Parte 15

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Jungkook

El chico era como una maldita droga. Era la tercer vuelta alrededor de la casa y todavía no me sentía lo suficiente controlado como para atravesar esa puerta y poder ver a Jimin sin tener la necesidad de hundir su hermosa boca entre mis piernas.

Había planeado volver a mi departamento y Junji me suplico que no me vaya, Jimin se iría en una semana des pues de pasar año nuevo.

La verdad  me sentía bastante culpable,y mas con lo cariñosa que había regresado Junji y lo perturbado que estaba Jimin. Era evidente la forma en la que evitaba estar en la misma habitación con migo, cenaba rápido y subía, cuando no se excusaba y ni siquiera bajaba a cenar. Junji parecía confundida, y se disculpaba por el diciendo que tal vez se sentía un poco invadido. Mi inocente Junji, si supiera que su hijo realmente lo que sentía era culpa.

Como mañana era noche buena habíamos decidido ir los tres a un elegante restauran a pasar la velada, habían quedado unos pendientes que no podía posponer y con la excusa de hacerlo trate de ausentarme todo el día. El pequeño cuerpo del hijo de Junji girando por la casa se me hacia provocador.

Habíamos vuelto a tener relaciones sexuales con Junji, ella era una mujer hermosa y deseable, tenía un espectacular cuerpo, delicado. Apenas había podido llegar al orgasmo y cuando lo hice, me sentí asqueado. Qué rayos me estaba pasando, realmente la situación se estaba volviendo estresante.

Ya pronto saldría de la casa, ya pronto volvería a pensar solo en Junji, ella era importante para mí. Yo realmente quería a Junji.

Detuve por fin el coche frente a la casa y baje junto con la bolsa de obsequios que había comprado de camino, decidí que a Junji, le obsequiaría una bella gargantilla de diamantes y a Jimin me resulto practico comprarle en el mismo lugar una pulsera de plata con una J tallada en oro, con flores decorándola.

Atravesé la puerta y coloque los regalos en el hermoso árbol que había colocado Junji cerca de la entrada.

- Jungkook por fin llegas, tenemos reserva en 30m y sabes como es de loco todo esto en estas épocas ve a cambiarte.- me dijo Jungkook, mientras abrochaba su aro atravesando la sala, llevaba un bellísimo vestido aterciopelado azul, que contrastaba perfectamente con la piel que dejaba ver sobre sus hombros.

- Pero mira nada mas, que hermosa novia tengo- dije, y me acerque para posar un casto beso sobre sus labios.

- Muchas gracias, puedo decir lo mismo de ti?-respondió con un hermosa sonrisa .

Subí rápido las escaleras, tome una rápida ducha y me coloque un traje italiano que había comprado para el día.

Cuando Salí de la habitación ya lista para bajar, Jimin salía al mismo tiempo de la suya.

El chico me dejo con la boca abierta, estaba aun más hermoso que la última vez que habíamos salido.

Llevaba un saco de terciopelo azul, que combinaba perfectamente con el vestido de Junji, unos jeas negros ajustado y en su cuello un pañuelo rojo que cortaba el blanco de su piel. Un hilo plateado colgaba de una de sus orejas, el apenas perceptible delineado de los ojos le daban ese toque gatuno y el brillo sugerente de sus labios, parecía decir cómeme. Dios mío, realmente estaba muy jodido.

- Qué?- dijo mirándome

Parpadee un par de veces y cerré mi boca moviendo mi cabeza de forma negativa.

Cruzo por mi lado y bajo las escaleras hacia Junji.

Cuando estaba abajo Junji se acerco, con las manos en la espalda y dijo...

Prohibido (Kookmin)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora