Mientras tanto en Madrid...

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Helena.

Hoy teníamos comida con los chicos para celebrar el cumpleaños de ______. Blas y sus ideas. Carlos y sus "Aunque la cumpleañera no esté, ¡Yo quiero una tarta de chocolate!". David con sus ganas de marcha y Dani... Dani estaba últimamente muy raro. Además, no había venido Cristina con él.

-¡Abro yo!- dijo Carlos acercándose hacia la puerta.

-¡Charlie!- le saludó Paula animadamente- ¿Y el peque?

-Aquí- aparecí con Ezequiel en brazos.

-¿Te vienes conmigo?- Paula le hizo un gesto a mi hijo para que se fuera con ella y así lo hizo. De pronto, sonó mi teléfono: Fanny.

-Dime Fanny.

-¿Podemos ir a tu casa con Annita Luis y yo?

-Claro, además así estarán los dos primos entretendos. Y si queréis podeís quedaros a comer que están aquí los chicos.

-Por mi vale, ¿me llevo comida para Annita?

-No hace falta, tengo de sobra. Bueno nos vemos luego. Besitoos.

-Hasta luego- y colgamos.

Volví a donde estaban todos. Hablaban animadamente sobre Louis y cuando nacería, Carlos y David decían que le iba a estropear el cumpleaños a Blas y él decía que no, que se lo iba a estropear a Álvaro. Y Dani estaba ahí, callado, sin expresión ninguna en la cara. Así que cogí a Dani y me lo llevé a un lugar apartado.

-Daniel a mi no me engañas. ¿Qué te pasa?- Dani no me respondió, sólo me abrazó y empezó a llorar en mi hombro. Cuando se tranquilizó, empezó hablar:

-El otro día, cuando fui a Murcia a por Cristina, me la encontré en la cama con otro. Yo lo único que pude hacer fue gritarle que nunca volveríamos a estar juntos y...-  Dani volvió a llorar.

-Tranquilo Danielo, sé que te pudo la rabia y que nunca le dirías eso a Cristina. Hacéis muy buena pareja, pero dudo que volvaís a estar juntos. Sé lo importante que es para ti confiar en alguien y ahora mismo creo que ya no puedes confíar en Cristina- Dani paró de llorar- Eso sí, como te vea otra vez más llorar te mato- Dani sonrió- Asi me gusta, sonriendo, en honor a ____ y a Álvaro- Dani volvió a sonreír.

-¿Te he dicho alguna vez la suerte que tiene Carlos de tenerte a su lado?- dijo Dani ya sin lágrimas en los ojos.

-No, pero creo que ya lo sabemos los dos- nos abrazamos.

-¡Danielo suelta a mi novia y madre de mis próximos 15 hijos!- Carlos se unió a nuestro abrazo.

-Carlos no pienso tener 15 hijos más, como mucho dos más. Te recuerdo que no soy una coneja- me quejé a Carlos.

-Ya ya, pero bien que te gusta...- dijo Carlos pervertido- Y Dani como te vea más mal te mato- Dani empezó a reír -Te dejo sin FIFA.

-¡Ni se te ocurra quitarme el FIFA que te mato!- Dani empezó a perseguir a Carlos. Parecían dos niños pequeños.

Llegaron Fanny, Luis y Annita y empezamos a comer. Al rato Paula dijo que iba a venir María, gran amiga suya y de _____, y Blue. Sonó el timbre y Paula y yo fuimos a abrir la puerta.

-¡María!- Paula la saludó y se abrazaron. En cuanto María vio a Dani no pudo evitar lanzarse sobre él haciendo que los dos cayeran al suelo.

-Encantado, soy Dani, ¿y tú?- dijo Dani desde el suelo riendo.

-María y soy...

-Blueheart, ¿a qué sí?- le interrumpió Dani. Ella solo pudo asentir e intentó levantarse, pero Dani no le dejó.

-Dani déjame que quiero saludar a los demás- María empezó a reír. La verdad es que hacen muy buena pareja.

-Por nosotros no pasa nada, con tal de ver al Danielo feliz. ¡Cómo si pasas de nosotros, que no pasa na' de na'!- le dijo Blas riendo.

Dani.

No sé que está haciendo esta pelirroja de ojos marrones en mí, pero ha conseguido que sienta mil cosas en tan solo los minutos que llevamos juntos. No puedo decir que me he enamorado de ella, pues aún tengo a Cristina en la cabeza.

-Dani- María hizo que saliera de mis pensamientos- ¿Me puedo levantar ya?- María reía y yo dejé que se levantase.

María.

Saludé a todos los que estaban en casa de Helena. Cuando me iba a ir a mi nueva casa Dani se ofreció a llevarme.

-Espero que nos volvamos a ver- me dijo Dani antes de que cerrara la puerta del portón y él pasara conmigo.

-Adiós Dani- Dani me besó y yo me quedé en shock, ¿pero no estaba con Cristina?

-Lo siento María yo...- Dani intentaba disculparse.

-No pasa Dani- no sé la razón pero esta vez besé yo a Dani y éste respondió.

-Adiós guapa- dicho eso Dani se fue en su Audi rojo.

Cuando fui a coger otra vez mis llaves del bolsillo había un papelito que llevaba un número de teléfono y ponía:

"Llámame,
Dani"

Sentada en el banco (Álvaro Gango)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora