Sentada en el banco (Álvaro Gango)

Ciao Francia

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Los días en París se nos pasaron volando. Sin darnos ya estábamos de camino a Roma. Llegamos allí en 2 horas y media. Se me hicieron eternas, pues Álvaro se había quedado dormido y no me podía dar conversación, obviamente. Se despertó por fin.

-¿Hemos llegado ya?- preguntó medio dormido.

-No, pero en nada aterrizamos. Abróchate el cinturón, que no me quiero quedar sin novio- dije riéndome.

-Vale ma... Digo cariño.

-Eres tonto.

-¿Algo que no sepa?

-Si.

-¿El qué?

-Que vamos a aterrizar- me empecé a reír por la cara que había puesto Álvaro.

-Esta noche te enteras- me susurró al oído y sonrió pícaramente en mi oreja.

Cuando bajamos del avión fuimos directamente al hotel y allí vimos que tenía un spa. Después de media hora intentando convencer a Álvaro, se puso en bañador y fuimos hacia el spa.

-Mierda, me he dejado la pulsera arriba, ahora vuelvo- le dije a Álvaro subiendo en el ascensor.

Cogí la pulsera y salí de la habitación. Iba tan despistada que sin querer me choqué con una chica.

-Uy, lo siento- dijo la chica, esa voz me sonaba. Alcé la cabeza y... ¡Era Leire! Leire y yo fuimos amigas hasta que se tuvo que ir a vivir a Londres por el trabajo de sus padres. No he sabido nada de ella hasta ahora.

-No lo siento yo, Leire- sonreí, nos miramos a la cara y nos abrazamos.

-¡____!¡Cuánto tiempo sin verte! ¿Como estás? ¿Y qué haces aquí?- dijo Leire eufórica.

-Pues estoy muy bien y de viaje con mi novio. Ahora mismo iba hacia el Spa donde he abandonado a mi novio- me entró la risa nerviosa y no sabía por qué.

-Uy con que tienes novio, eh pillina. ¿Y quién es el afortunado?

-Se llama Álvaro.

-¿No será moreno de ojos verdes, que también canta y será de Madrid?- abrí los ojos como platos, Leire había acertado. De pronto me acordé de que estudió periodismo, supongo que lo habrá entrevistado.

-Si, es él. ¿De qué lo cono...

-Lo entrevisté a él y a su grupo hace un par de semanas. Desbloqueó su móvil y pude ver una foto vuestra en la que saliais los dos muy acaramelados- me interrumpió Leire.

-¿Exactamente que día fue?- pregunté.

-El 26 de julio. También iba con ellos una chica que se parecía mucho a ti- vaya, ese fue el mismo día en el que Helena me llamó- Iba también otra compañera mía: se llama Jessica y me dijo que os conocéis- ahora todo encaja. Ya sé porque estaban ellos dos juntos. Álvaro debió beber de más y, como la otra es muy puta, se aprovechó de él- Bueno yo también voy al Spa que me esperan igual que a ti.

-Uy, ¿quién?- le pregunté subiendo y bajando las cejas mientras subíamos en el ascensor.

-Se llama Justin y es súper mono.

Llegamos abajo y vimos a Álvaro y Justin hablando.

-Vaya, parece que nuestros novios se conocen- le dije a Leire.

-Eso parece- dijo Leire riéndose.

-Álvaro- le llamé.

-Dime- contestó.

-Te quiero- le di un piquito.

-Eh, yo también quiero- le dijo Justin a Leire.

-Envidioso- y Leire le dio un beso.

-¿Entramos?- pregunté ansiosa.

Entramos al Spa y nos despedimos de Leire y de Justin.

Álvaro

Mientras estábamos en el Spa _____ me dijo que me tenía que decir una cosa.

-Álvaro, lo siento, soy tonta- me dijo cabizbaja.

-Que eres tonta ya lo sé, pero eres mi tonta- ella sonrió- Pero lo que no sé es por qué lo sientes.

-Por lo que te hice. Por lo de Marc...

-Eso está ya olvidado- le dije abrazándola y dándole un beso en la cabeza.

-¿Seguro?

-Seguro- Sonreímos los dos y nos fuimos a la habitación.