Aquella mañana me desperté muy pronto, estaba nerviosa, ese mismo día pasaría de estar en Londres a estar en Los Ángeles, aún no me lo creía. Aunque el avión salía a las 12, eran las 7 y ya estaba despierta. Me levanté de la cama y me agaché junto a mi maleta, iba a estar mucho tiempo fuera, no podía olvidarme de nada. Terminé de revisar mi maleta y como las 5 veces anteriores estaba todo, me tiré de nuevo en la cama pensando en el viaje en avión tan largo que me esperaba y justo mi madre abrió la puerta:
- Que pronto te has despertado.
- ¿Cómo sabías que estaba despierta?
- Escuché un ruido.
- Estoy nerviosa mamá, voy a estar fuera casi un año, es demasiado tiempo, aún podemos llamar y anular...
- Nada de eso - me interrumpió mi madre - Siempre has querido ir a Los Ángeles y ahora que te han dado esta beca prácticamente te están regalando el viaje, no digas que no.
- Tienes razón, han elegido a 5 de 150 y yo estoy entre esos 5, soy una chica afortunada.
-Muy bien, así me gusta y ahora que estás despierta vamos a desayunar.
Salimos de la habitación y fuimos a la cocina, yo cogí las tostadas y la mantequilla, pero mi madre me cogió del brazo y me quitó las cosas, yo la miré con cara extrañada, entonces ella abrió el armario y sacó masa de crepes.
- ¡Que hambre! - solté.
- Es nuestro último desayuno juntas hasta no sé cuando, vamos a comer algo especial.
Yo cogí dos tazas y mi madre preparó los crepes, mientras cocinábamos hablabamos del viaje, mi madre se preocupaba de que mi padre llegara a tiempo para llevarnos, pero en cambio yo pensaba en lo que haría cuando estuviese allí, rodeada de gente desconocida, viviendo en un apartamento yo sola, en la otra punta del mundo... Al final me acostumbraría, pero al principio sería duro.
Terminamos de desayunar, nos vestimos y bajamos a la calle, allí estaba esperándome casi toda mi familia y mi mejor amiga, le di abrazos a todos y terminamos llorando la mitad, mi amiga parecía más triste que yo, menos mal que conseguí tranquilizarla diciéndole que la llamaría al menos una vez a la semana y que le mandaría un montón de fotos. Mis padres y yo nos subimos al coche, yo abrí la ventanilla y me despedí de todos con la mano a la vez que arrancaba el coche.
Llegamos al aeropuerto y mi padre cogió mis maletas, todo fue muy rápido y entretenido, y cuando menos me lo esperaba ya tenía que despedirme de mis padres porque iba a salir el avión. Entonces empecé a llorar de nuevo.
- Os voy a echar muchísimo de menos - dije a la vez que lloraba.
-Podrás venir a vernos pronto y mientras tanto llámanos - ne dijo mi padre.
- Intentaré llamaros todos los días.
-Sabes que no lo harás, vas a estar en los Ángeles, una ciudad enorme en la que se puede hacer muchísimas cosas y además sin padres - rió mi madre.
- He dicho que lo intentaré - hubo un tiempo de silencio - Ya me voy.
-Adiós - dijeron mis padres a dúo.
Cada cierto tiempo me daba la vuelta para verlos hasta que los perdí de viste y llegué al avión.
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Un famoso y yo (Logan Lerman & tu)
FanfictionUn simple detalle te puede cambiar la vida, ____ sueña con ser fotógrafa, un día consigue una beca para trabajar en los Ángeles, a partir de ahí su vida cambia por completo, nuevos amigos, nuevo hogar... Pensaba que ya no podía pasar nada más, hasta...