Agentes del Amor © {Terminada}

Capítulo 22| "¿Quieres destruir la Tierra?"

ELEONOR

Le prometí a Admes guardar el secreto.

No iba a decirle a mi padre que conocía sus raíces, ni mucho menos le hablaría sobre lo que sucedió aquella tarde en mi habitación. Aunque verdaderamente ahora me costaba mucho trabajo poder verlo a los ojos y no explotar frente a él. Aún me costaba asimilar todo el misterio en el que he vivido desde mi nacimiento; mi padre, una criatura sobrenatural que renunció a su deidad para estar con mi madre, una anomalía más, que posiblemente también estaba cautiva.

Me encontraba caminando a través de la arena junto a Milú, platicando sobre la tarea de la fotografía que estábamos próximos a entregar. Ella lucía radiante, con un sexy traje de baño azul de dos piezas, el cual le hacía lucir sus espectaculares curvas, dignas de que cualquier muchacho se detuviera a apreciarlas. Mientras que yo solo lucía una blusa de tirantes blanca, más unos shorts oscuros, lo que me hacía ahora lamentarme, pues cuando Milú llamó para que diéramos una caminata por la playa, no mencionó que traería traje de baño.

Continué arrastrando mis pies descalzos por la arena, enfocando la cámara de vez en cuando a algo llamaba mi atención, a la vez que seguía el hilo de la conversación de mi amiga, quién lamentablemente para mí, no dejaba de hablar de otra cosa que no fuese sobre Colin Sámaras.

Milú estaba verdaderamente enamorada de ese chico.

—¿Y ya tienes lista la fotografía? —me preguntó, al fin cambiando de tema.

—No —confieso, bajando la cámara—, no encuentro el sitio ideal para tomar la fotografía de mis zapatillas de ballet. ¿Y tú?

—La tomé hace tres días, ¿Quieres ver? —dijo, buscando en su cámara.

Me acercó la imagen para que pudiera apreciarla, y en cuanto la miré, realmente había quedado anonadada. Milú había capturado a una niña de unos ocho años, ayudándole a cruzar la calle a una anciana de unos 80 años. Ninguna se había percatado de la fotografía, pues la anciana sonreía hacia la niña, mientras que la otra tomaba su brazo con firmeza.

Sonreí ante aquella perfecta imagen, imaginando la escena. Milú era definitivamente una gran chica, a la cual le apasionaban ciertas cosas como lo era ver el amor entre las personas.

—Es increíble, Milú. Ganarás con esa imagen.

—¿En serio lo crees?

—La pasión en la fotografía es demasiado evidente. Colin no tendrá ninguna oportunidad ante ti.

Le sonreí, y estiré mi mano para apretar la suya en un gesto de cariño. Pero ella prácticamente se había congelado, su cámara se resbaló de su otra mano, para así caer sobre la arena. Su rostro palideció, así como su temperatura bajó, sus manos estaban frías.

—¿Milú? —le hablé con preocupación, tocando su rostro.

Pero la chica continuaba en shock. Incluso sus ojos se veían vacíos.

—Milú, estás asustándome —sacudí sus hombros, tratando de hacerla entrar en razón otra vez, pero no sucedía nada.

Hasta que dejó salir un largo jadeo y me miró con terror.

—¡Eleonor! ¿Quieres destruir la Tierra? —preguntó, dando dos pasos lejos de mí.

Frunzo el ceño y doy los dos mismos pasos que ella retrocedió, hacia ella.  Su expresión estaba cargada de temor, era como si le asustase que yo fuese hacerle daño en ese instante, lo que me ponía en alerta, Milú nunca había actuado de aquella manera. Nos conocíamos desde niñas, desde entonces nos tratábamos como hermanas, ¿Qué la hacía pensar ahora que yo podría hacerle daño?