Chicos besándose en cada rincón del lugar, música a todo volumen y claro que si, alcohol a todo lo que daba era lo que se podía apreciar en aquella fiesta playera.
-¡Chicos!- Zayn nos llamó a mí y a mis amigos. Volteé a verlo y él venía con una gran sonrisa y un vaso en la mano. -Me alegro de que ya hayan llegado.
-Está genial la fiesta- confesó Louis- Gracias por invitarnos.
-No fue nada- contestó el moreno- Ahora, las bebidas están por ahí- señaló una barra a unos metros de nosotros- Las botanas de aquel lado y ¡la diversión en todos lados!- exclamó contento, al parecer ya iba algo bebido.
Reímos y vimos como Zayn se dirigía a unas chicas que se encontraban ahí.
-Bien chicos, entonces ¿qué quieren...?- me giré para hablar con mis amigos, pero me di cuenta de que ya se habían ido- ....hacer? -terminé la frase- olvídenlo.
Le di un sorbo a mi Coca-Cola y miré a mi alrededor algo aburrida. Yo no era de salir mucho de fiesta. Helado, mis pijamas una buena película era mejor para mí.
Mi bebida se había acabado, así que decidí por ir a buscar más. El barman me estaba por dar el refresco cuando, de pronto divisé una cabellera rizada en la entrada de la fiesta.
Oh mi Dios.
¿Qué rayos estaba haciendo Harry aquí? Estoy frita. No había vuelto a hablar con él desde lo sucedido en la cafetería. Vi como le susurraba algo a Luke. Aparté la mirada de él cuando me miró, agradecí al barman y me escabullí entre la gente en busca de Liz.
Para mi buena y mala suerte, había muchísima gente. Buena, porque así Harry no me encontraría y mala, porque no encontraba a mi amiga.
Entre empujones, pisotones y uno que otro piropo de unos babosos que se encontraban en la pista de baile, logré visualizar a Liz y a Louis. ¿Dónde rayos estaba Niall?
-¡Chicos!- los llamé bastante alto para que me escucharan, ya que la música electrónica no ayudaba. Louis giró la cabeza hacia mí y me sonrió.
-¡_____! ¿Dónde has estado? Te perdimos- dijo el inglés. Lo fulminé con la mirada. -¿Qué?- dijo haciéndose el que no sabía.
-¡Me dejaron sola y se fueron a Dios sabe donde! ¿Dónde rayos está Niall? -les reclamé.
-¡Oh vaya! ¡Ya se me acabó el refresco!-exclamó el ojiazul mirando su vaso y el de su novia- ¿Quieren más refresco? ¡En seguida!- dijo y se fue de ahí.
-¡Louis!- dijo mi amiga, pero él ya se había perdido entre la multitud. -Hey cariño- me sonrió, yo levanté una ceja- Lo siento, lo siento. Louis quería bailar y pues ¡no iba a dejar que anduviera ligando!
-Ya, ya. -le dije. -Tenemos que irnos, ahora. -ella me miró alarmante.
-¿Qué? ¡Pero la fiesta está genial!
-Liz, hablo en serio. Yo...- dije mirando por todos lados rezando por no ver a Harry- No puedo seguir aquí.
-¿Por qué? No me quiero ir aún, además Niall se está divirtiendo- dijo sonriente y señaló a un punto. Me giré y vi a mi rubio amigo platicando animadamente con una castaña, sonreí.
Pero no, debía irme. Si Harry me veía estaba muerta.
-Es... Harry- confesé. Liz me miró confundida. -¡Está aquí!
-Pero ¿no tu y él ya... son amigos?
Oh claro. Amigos que se besan, pero actúan frente a todos como si se odiaran. Dios, no podía decirle a Liz toda la parte de la historia.
-Es verdad...-dije algo insegura. Ni yo misma sabía que tipo de relación había entre Harry y yo.
En ese momento llegó Louis con las bebidas. Me quedé con ellos un rato más hablando entre otras cosas.
-¡Amo esa canción!- exclamó Liz- ¡Vamos, vamos, vamos!- nos tomó a mí y a su novio del brazo para ir a la pista de baile.
Me divertí, si. Pero no podía sacar esa idea de que Harry estaba aquí y sería muy mala idea verle. Mis amigos y yo bailábamos animadamente al ritmo de All Around The World de Justin Bieber cuando siento que alguien me jala del brazo.
-¿Pero qué hace una chica tan bonita por aquí?
-CaroSchmidt.