POV SASUKE.
Llegamos a la entrada de las aguas termales y allí se encontraban todos, hace tiempo que no los veía juntos de esa manera.
–¡Al fin! Los estábamos esperando, eran los únicos que faltaban. –Dijo Lee corriendo hacia Naruto. Está demasiado cerca.
–¡Maldición! El Onsen está cerrado, nos arruinaron la noche. –Dijo Kiba llegando de hablar con el dueño.
–¿Está cerrado? Que mal, ya me había entusiasmado. ¿Qué haremos ahora? –Pregunto Naruto un poco cabizbajo.
–¿Vamos a beber? No estamos muy lejos. –Preguntó Shikamaru rascándose la cabeza.
–¿Desde cuándo bebes? Temari se va a enfadar si se entera... –Dijo Chōji dándole codazos en las costillas.
¿Shikamaru y Temari? ¿Desde cuándo?
–Oye, oye. No tiene por qué enterarse, sólo será un poco.
–Que rebelde te has puesto, quién lo diría. Pero no te preocupes, Temari no se enterará de nada. –Habló Chōji nuevamente guiñándole un ojo a Shikamaru.
–Como sea. ¿Nos vamos ya?
–¡Si! Hace tiempo que no me emborracho como se debe. –Gritó Naruto celebrando con las manos arriba.
Aunque no tenía ganas de beber, tuve que ir con ellos, no tenía otra opción. Quería pasar la noche con Naruto y lo voy a hacer cueste lo que cueste.
Cuando llegamos, una delgada y alta mujer nos atendió y nos llevó a una mesa privada donde habían muchas botellas de Sake, me senté al lado de Naruto y vi que la mujer aún no se iba. Nos había ofrecido Sake caliente, a lo que nadie respondió. Estaban bastante ocupados mirando su escote, malditos mal educados.
–Gracias, pero no necesita calentarlo. –Respondí yo, ya que ningún simio en la mesa era capaz de responder.
–No es nada, cuando necesites algo sólo llámame.
La mujer dejó la habitación y todos volvieron a la normalidad.
–Ooh, ¿Estaban coqueteando? –Preguntó Kiba un poco enojado.
–¿Qué te hace pensar eso? –Pregunté yo mirándolo con hostilidad.
–... Sigues siendo igual de idiota, pensé que al menos habrías cambiado después de lo de tu hermano...
Me reí sarcásticamente y luego lo volví a mirar de la misma manera que antes, esta vez estaba a punto de levantarme de mi asiento cuando Naruto tocó mi brazo y me jaló hacia abajo.
–Oye, oye. Vamos a beber. A eso venimos. ¿No es así? –Dijo Naruto tratando de arreglar el ambiente.
Kiba asintió y yo solo lo ignoré.
Había decidido no beber nada, pero ya que estamos aquí, una ronda no le hace mal a nadie. Tomé una botella y me serví un vaso. Miré a Naruto y ya se había bebido una botella completa y además estaba tomando otra.
–Oye, tranquilo con el alcohol. Acabas de llegar y ya te estas emborrachando. –Dije quitándole la botella de las manos.
–¿Qué haces? ¿Te atreves a decirme que hacer? ¡Yo seré el próximo Hokage! Más respeto... –Naruto hablaba como si tuviera un lápiz en la boca, no pude evitar reírme al ver que no podía modular. – ¿De qué te ríes maldito?
Naruto me agarro del brazo y se acercó a mi lentamente, para luego besarme... En frente de todos.
De repente el silencio inundó la habitación, de pronto todos empezaron a reír.
