Las personas nunca tienen lo que desean, algunos desean dinero, otras la muerte de los demás, otras todo lo contrario; y otras simplemente desean amor, ser felices y vivir con quién aman.
Es fácil decirlo; amar. Pero no lo es. Jimin estaba viendo fijamente la luz roja de la sala de operaciones, sus ojos ya habían parado de sacar lágrimas de culpabilidad, ahora solo quedaba la devastadora tristeza, la maldita soledad. Hoseok estaba hablando con Tae pero sus voces parecían tan lejanas que creía fijamente en que estaba lejos. El corazón le ardía al igual que sus venas, es como si toda su sangre fuera reemplazada por ácido.
Veía vaciamente como las personas a su alrededor lloraban, algunas dormían, y otros como él, miraban a la nada con la esperanza que se convirtiera en algo. Pero no, era la nada ¿Que podía esperar?
Junto sus manos buscando calor pero no había nada, jamás se había dado cuenta de lo horrible y torturador que era la sensación de vacío, en busca de algo, ya sea miedo pero no. No había nada.
—Jimin... —Hoseok movió el hombro del pelirrosa y el chico alzó la mirada. El pelinaranja tembló por la vacía mirada del menor —Iremos a por un refrigerio o lo que sea ¿Quieres algo? —el pelirrosa negó. No quería comer nada y mucho menos moverse.
Taehyung miró a Jimin, aún seguía enamorado de él, no podía negarlo y mucho menos tapar su corazón. Le era imposible.
Se arrodilló frente a Jimin y le tomó las mejillas con las manos acariciando sus pómulos con delicadeza.
—Jimin mírame —susurró y Jimin miró los penetrantes ojos miel de Taehyung. Le dió un escalofrío pero ¿Para que negarlo? Aún confiaba en Taehyung. —Todo estará bien —consoló y pudo ver como un pequeño brillo de esperanza pasaba por los ojos del pelirrosa.
Park no apartaba la mirada pero a la vez no veía nada, todo estaba vacío. No había nada si no era Jungkook y aunque debería sentirse como la mierda por despreciar a Tae no lo hacía, no se sentía culpable. Es que no estaba enamorado de él. Amaba a Jungkook y no tenía ojos para nadie más.
Taehyung perdió el aliento, Jimin aún era bello, aún así era precioso, besó una de sus mejillas y se levantó.
En su interior aún estaba el beso con Hoseok, debía superar a Jimin y quizás mirar a Jung pero no era nada seguro. No es como si Hoseok le conociera bien y aún así siguiera con él. Así como Jimin, que a sabiendas de los problemas de Taehyung seguía con él.
—Taehyung, vamos —dijo Jung fríamente con los ojos en los labios del pelirrojo. Estaba celoso, aún si tener razones de hacerlo pero lo estaba.
Quizás paso una hora, tal vez dos o menos, quizás solo habían pasado quince minutos. No sabía exactamente pero estaba cansado. Jimin estaba totalmente perdido en el vacío de la inexistencia.
Unos doctores salieron de la sala y alzó la vista. Efectivamente había pasado horas, era de noche, quizás hasta de madrugada y hasta que reaccionó se dió cuenta de que el frío azotaba fuertemente.
Lo más rápido que su cuerpo le permitió se colocó delante de los doctores. La cara de decepción y cansancio de estos le agrio el paladar y le colocaron lágrimas en los ojos en cuestión de segundos. Los hombres le preguntaron algo y él solo pudo asentir.
—La operación estuvo bien —el hombre se frotó la frente en gesto de cansancio —Pero perdió mucha sangre y está en cuidados intensivos. Lo normal es que el paciente pase al menos tres días ahí, pero no sabemos cuanto tiempo pasará hasta que recupere al menos el cincuenta porciento de lo que perdió. También, los cuidados que debe tener son más de los necesarios, está muy mal. Mucho más de lo que debería. —los hombros de Jimin perdieron fuerzas y tuvo que contenerse para no romper a llorar. —Tambien tuvo algunas consecuencias, obviamente ninguna positiva.
—¿Qué pasará?
—Bueno... —los ayudantes al lado del doctor bajaron la mirada y le dieron el peso de las malas noticias al doctor. —No despertará pronto, es fácil de deducir pero si despertará, si no hubiera venido a tiempo hubiera muerto, es un muchacho demasiado intolerante al alcohol.
—¿Cuándo podré verlo?
—Hoy no podrá, no creo que sea bueno verlo en el estado que se encuentra. No sería bueno para usted. Pero si dentro de al menos dos días, quizás el miércoles. —Jimin asintió y volvió a caer el la nada. Vacío pero a la vez lleno de dolor.
Un lugar donde tenía miedo caer y no poder salir.
Unos minutos más tarde Taehyung y Hoseok estaban caminando juntos con sus manos rozándose mientras se sonreían mutuamente. Tae puso la mirada al frente y el impulso de correr hacia Jimin lo apoderó.
—¿Por qué estás aquí? —Jimin no respondió, Tae lo levantó del suelo, ni siquiera se había dado cuenta en que momento se había acurrucado en el suelo. —¿Me escuchas?
—Quiero verlo... —susurró Jimin.
—No —cortó Hoseok. —Tenemos que ver qué quiere él y mientras no esté conciente yo no dejaré que te acerques a él. Yo lo cuidaré.
Los ojos de Jimin ardieron en fuera y celos, frustración y tristeza. Tenía razón. Quizás Jungkook ya ni siquiera quisiera verlo.
«5 días después»
Hoseok se levantó de la silla que está a la par de la camilla de Jungkook y salió a la terraza de la habitación a fumar. Sacó el cigarro y lo llevo a sus labios para luego encenderlo.
Se quedó dando largas caladas al tóxico objeto mientras veía el atardecer. Se sentía culpable, por haber obligado a Jimin a irse del hospital luego de la operación. No había sido su intención que el pelirrosa se pusiera a llorar mares fuera del lugar. Y eso no fue lo que más le molestó, lo que más le jodió el día fue al estúpido de Taehyung arrodillado con Jimin, abrazándolo. Consolandolo.
—Mierda... —arrojó el cigarro al suelo y lo piso. Se acercó a la habitación nuevamente y se sentó al borde de la cama y acarició los pies de Jungkook. Al azabache le encantaba eso.
—J-jim-min —los secos y entrecortados labios de Jungkook se movieron en lentas y atropelladas palabras —Jimin... Jimin ¡Jimin ¿Donde estas?! —Jungkook abrió sus ojos, desorbitados y perdidos. Aterrados.
—Jungkook ¿Estás bien? —el azabache quiso asentir pero el punzante dolor de la realidad lo golpeó junto al dolor de su herida. El dolor de ver a Hoseok en vez de a Jimin.
Sus ojos ardieron y a pesar del dolor en todo su cuerpo quiso sentarse. Al lograrlo atrapó a Hoseok de los hombros y lo abrazó. Llorando de decepción, lleno de derrota.
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Amnesia «KooKMin»
FanficJimin y Jungkook son mejores amigos sin embargo, Jeon siempre se sintió atraído hacia su mejor amigo. Cuando Jungkook había tomado el valor para declarar su amor; Jimin sufre un accidente borrando a su paso todos los recuerdos de su infancia y junto...