Capítulo 17| "La mutación"

1.6K 228 90
                                    

Capítulo dedicado a BilgaiPoolCastillo, gracias por tu apoyo y por revisar la historia repetidamente para ver si llegó a la meta ❤️❤️

(...)

ADMES

Rogaba para que Acacia haya recibido mi mensaje; necesitaba hablar con aquella chica urgente.

Mi mente aún divagaba en el sueño de Eleonor, aún no podía asimilar todo lo que había visto con solo haber tocado su frente en cuanto se había quedado profundamente dormida. Esas personas estaban siendo torturadas ahí; no sabía si Eleonor había sido capaz de ver sus rostros, o si solo lo había hecho yo por tener la vista más aguda, pero los había visto tras esas paredes de alumina y espuma metálica. Sus pupilas estaban dilatadas, sus manos sangraban, era como si habían estado expuestos a constantes descargas eléctricas.

¿Acaso todos ellos eran las anomalías que han desaparecido a través de los siglos?

Si eso era así, ¿Cómo era posible que siguieran con vida? Pues a pesar de ser humanos diferentes, seguían siendo eso, humanos. Los cuales no tenían una calidad de vida de más de 100 años. Así que ¿Por qué seguían siendo jóvenes? ¿Qué estaban haciendo con ellos?

Me agacho a tomar arena de la playa con mi mano, aún cavilando sobre lo que Cupido estaría planeando hacer con todos ellos.

Me encontraba en la parte más alejada de la playa, casi donde la costa se unía con las montañas; sabía que los humanos no solían ir hasta ese sitio, por lo que, ver a Acacia allí debía de ser fácil.

Aún me encontraba palpando la arena cuando lo sentí. Unos grandes pasos pisando la hierba que colinda con la montaña tras de mí. Me quedo quieto, sin intentar hacer ningún movimiento en falso al escuchar tres gruñidos provenir desde atrás. El animal se acercaba con lentitud hacia donde yo me encontraba, así que solté la arena y después de sacudir las palmas de mis manos, me puse de pie. Al girarme, me encontré de frente con tres cabezas horrendas que no dejaban de gruñirme, de sus enormes fauces salía espuma, tal y como cuando un perro mortal se encontraba con rabia.

¿Qué era lo extraño con aquel animal?

Que su tamaño triplicaba al de un perro mortal, y que además… las tres cabezas pertenecían a un solo cuerpo.

—Cerbero —hablo en voz baja al identificar quién era él.

No podía ser alguien más que no fuese el perro que resguardaba la entrada del infierno, pero la pregunta era, ¿Qué hacía en ese lugar?

De sus fauces provino un horroroso aullido, que incluso hasta el más valiente lo hubiese hecho temer. Él levantó su cola, la cual se asemejaba a una serpiente, y la movió sobre él.

—¿Qué es lo que quieres conmigo, Cerbero? —cuestiono, dando dos pasos hacia atrás, a la vez que trataba de invocar toda la energía a mis manos.

Él avanzó los mismos dos pasos que yo retrocedí.

—Quiere matarte, han sido entrenados para desaparecer a los Agentes que se revelan.

Muevo mi cabeza hacia la izquierda, para así encontrar a Aurelio pasearse sobre un alto montículo de arena.

—Aunque me atrevería a apostar que solo quieren asustarte, pues aún no desean eliminarte.

—¿Qué estás haciendo aquí? —cuestiono, regresando mi atención al perro de tres cabezas.

—Ya lo sabes, Admes. Si te liquida, debo de llevarte conmigo. Soy el ángel de la muerte.

Agentes del Amor © {Terminada}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora