Amnesia «KooKMin»

9

—¿Q-quieres comer o dormir o comer y dormir? —preguntó Jimin aún bajo la juzgadora mirada de Jungkook sobre el.

—Supongo que quiero comer.

Se dirigieron al comedor y comenzaron la cena en silencio, habían sido un largo día y una liviana cena esperaba que mejorará las cosas.

Pero no.

Jungkook mantenía la mirada en su comida moviendo un pequeño brócoli de un lado a otro en su plato para luego llevarlo a su boca, Jimin seguía viéndolo ¿Cómo apartarle la mirada si su amor era correspondido? Amaba a Jungkook, siempre había pensado en aquello pero Jeon parecía tan inmerso en ser solo su amigo y nada más que... pues, sus esperanzas se habían esfumado.

Jungkook tragó la comida y bebió agua, su plato estaba medio vacío, no tenía hambre; es más, quería vomitar y tomar licor hasta perder la conciencia y convencerse que Jimin algún día lo amaría como él lo ama.

Sus cambios de ánimos no estaban ayudando en nada y ahora mismo estaba extrañando el medio litro de licor que Jimin vacío en el retrete.

La bilis subió a su garganta con las ganas de regurgitar la comida e hizo muecas de dolor. Su estómago dolía y el mareo volvía a subir a su cabeza. Sintió algo húmedo bajar por su nariz y llevó su mano a ella, la apartó para verla y tragó fuerte. Tenía sangre, la nariz le estaba sangrando.

Levantó la cabeza en un intento de parar la pequeña hemorragia pero no se detenía.

—¡Oh por dios! ¡Estás sa-sangrando! —Jungkook estaba así o más asustado que Jimin pero siempre trataba de mantener la calma para no asustar a su pelirosa.

—Ya parará, cálmate.

—¡Pero nunca habías sangrado así antes!

—¿Antes?

—Y-yo, digo... Desde que te ví en el hospital.

Jungkook asintió confundido por la repentina preocupación de Park. No sé había percatado que la sangre empezaba a bajar por su brazo, era demasiado.

Jimin corrió por una camisa cualquiera y se la colocó en la nariz a Jungkook, le presionó y con su mano libre ayudó a levantarlo.

—Deberiamos ir al hospital.

—No iré solo por qué a mí nariz se le antojó sangrar contigo aquí. —dijo bruscamente —Jimin ¿Estas seguro que no me recuerdas? Estás actuando como mi Park.

Su corazón se agitó "Su Park".

—Y-yo, a-aún no.

Una expresión de decepción y tristeza cruzaron por las expresiones de Jeon. La hemorragia había parado y Jungkook aún seguía sintiéndose débil e incómodo con su propio cuerpo. Se sentía enfermo y cansado.

—Mañana iremos al doctor. —ordenó Jimin frunciendo los labios, cruzándose de brazos.

—Ya, deja tu falsa preocupación y preocúpate por ti.

—¿No era que me querías contigo?

—Si, quería a MI Park Jimin, el que se preocupa de verdad por mi. No uno que siente lástima por el pobre desconocido idiota que apareció frente a ti de la nada.

—No eres un desconocido.

—Lo soy. Claro que lo soy, si no lo fuera no estuvieras actuando tan fríamente luego de leer la carta que te hice. MI Jimin se hubiera sonrojado o hubiera tratado de hablar de ello ¿Y tú qué hiciste? Actuar como si mis sentimientos fueran basura. Ya me estoy agotando de todo esto, no quiero rendirme pero lo estoy haciendo.

Jungkook tenía razón, quizás más de la necesaria pero quería seguir fingiendo no recordarlo, quizás así Jungkook trataría de anamorarlo o algo así pero era todo lo contrario. Estaba demacrado, con enormes bolsas bajo sus preciosos ojos, su cabello estaba reseco y sin brillo al igual que sus labios.

Parecía un muerto en vida.

—Mañana iremos al hospital —repitió dejando a Jungkook sentado en el sofá. —Dormiré en el sofá, puedes irte a dormir ya.

Joder, quería dormir abrazado a Jungkook, quería que él le diera besos en la frente creyendo que estaba dormido cuando en rialidad su corazón palpita más rápido por los suaves labios de Jeon.

—Claro. Buenas noches

Se levantó y se metió a su habitación tambaleándose.

×××

A la mañana siguiente, casi a las diez estaban esperando los resultados de los distintos exámenes que le habían hecho al azabache. Jungkook tenía ganas de llorar pero reprimió el sentimiento cuando una enfermera llamó a su nombre.

—Puede pasar.

—¿Solo? —la mujer asintió.

—Te espero —Jimin sonrió y Jeon entró al consultorio. Era elegante, grande y moderno, el doctor era un hombre mayor, con unas cuantas canas en su castaño cabello.

—Sangrado en la nariz ¿Correcto?

—S-si.

—¿Desde cuándo?

—Ayer.

—Tus resultados aún no los abro, pensé que le gustaría saber el resultado también

—Claro que si.

El hombre abrió el sobre y hojeó los papeles, un gesto se instaló en el rostro del doctor, algo así como lástima y preocupación.

—¿Qué pasa? —preguntó Jungkook a sabiendas que su estado no debía ser el más perfecto.

—Muchacho ¿Cuántos años tiene? ¿Ingieres alcohol en exceso? Seguro que si.

—¿Por qué?

—Tienes un problema bastante grave, a decir verdad, estoy algo preocupado por ti. No debes pasar de los veinticinco y estás rozando riesgos que no deberían perjudicarte ¿Tienes novia? ¿Familia?

—Novio, señor. Solo lo tengo a él. —el hombre asintió. —¿Que es lo que tengo?

—Tienes algo llamado hemorragia gastrointestinal. No podemos decirte el por qué de tu hemorragia pero las causas más comunes son el desgarramiento del esófago que se soluciona con una operación, de alto riesgo por supuesto pero es la menos problemática. El otro es cáncer en el colon.

Jungkook palideció, su corazón se agitó con un desgarrador miedo meterse en su mente ¿Acaso tenía cáncer?

—¿Tengo ca-cáncer?

—¡No! Bueno, no lo sabemos aún, pero es más probable que tengas el desgarramiento del esófago. Te haremos unos ultrasonidos y un par de exámenes más para descartar ideas... —el hombre estaba anotando en su expediente y seguía hablando pero Jeon no le estaba prestando la más mínima atención. Estaba aterrado y no sabía qué hacer o qué decir.

¡Por Dios! Podía morir de cáncer, podía morir.

—Mañana por la mañana ven y hazte estos exámenes —le extendió unos papeles, el azabache los tomó en silencio —, luego vienes al medio día y me traes los resultados ¿Entiendes? —Jungkook asintió automáticamente con los ojos llorosos —Chico, mírame. —el pelinegro alzó la vista —No tengas miedo, solo cuida más de ti mismo y esperemos los resultados ¿Si?

Jungkook volvió a asentir y salió del consultorio, Jimin se levantó con su preciosa mirada y hermosa sonrisa ¿Que le diría a Jimin?

Salieron del hospital luego de sacar las citas para los exámenes y entraron al auto. Quería echarse a llorar y abrazar a Jimin todo el tiempo que le quedará de vida.

¡Joder! ¡Mierda, mierda y más mierda! ¡No quería morir!

Sin percatarse de sus acciones empezó a llorar y abrazó a Jimin lo más fuerte que pudo, como si su vida dependiera de ello. Sintiéndose desesperado, herido y hasta ya casi medio muerto.