#19 Entre la Espada y la Pared

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Aspen:

No hablaba en serio.

Jamás le pediría a Bastian renunciar a todo lo que con el esfuerzo había logrado, pero necesitaba una respuesta.

Solo una.

Un si y me arrojaba a sus brazos, escucharlo elegirme era suficiente para mí y dejaría todos los malos momentos vividos atrás para seguir a su lado.

Espere ansiosa por oírla, pero cuando finalmente llego mi corazón se destrozó.














Bastian:

"Quiero que renuncies a la empresa"

Lo que sucedió después de escuchar sus condiciones fue el sentir como cada musculo de mi cuerpo se puso tenso, un horrible nudo se atoro en mi garganta y puedo describir cada detalle de como mis facciones fueron cambiando.

Estaba enojado.

Estaba enojado con ella.

—No.

Sus ojos se abrieron de sorpresa.

¿Realmente esperaba que dejara la empresa?

—No voy a dejar la empresa por un capricho que tienes, Aspen.

—¿Un capricho?

Ignorando su pregunta, agrego. —¿Tienes idea de todo lo que he sacrificado por la empresa?

Ella cierra la boca de golpe.

—¡Exacto, no tienes idea, joder!. — Alzo la voz y su cuerpo se sobresalta, por un momento me siento mal, pero enseguida recuerdo en qué posición está colocándome. —Esta es mi única fuente de ingresos y la levante yo mismo, sin ayuda de nadie.. Cuando mi padre no quiso hacerse cargo de su mierda, No voy a renunciar a ella y no parece justo que me hagas elegir entre ti y la fuente de lo que ahora soy.

Ella sigue sin decir nada.

Trago saliva. —¿Acaso no puedes creerme solo cuando te digo que te quiero?

El labio le tiembla.

—Dime algo, Aspen... si no..

—Ya elegiste. —Me interrumpe y mis ojos se abren, a pesar de sus ojos llorosos, me cuesta creer que este diciéndolo enserio. — Acabas de elegir.

Suelto una risa corta, los músculos de mi cara me duelen.

Es increíble que este pidiéndome esto.

Aspen Young es muy diferente a la mujer que creí que era, muy diferente a la mujer que me enamoro.

— ¿Solo eso vas a decir?

Ella no responde y maldigo con fuerza, sus ojos me observan con sorpresa y yo me acerco.

—No eres nada a la mujer que creí que eras, Aspen.

—Bastian..

Intenta hablar, peor es demasiado tarde, esta vez yo voy a hablar hasta acabar.

—Y si me quisieras como yo te quiero a ti, no me pedirías elegir entre la empresa y tú.

Contra Todo Pronostico (#10 Saga Bebé)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora