiera sentido de otra manera.

La gente a su alrededor era mentirosa. Nadie era sincero, todo el mundo tenía segundas intenciones y eran todas tan obvias, tan superficiales, tan carnales... Min Ji era bonita, era muy bonita, la persona que veía cuando se miraba en el espejo, ella pensaba que era una chica muy bonita. Sus ojos pequeños, sus mejillas y sus labios gruesos, su piel perfecta. Entendía que la gente se interesara en esa persona.

Su madre odiaba que ella tuviera ese aspecto, Min Ji lo sabía de sobras. Su padre las había abandonado cuando ella era muy pequeña y no recordaba siquiera su cara. Si le preguntaban, no obstante, Min Ji no podía haber mostrado otra cosa que no fuera total desinterés hacia ello. Tras ello, su madre había empezado a llevar a hombres a casa. Llegó un momento en que se vio obligada a dejar de hacerlo.

Desde que Min Ji hubiera cumplido los doce años, todos ellos acababan interesándose por ella en vez de por su progenitora. Fue quizá un par de años después que su madre se dio cuenta de que sus novios tocaban a su hija de una forma en que hombres que doblaban a Min Ji en edad no debían tocar a una niña que aún no había cumplido siquiera los catorce años.

Aquella vez, cuando se percató por primera vez, una vez el que era su novio se había marchado de la casa, ella había insultado a su hija acusándola de provocarle para que la tocara de ese modo.La había golpeado incluso. Min Ji, en el suelo, inmóvil mirando a la nada, con el labio partido y su madre gritándole cosas, no entendía absolutamente nada de lo que estaba ocurriendo.