Blas

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Sueño (¿o recuerdo?) de ____

______

-Te quiero ____- Me susurró Álvaro al oído, lo que provocó que se me pusiera la carne de gallina- pero no te quiero como a una amiga, como todos piensan. Te quiero más allá de la amistad.

-Yo... También- Nos besamos, pero este beso no era como los demás, este abarcaba amor y pasión.

Los besos continuaron y cada vez subía más la temperatura. Iba a hacer el amor por primera vez con Álvaro Gango, ¿quién me lo iba a decir? Él y yo somos como primos y... Bueno eso, no sé si me entendéis.

Álvaro

La temperatura iba subiendo cada vez más y más. ¿Lo mejor? Que iba a hacer el amor con _____ y estábamos solos en casa, bueno solos... Estaba mi hermana, pero ella se callaba. Cogí un preservativo de mi mesilla de noche y acabamos los dos haciendo el amor en mi cama. Terminamos los dos desnudos y tirados en mi cama. Ella se quedó dormida en mi pecho.

Pasó una hora y apareció Fanny por la puerta.

-Álvaro,_____ nuestros padr... Uy, perdón... Yo no quería...

-No pasa nada Fanny- dijo ____ somnolienta. Aunque estuviera despeinada, estaba preciosa, como siempre.

-A lo que iba, que os vistais y hagáis lo que hacen dos adolescentes de quince años- ____ y yo sonreímos perversamente al comentario de Fanny- ¡Nada de intercambiar saliva!- dijo Fanny saliendo de la habitación.

____ y yo nos vestimos y nos pusimos a ver una peli. Al rato aparecieron los hermanos de ____

-¡____!

-Venir aquí enanos- dijo ella con una sonrisa- ¿queréis ver la peli con nosotros?- los dos niños asintieron.

______ y Álvaro

Ha sido el mejor día de mi vida, sin duda. Lástima que tengamos pareja los dos...

Pipipipi

_____

"Puto despertador", pensé. Miré a mi lado y no había nadie, como siempre. Me levanté de la cama y oí un "Ay", que era Cynthia que se había caído de la cama. Me empecé a reír y ella despertó.

-¿Qué hora es?¿Y qué hago yo aquí?

-Son las 9, si quieres puedes seguir durmiendo. Y la respuesta a lo otro... Te caíste de la cama- me empecé a reír y Cynthia hizo como que no me escuchaba y se acostó.

"Maldigo el día en el que Blas me dijo de quedar hoy". Dije para mis adentros. Menos mal que tiene la excusa del concierto de esta tarde tard que sino...

De repente, me acordé de lo que soñé esta noche y no había sido un sueño, eso pasó en la vida real esa tarde de junio... "Debería decírselo a Blas". Pensé.

Eran las diez de la mañana y estaba en el sitio en el que había quedado con Blas. Por una vez Don Perfecto llegaba tarde. No sé si lo he dicho, pero Blas es mi mejor amigo. Si, es Blas Cantó, el chico que le viene el apellido a la perfección con su profesión.

-Llegas tarde Don Perfecto- le dije aguantándome la risa.

-Carlos me ha vuelto a quitar el coche.

-Ya, ya. Escusas, escusas- no pude aguantar más la risa y comencé a reír.

-Vale, me he quedado dormido.

-Lo sabía- dije eso y Blas y yo comenzamos a reír .

Nos fuimos a tomar algo para desayunar. Yo pedí una tostada de tomate y un zumo de naranja y él pidió un vaso de Colacao y una napolitana.

Cuando nos trajeron las cosas le empecé a contar lo del sueño-recuerdo que tuve esta noche, a lo que me contestó:

-Yo creo que lo que necesitas es volver con él. Perdónale.

-No pienso hacerlo, lo que me hizo no tiene perdón.

-Tienes razón, pero todo el mundo se perece una segunda oportunidad, ¿no?- me quedé callada, no sabía que responder, Blas se dio cuenta y cambió de tema.

Llegué a mi casa, no había nadie. Supongo que Helena habrá acompañado a las tres guiris estas al hotel. Como no había nadie, puse la musica a todo volumen: Los 40 principales. Empezó a sonar Puppeteer y me acordé de lo que me dijo Blas y todo lo que había pasado entre Alvaro y yo.

Flashback

_____

Hoy era mi cumpleaños. Hoy cumplía dieciocho. ¡Dieciocho años! Quien me lo iba a decir... Me levanté y, como mi cumpleaños es en agosto, había una nota de mis padres diciendo:

"Cariño estamos en Calblanque, llama a Aurelio o a Mercedes a ver si están por Mar de Cristal y te pueden llevar.

Besos,

Mamá, papá, Paz y Rafa"

Por una vez, hice caso a mis padres y llamé a Aurelio.

-¿Aurelio?

-Soy Álvaro, espera que te lo paso.

-Vale.

-¿Si?

-Aurelio, soy _____. Mis padres están en Calblanque era por si me podíais llevar con ellos.

-Claro princesa cumpleañera. Por cierto, felicidades.

-Gracias. ¿Venís ya a por mi?

-Estamos ya de camino, princesa.

-Vale. ¡Hasta luego!

-Adiós.

Y colgamos. A los dos minutos ya estaban ahí con la auto caravana.

Me subí, Álvaro estaba muy raro, me saludó pero no me felicitó ni nada. Algo pasaba... Después de saludar a Álvaro, Mercedes y Fanny se abalanzaron sobre mi abrazándome y llenándome de besos y diciendo "¡Felicidades ______!" tooodo el rato.

Llegamos a Calblanque y bajamos a la playa. Al llegar, había una carpa blanca en mitad de la playa y música. Había un montón de gente, eran todos amigos y familiares míos. Mi padre es el mejor.

Saludé a todos y, a las dos-tres horas de llegar yo, apagué las velas y nos comimos la tarta. Alguien apareció por detrás y me apartó mucho del resto.

-Felicidades enana- me susurró Álvaro al oído.

-Te quiero- ¡mierda! Yo no quería decir eso...

-¿Qué?- respondió Álvaro, ¿sonriendo?

-Nada,na...- me interrumpió con un beso.-¿Este no será mi regalo de cumpleaños?- Dije traviesa y un poco indignada.

-No, es este- sacó un preservativo de su bolsillo- ¿Repetimos lo mismo que hicimos cuando teníamos quince años?

-Cuando quieras- le besé, pero él se apartó.

-Pues esta noche, a la luz de la luna, te espero donde te he secuestrado- dijo esto Álvaro y nos fuimos.

Eran ya las 10 de la noche y solo quedaban mis amigos y mis primos, es decir, que quedábamos sólo los menores de veinticinco años y mayores de diecisiete. Álvaro me volvió a secuestrar y me llevó a una cala más escondida donde había un par de toallas tiradas en la arena y un par de velitas, al alrededor había pétalos de rosa.

-Me encanta- dije

-Pues esto te va a gustar más- y Álvaro me besó- ¿Repetimos?- dijo cerca de mis labios.

-Cuando quieras- respondí.

A eso de las 12 volvimos cogidos de la mano y sonriendo. Ahora éramos algo más que amigos, pero no novios.

Sentada en el banco (Álvaro Gango)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora