LA NIÑA DE MIS OJOS| ERICK BRIAN COLÓN| CNCO. [PAUSADA]

C13: Celos de hermano mayor.

Joel miró a Erick con el ceño fruncido, Addison parpadeó varias veces sin decir una palabra ¡Definitivamente el pobre Erick estaba metido en un lío! ¿Cómo rayos se le ocurre traer a Addison a una rampa dónde simplemente el peligro abunda? ¡Está loco, de verdad!

—Joel ¿Qué haces aquí? —Preguntó Addison después de darse cuenta de que se trataba de su hermano.

—Buscándote —Respondió firme antes de cruzarse brazos— ¿Qué haces tú aquí? —Preguntó sin despegar su mirada de su hermana.

—Yo estoy con ella, yo la traje —Dijo Erick ganándose una mirada de pocos amigos por parte de Joel.

— ¿Estás demente, Erick? ¿Cómo demonios se te ocurre traer a Addison a este lugar? —Espetó y Erick miró a su alrededor.

Sí, no era un lugar lindo. Pero Addison tenía razón, ser ciego es bueno por una parte ya que no ves cosas que en realidad no quisieras ver y ese lugar definitivamente cuanta cómo algo que ella no quisiera ver. Erick se encogió de hombros y Addison negó con la cabeza.

— ¡Joel, estás armando semejante escándalo por una estupidez! —Chilló— ¿Sabes algo? A diferencia de todas las personas que me rodean, Erick es el único que no me ha sobreprotegido ni muestra una especie de cuidado hacia mí. No soy una bebé, tengo diecisiete años, y si... Es cierto que soy ciega y no puedo ver cosas que quisiera ver. Cómo conocer al chico que me salvó aquel día, cómo... Ver el rostro del chico que me hace sentir especial, el chico que de verdad me comprende... Ver a Erick —Soltó Addison.

Erick se quedó sin palabras, su corazón se aceleró tanto que sintió que se saldría de su caja torácica en ese preciso momento, sus mejillas se llenaron de un rubor para nada ligero y miró a Addison fijamente ¿Ella sentía lo mismo que él sentía por ella? No lo sabía, pero tenía al menos una pista para descubrirlo.

Johann y Aaron se quedaron boquiabiertos al simple hecho de que Addison dijera que era ciega, también ante todo el revoltijo que había atraído varios pares de ojos. En ese momento Addison no estaba de acuerdo con la actitud qué Joel estaba tomando, no le gustaba para nada que la sobreprotegieran, era algo que odiaba de verdad. No podía negar que Erick era diferente, la trataba diferente, no cómo el resto de los demás quiénes mostraban un poco o bastante lástima por ella y por eso trataban de cuidarla exageradamente.

—Addi, tenemos que irnos a casa —Demandó Joel.

—No me iré a ningún lado. Yo me quedaré con Erick y sus amigos ¿Acaso no sabes lo bien que me la estaba pasando? Por primera vez en mi vida me estaba sintiendo libre de la oscuridad de mi vida. Por un momento olvidé todos los problemas que me rodean y fui feliz —Exclamó— Yo de aquí no me voy.

Erick tomó la mano de Addison y negó con la cabeza— No quiero traerte problemas con tu familia, Addi —Musitó el chico de ojos verdes.

—Tú nunca serás un problema, Erick... —Murmuró.