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Riley

Les estába en mis brazos. Y es así, como termino de caer en cuenta, que es tan malditamente hermosa que duele hasta la mèdula.

Sínceramente, vengo esperando por ésto desde hace casi 4 años, ya lo he dicho, estoy demente y es alarmante, pero no puedo evitarlo, supongo que el amor es así.

Algunos dirían:"estás obsesionado con ella", no obstante, no es verdad. ¿Nunca les pasó, el saberse enamorado de alguien especial y que esa persona, jamás los ha notado, sin embargo, no pierden ni la esperanza, ni la fé de que algún día, se den cuenta de que uno bebe los aires por ella?(o por èl dicho sea el caso).

Y ahora, que tengo su pequeño cuerpo entre mis brazos y veo como sus ojos no dejan de mirarme, no puedo evitar sentir un atisbo de ilusión, sé que ya no viviré con la incertidumbre de que para Leslie Connor, ya no soy invisible.

Leslie

Santas papas fritas, ¡es RICHARDSON!. Trato de calmar la histeria que corre dentro de mí, para así no quedar como una loca chiflada, adelante del chico que me trae arrastrando las cobijas, desde tiempos remotos.

Sin embargo, mi cordura dura poco, cuando acaricio su mejilla de forma suave, aún estoy en sus brazos y siento como se tensa, había cerrado sus ojos de forma inconsciente ante mi toque, pero los abre bruscamente.

Trato de alejarme de él, pero como bien dije, lo intenté. Riley se muestra sorprendido y algo reticente a soltarme, pero lo hace de manera lenta. Al instante, siento frío al alejarme de él.

—¿Estás bien Les? —su voz suena ronca y baja, creo que estoy tardando más de lo usual para responder y noto como mi rostro se torna rojo de forma violenta. Él sólo tiene un leve surco en su frente, denota preocupación, pero al verme en ese estado de tomate maduro, él sólo me muestra su sonrisa.

Aclaro mi garganta, por que sé que mi voz saldrá horrible si no lo hago:

—Si estoy bien, te lo agradezco Riley. De no haber sido por ti, creo que habría sangre y dientes desparramados por el piso.

Quiero darme una bofetada mental por decir tamaña ridiculez, aúnque no lo es tanto si lo pienso. Ciertamente, estaría todo muy mal si él no me hubiese sostenido.

Riley suelta una sonora carcajada y yo sonrío visiblemente avergonzada.

—Si es verdad, Steve es un imbécil, por él casi caes al suelo, pero te sujeté justo a tiempo.

Maldito Usuliak, me hace la vida de cuadritos junto con Tiffany "Barbie"Withmore; suspiro audiblemente, por que la verdad, no entiendo sus motivos para hacer de mis días un suplicio constante. Aúnque claro, yo los ignoro de manera consciente y eso, a ellos les da ácidez estómacal.

—Realmente me cuesta comprender por que se ensañan conmigo, yo la verdad no les presto atención, no sé por que pierden el tiempo conmigo si...

Freno mi discurso verborragíco por que,acabo de caer en cuenta que estoy hablando con el chico de mis sueños, él me mira preocupado y yo sólo estoy sin voz. Giro mi cabeza a un costado para ver a mi amigo Martín, pero ¡oh sorpresa!. ¡Estámos solos!.

—Creo que debemos...debo mejor dicho, ir a clases, nunca llego tarde a historia, sabes que el profesor Morris no soporta que nadie llegue tarde... y yo ya estoy divagando de vuelta.

Rasco mi frente por que, sigo sin creer que él, no se haya cansado de mis palabras atravesadas y mis explícaciones sin sentido. Él está en estado de diversión y, de algún modo, me desconcierta y me alegra, por partes iguales, que sea yo quien logre eso.

—Tienes razón Les, debemos irnos, me alegra haberte ayudado y sobretodo, hablar contigo.

No me había dado cuenta de que estábamos tan cerca, hasta que él depósita un suave beso cerca de mi boca. Estoy de piedra parada sola en el pasillo. Riley salió corriendo hacia el salón de clases, caigo en cuenta de que volvieron a tocar el timbre para quienes van con retraso...

No puedo evitar tocar el área en la que sentí sus labios. Realmente pongo en dudas, si ésto, acaba de ocurrir de verdad. Tiene que haber una explicación.

Si, quizás me caí y me golpeé fuertemente en la cabeza y todo esto, es producto de mi imaginación. Me pellizco, por que si pasó realmente, estoy despierta y no me puedo creer que él me dió un beso.

Llegué hasta el salón, no pregunten como, supongo que llegué volando o levitando. Martín me mira como si tuviera elefantes rosados en la cara y, supongo, que mi sonrisa estúpida le da una idea del por qué estoy en este estado. No me pregunta nada, ya que el profesor Morris, nos hace callar a todos.

Siento que me observan, mi piel se eriza, no entiendo que ocurre, hasta que tengo la brillante idea de girarme, él está aquí, en la misma clase que yo.

Bueno, tenemos las mismas clases, pero generalmente no compartimos los mismos horarios. Han sido pocas las veces que hemos estado en el mismo salón, respirando el mismo aire.

Rayos, sueno demasiado desquiciada, pero lo de recién me dejó delirando.

El que Richardson esté aquí, me sorprende demasiado y no disimulo en ocultarlo. El profesor Morris se aclara la garganta y me volteo bruscamente, me había quedado prendanda de Riley tanto tiempo que, no escuché lo que Morrison me preguntó.

Afortunadamente, respondo bien, pero no puedo evitar pasar la mirada de reproche que me lanza el maestro. Nunca sucedió algo así, por que si, soy una alumna aplicada y que mi mente esté tan volátil, es raro para todos.

Incluso para mi misma.

Pasa la hora de clase, y toca el timbre finalmente, tenemos un receso y yo aprovecho para ir al baño. Mientras estoy allí, escucho las conversaciones de unas chicas, que por cierto, no disimulan ser unas completas fisgonas de la vida ajena. No doy importancia hasta que, escucho mi nombre y el de Richardson.

Frunzo mi ceño por que no se a que se debe, así que decido prestar más atención al tema.

—Es más que obvio que él sólo se la quiere llevar a la cama y ella está babeando como un perro que ve un hueso, súper enamorada de él, si ni siquiera se toma la molestia de disimularlo, por favor.

—Vamos Sunny, no creo que sea así, digo, él también la mira de manera ensoñadora; sí, quizás se quiere encamar con ella, no digo que no, pero a lo mejor él está enamorado también, ¿no viste acaso cómo la ayudó cuando Steve la hizo caer?

—No tocó el piso Tracy. Y no sé de dónde rayos salió, como fué tan rápido, pero la atrapó al instante. Parece su sombra, yo no sé si es una mustia, pero no entiendo, como no se ha dado cuenta de que él siempre la está mirando.

Ellas se van carcajeándose como dos hienas en plena caza, yo estoy estática en el cubículo, no doy crédito a todo lo que escuché.

Suena el timbre y me sobresalto, estába tan ensimismada con lo que decían Tracy Monroe y Sunny Turner, las dos rubias plásticas más chismosas de toda la escuela, que la realidad me golpeó en la cara.

Riley podría estar enamorado de mi. También quiere llevarme a la cama. No deja de mirarme. Y yo, soy una chica que no sabe disimular.

Bien, ésto requiere de averiguación y es necesaria la ayuda de gente. Y ya sé, quiénes pueden ayudarme. Y de paso, los ayudo también.

Si Riley esta enamorado de mi, lucharé para que algo bueno salga de todo esto.

O lo intentaré.

¡Jesús con sandalias ayúdame..!

Veremos como le va a Les..Jaja
Ya saben,lean,si les gusta comenten y voten con sus estrellitas. Besos 😘.

~D❤.

Todo por sus besosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora