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Jazmine

Cuando vi que era Veronica volví al salón e interrumpí a Archie que estaba jugando con el perro y con el niño y lo primero que hizo fue mirarme extrañado.

—¿Qué pasa?—me preguntó.

—La que ha llamado es Veronica, está en la puerta.

—¿Le has abierto?

—Evidentemente no.

—Vale, vete al jardín con el niño. Iré a ver qué quiere.

—Está bien...

Archie

Vi que la idea de esconderse a Jazmine no la agradaba pero si quería mantenerse oculta debía hacerlo. Fui a la puerta y abrí a Veronica.

—Hombre Veronica, ¡qué sorpresa!—exclamé irónicamente.

—Ya... ¿Estás solo en casa?—me preguntó.

—Sí, ¿por?

—Quería hablar contigo... Sobre Jazmine.

—Mmm vale, pasa.

Me aparté para que entrase y cerré la puerta. Fui al salón adelantándola y cerré las cortinas del jardín esperando que no viese lo que había.

—¿Por qué cierras las cortinas? Ahora no se ve casi nada.

—Sigo con el trauma de capucha negra...—la mentí.

—¿Todavía? Madre mía...—levantó las cejas impresionada y se sentó en el sofá posando su bolso en la mesa—Bueno, ¿cuándo ha sido la última vez que has visto a Jazmine?

—El día que vino a decirnos que se iba a Texas de nuevo. Desde ese día no la he vuelto a ver.

—¿Seguro?

—Sí.—la respondí nervioso.

—Es que me he estado informando y me han dicho que Jazmine no está en Texas pero si tampoco está en Riverdale... ¿Tienes idea de dónde puede estar?

—¿No está en Texas?—la pregunté haciéndome el loco—¿Entonces dónde se ha metido?

—No sé, es lo que te estoy preguntando.

—Pues no lo sé... Igual se ha ido fuera del país. Estados Unidos es muy grande, a saber dónde se ha metido.

—No sé Archie, pero como siga en Riverdale voy a tratar de yo personalmente entregarla a la policia por todos los delitos que ha cometido anteriormente con su grupito de Texas. ¿Sabías que atracó una tienda que era de mi padre?

Me quedé de piedra. ¿Jazmine había atracado un local del padre de Veronica? ¿Cuándo? ¿Y por qué no me lo había contado? Me puse rojo y me empezaron a temblar las manos.

—Archie, ¿te encuentras bien?—me preguntó Veronica poniéndome su mano encima de la mía.

—Sí...—aparté la mano—Será mejor que te vayas, tengo que estudiar.

—Pero...

—Pero nada, por favor Veronica...—la interrumpí—Si la localizo te lo digo.

—Está bien, está bien.—levantó las manos en señal de inculpabilidad y cogió su bolso.—Gracias, Archie.

Se levantó y la acompañé hasta la puerta. Cuando salió por la puerta fui corriendo hacia el jardín y abrí la cortina.

—Jazmine, tenemos que hablar. Ahora.

—¿Qué ha pasado? ¿Algo va mal?

—Veronica sabe que no estás en Texas.

—O sea que puede saber que sigo aquí...

—No, dice que no tiene ni idea de donde estás pero que en Texas no estás.

—Qué alivio...—se puso la mano en el pecho.

—¿Has atracado la tienda de los Lodge?

Se quedó callada y pude notar como tragó saliva. Estaba nerviosa.

—¿De dónde te has sacado eso?—me interrogó mordiéndose el labio el cual tenía tenso.

—Me lo ha contado hace unos minutos. Quiere que pagues por ello por eso te está buscando.

—Vale, entonces no me puede encontrar.

—¿Entonces sí que la has atracado?

—Sí, Archie, sí. Fue hace cinco años, ya no merece la pena. Si no saben descubrir quiénes eran los atracadores en años es muy difícil que sepan dónde estoy ahora.

—Si Veronica te está buscando es porque a ti te han descubierto.

—Da igual, no sabe que sigo aquí.

—Y esperemos que no lo sepa.

—Tienes que dejar de tener trato con ella.

—No, ahora es cuando más me tengo que juntar con ella para hacerla creer que estás en otro sitio.

—¿Y de qué forma piensas juntarte?

—Debo volver con ella.—la dije mirándola a los ojos.

Pude notar en su mirada rabia e impotencia en cuestión de segundos.

—¿Me estás hablando en serio, Archie?

—Es la única manera de que no te...

Me propinó una bofetada interrumpiendo mi habla.

—Eres un mentiroso, me la habías jugado. Me voy de aquí ahora mismo.

Subió corriendo a la habitación y fui detrás de ella.

—Jazmine, por favor. Si quieres me acerco a ella como amigos, solamente quiero ayudarte.

—¡¿Y piensas que acercándote a ella me vas a ayudar en algo?!—gritó.

Bajó rápidamente por las escaleras y en cuanto pisó el último escalón frenó.

—¿Jazmine?—la llamé extrañado.

—¿Qué haces con el teléfono fijo?—le preguntó Jazmine al niño.

—Na...Nada...

Jazmine fue dando pasos firmes hacia la cocina y bajo corriendo, con la actitud que llevaba encima era capaz de matar al niño.

—¿A quién llamabas?—le quitó el teléfono de las manos e intentó mirar las llamadas anteriores pero el historial estaba borrado—¿Y por qué coño borras el historial?

El niño comenzó a llorar y Jazmine se alteró más de lo que ya estaba.

—¡¿A quién coño llamabas?!—le gritó.

—Jazmine, ha llegado tu hora...—acabó hablando.

—¿Mi hora de qué? ¿De contar hasta diez en el escondite?

—No, algo mucho peor...

El niño miró hacia la puerta y Jazmine y yo pudimos ver una sombra acercándose a la puerta, temíamos lo peor. De repente sonó el timbre.

—¿Quién es?—preguntó Jazmine asustada.

—Abre y lo comprobarás.

Jazmine

Me dirigí a la puerta aterrada de miedo y miré de reojo a Archie que estaba igual que yo. Intenté mirar por la mirilla pero estaba tapada desde fuera. No me atrevía a abrir pero decidí hacerlo. Abrí la puerta y no pude creer lo que veían mis ojos.

—¿Mamá?—pregunté asombrada.

LA HERMANA DE JUGHEAD. [RIVERDALE]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora