POV NARUTO
–¿Regalos? ¿Me compraste algo? –Preguntó Sasuke un poco ansioso.
–Sí, estoy seguro que te gustaran. –Dije yo sonriendo maliciosamente, tome a Sasuke de la mano y lo lleve conmigo hasta su habitación, donde estaban los tan interesantes juguetes.
Cuando estuvimos los dos dentro, cerré la puerta con llave y me quedé allí observando como Sasuke se acercaba lentamente a la cama, en la cual estaban las bolsas con los juguetes.
–¿Todo esto es para mí? –Pregunto el dándose la vuelta por un segundo.
–Sí, rápido, quiero que los veas. –Dije yo un poco nervioso.
Hay dos posibilidades en mi cabeza en este momento. La primera es que Sasuke se dé la vuelta y me mire con cara de pervertido al momento de ver los regalos y que gracias a eso yo salte como perro en celo encima de él y lo empuje a la cama, y la segunda, que es la que tiene más probabilidad de suceder, es que Sasuke se dé la vuelta y me mire con cara de furia para luego empezar a golpearme y... Bueno, seguido de eso viene mi funeral.
Todo estaba ocurriendo en cámara lenta, Sasuke abría cada una de las bolsas y sacaba cada una de las cajas que estaban dentro, las dejaba encima de la cama para luego tomar las bolsas vacías y botarlas en un pequeño basurero que tenía en su habitación. Cuando estuvo a punto de abrir la primera caja, mi corazón se detuvo por un momento, dejé de respirar y empecé a sudar como loco.
La primera caja, creo que tenía las "bolas vibradoras". Creo que ese es el único juguete que, gracias a su apariencia, deja claro para que es.
Cuando Sasuke abrió la caja, vio su interior y de inmediato volvió a poner la tapa en su lugar. Se quedó inmóvil por unos minutos y luego la volvió a abrir, después la volvió a cerrar y me miro con cara de nada.
–¿Es lo que creo que es?
–Si. –Respondí casi al instante en el que termino de preguntar.
–¿Los demás regalos son como este?
–No son todos iguales, tienen distintas funciones, pero son para lo mismo.
–Oh...
Sasuke se quedó un rato mirando las demás cajas que le quedaban por abrir, me acerqué al ver que no se movía y cuando quise mirarlo a los ojos se dio la vuelta rápidamente.
–¿Te enojaste? ¡Perdóname! Temía que esto iba a pasar y aun así... ¿Sasuke?
Toqué su hombro y lo di vuelta, agacho la cabeza, pero con mis manos la levanté y lo obligué a mirarme.
Estaba completamente rojo.
Lo miré sorprendido y quise preguntar que le pasaba, pero su boca fue más rápida que la mía.
–Es tu culpa, me traes este tipo de cosas y me haces imaginar... Eres el peor.
–¿Entonces no estás enojado?
–Lo único que quiero hacer es probar cada una de las cosas que hay en esa cama... –Dijo casi inaudible.
Me tomo algunos segundos procesar lo que me acababa de decir, pensé en pedirle que me lo repitiera, pero no lo iba a hacer.
–Créeme, lo vamos a hacer, y será ahora, pero de una forma muy especial. –Dije con una pequeña sonrisa esbozándose en mis labios.
Tomé todas las cajas y las dejé a un lado de la cama, empecé a buscar por toda la habitación un pañuelo o algo por el estilo y se me ocurrió pasar por el basurero. Me fije en una de las bolsas que había allí que tenía algo en su interior.
