Latidos del corazón... no puede ser amor (Cancelado)

24_ ¿Ya es tardé?

Luka sonreía mientras veía a la nerviosa azabache que evitaba mirarlo directamente.

-¿Qué dices? ¿Aceptas? - preguntó con su habitual voz calmada y relajante mientras ella cerraba los ojos para meditarlo.

A ella le seguía gustado Adrien y puede que Luka tenga razón. Sólo necesita olvidarlo.

Marinette suspiro profundo y asintió mientras por fin miraba al guitarrista.

-Aceptó, si quiero ser tu novia.

La decisión ya estaba tomada y no había vuelta atrás.

Desde ahora Marinette y Luka son novios.
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Al otro día.

Nathaniel iba llegando en la escuela mientras pensaba muy seriamente en ése día.

"Ayer dormí en la biblioteca, ante ayer en el baño y el lunes en la oficina del director ¿Dónde puedo dormir hoy?"

¿Qué esperaban? Es Nathaniel.

Vio como algo cayó al suelo y levantó la mirada para ver de quien era ésa cosa rosa que no conocía y vio a Chloe.

Su relación con Chloe raramente mejoró así que quizás podía dirigirle la palabra sin que ella lo insulte, lo golpe o lo ignore.

Se acercó a esa cosita rosa, la agarró y la alzó.

Era algo suave y pequeño.

¿Qué sería?

En fin, no importa.

-Oye Chloe, se te cayó esto. - dijo acercándose a la chica la cual volteó a verlo y se sonrojo al extremo mientras los que pasaban por ahí no se esforzaban en disimular sus risas.

La rubia se acercó a Nathaniel, le sacó la almohadilla para sostén que él mostraba alegremente y le dio una bofetada que lo hizo dar una vuelta completa.

-¡Idiota, plebeyo, fresa, tomate, hermano de Elmo, Chapulín colorado! - grito antes de irse planeando mil formas de asesinarlo y dejandolo con su mejilla dolida y totalmente confundido.

¿Qué acababa de pasar?

¿Por qué le pegó si él sólo la quiso ayudar?

Sabrina que contempló toda la escena, se acercó a Nathaniel y le explicó de forma directa la situación.

-Éso que le diste es relleno para el sostén. - le explicó y él la miró confundida.

-¿Pero por qué me pegó si yo sólo se lo devolví? - preguntó y Sabrina lo quedó mirando fijamente.

Así que por éso es que Nathaniel andaba casi siempre sólo y quien lo solía acompañar aveces era Alix la cual por un motivo ya no extraño, siempre andaba con dolor de cabeza.

-Olvidalo. - Fue todo lo que dijo antes de ir a buscar a su amiga y dejar al chico aún más confundido.

-¿Fue algo que dije?

Lo pensó por un rato y luego negó.

-Na, no lo creo, soy perfecto así que no fue ningún error.

Y el señor humildad se dirigió a clases con toda la intención de dormir.
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Después de clases.

Marinette que había quedado castigada por llegar tardé a clases, estaba saliendo mientras silvaba tranquilamente, disfrutando su tiempo de paz por que cuando llegaba a casa su madre la iba a estar esperando muuuy pacientemente por que volvió a ser castigada.

Al salir, se encontró con Adrien esperandola.

-Hola. -saludó él con su habitual sonrisa y ella entre cerró los ojos.

Algo no andaba bien ¿por qué lo estaba esperando?

-¿Hola? - devolvió el saludo con duda mientras él se acercaba y le extendía una rosa.

-Para ti princesa.

Inmediatamente, Marinette levantó su mano, la situó en su mejilla y se pellizco.

-¡Au!

Grito al darse cuenta de que no era un sueño y Adrien la miró confundido.

-¿Por qué hiciste éso? Te puedes lastimar. - dijo mientras se acercaba más a ella y le acariciaba la mejilla.

Marinette sólo lo miraba fijamente.

No era normal que él actúe así y ella sabía el por qué de su forma de actuar.

Con rapidez, tomó la mano del chico y la apartó de su rostro.

Era mejor terminar con éso rápido.

-Adrien... empecé a salir con Luka. Por favor, no vuelvas a hacer éso. - explicó y pasé a que sólo sostenía una mano del chico, sintió claramente como su cuerpo empezó a temblar.

El rubio hacía lo posible para no encontrarse con los ojos de la azabache pero por primera vez, ella lo miraba tan fijamente que lo inquietaba.

-Lo sé... hace un par de días me dijo que te pediría ser tu novio. - exclamó en un pequeño susurro mientras le dedicaba la peor sonrisa fingida de todas.- Espero que sean felices.

Y tres decir éso, hizo que la chica lo suelte y se fue mientras ella miraba al cielo, con una sonrisa.

-Vaya... definitivamente Alya es maldad pura.

Y así, Marinette y Luka empezaron a salir, Nathaniel... ¿es muy tonto o muy inocente? y Adrien, por primera vez, se arrepiente de no haber hecho algo cuando podía.