- No quiero esto para mi hijo - comento Narcissa, mientras pasaba una de sus delicadas manos por su rostro - Lucius debemos de sacar a Draco de esto, es solo un niño - añadió - Bellatrix los quiere llevar a una misión suicida...
-Y es lo que hará - interrumpió ganándose una mirada fría por parte de su esposa - Debemos de sacar a Draco de esto - Las palabras de Lucius no concordaban con sus actitudes incluso dejaban confundida a la bruja
-Tu hijo puede morir - murmuró ella - Tal y como Theodore lo ha echo - añadió ella rencorosa, recordando el terrible final de aquel niño de la misma edad que su hijo, el cual tuvo que tener la valentía más grande que cualquiera de ellos, para darle aviso a Potter sobre el plan que los mortifagos tenían, justo antes de que estos llegarán a la boda de Bill y Fleur esa misma noche, Theodore había sido castigado por Lucius Malfoy y posteriormente asesinado por este, el perdón de la bruja hacia su marido no existía, era parte de su familia, era un niño al cual le habían visto crecer, Theodore Nott aún tenía una vida por delante.
-Ya está en un lugar mejor y no se habla más sobre el tema.
-Tu hijo igual podría pasar por eso - interrumpió furiosa
-Sería mejor para Draco no estar aquí
Dicho eso Lucius Malfoy ingreso en su estudio mientras que ella quedó afuera de este, Narcissa apretó los puños, mientras maldecia a su esposo, como era posible de que el se hubiese convertido en lo que es ahora, antes Lucius Malfoy era distinto, veía por su hijo, esperaba cosas de su hijo y ahora el desearía liquidar a su único hijo al fruto del amor que se supone había entre ellos... No podía más, no quería que Draco terminará como Theo.
Del otro lado, Hermione Granger, Harry Potter y Ronald Weasley se encontraban en el mundo muggle, en una pequeña cafetería, Harry sostenía un periódico de ese mismo día, leyendo con tristeza sobre la muerte de Theodore.
-Luna debe de estar desecha - rompió el silencio Ronald Weasley - Aunque por otra parte debería de sentirse aliviada del saber que Nott no era el malo y que al final hizo algo bien...
-Ron, Callate - interrumpió Harry sin poder creer lo que había dicho su mejor amigo
-¿callarme? ¿Por decir la verdad? Vamos Harry, son mortifagos de los que hablamos, malditos mortifagos no me sorprendería que acabarán muertos - los ojos de Hermione veían fijamente a Ron, con un toque de tristeza en ellos, la castaña soltó un pequeño suspiro de dolor - Lo siento Hermione
-Vamos, tenemos que... - hizo una pequeña Pausa, detrás de ella pasaron dos personas que ella reconoció inmediatamente eran Antonin Dolohov y Rowle, dos mortifagos que les habían seguido - Harry - susurro el azabache miró discretamente a su mejor amiga entendiendo el pequeño movimiento de ojos, mientras que Ron sacaba su varita para defenderse en cualquier momento, Hermione volteo rápidamente apuntando a estos con firmeza, de momento una nueva batalla se libro entre ellos, dando victoriosos al trío de oro. - No estamos seguros aquí, vamos debemos de... - Harry y Ron veían al mortifago frente de ellos, el único al cual no habían notado hasta el momento...
-Es imposible - dijo Bellatrix - Ustedes no pueden hacer nada bien - comenzó a caminar en medio de Draco y de Blaise con desagrado - ¡INÚTILES! - Grito furiosa - ¿acaso quieren el mismo final que Nott? ¡¿HE?!
-no estaría nada mal - interrumpió Blaise Zabini, Bellatrix se detuvo justo frente de él, clavando su mirada en los ojos esmeralda del Moreno, Bellatrix Lestrange comenzó a reírse frente de él, pasando una mano sobre la mejilla del chico
-Que estupidez has dicho - dijo ella entre carcajadas - REPITELO - ordenó ahora de una forma seria, Blaise Zabini miraba retante a la bruja
-Dije que no estaría nada mal - la voz de Blaise sonaba calmada, sin titubeos, Bellatrix sacó su varita apuntando directamente al estómago del Slytherin
-¡Que valiente! - grito Lestrange con emoción y un toque de locura combinados - Veamos si también eres capaz de resistir - dijo haciendo una pausa, en el fondo Draco esperaba que Blaise se retractara, que se hiciera el loco, pero era más que evidente el y Bellatrix mantenían aún concurso desafiante de miradas del cual el no saldría vencedor - Crucio- pronunció, de inmediato el Moreno comenzó a retorcerse de dolor, Callendo de rodillas, sin despegar la mirada de la bruja quien comenzaba a reírse de lo que estaba haciendo - ¿aun resistes Zabini?
Draco no se movía de su lugar, tenía que aguantar escuchar los gritos de Blaise así como pudo aguantar los de Nott al momento de ser torturado por su padre, en el momento en que no pudo hacer nada y el se culpaba de todo, de no ser por su terquedad seguramente su mejor amigo aun seguiría vivo.
-Bellatrix, Basta - aquella voz fría y arrastrada de Snape se hacia presente entre las sobras, Bella, bajo su varita terminando con el castigo, mientras mantenía una mirada de satisfacción, Blaise que aún se retorcía en el suelo, comenzo a tocer
-Severus, Severus, ¿por qué interrumpes nuestro juego? - pregunto ella haciendo un puchero
-A este paso acabarás con las filas de nuestro Lord - respondió fríamente - Además solicitan a Zabini y Draco en el salón, el tiene algo que decirnos - añadió mirando directamente a Draco
Bellatrix frunció el rostro, mientras pateaba el cuerpo de Zabini-Ya escuchaste, levántate - ordenó - Nos están esperando...
-No bella a ti no - interrumpió Snape, la bruja se sorprendió al escuchar las palabras de Severus sin embargo no lo cuestionó, de mala gana aceptó dejar ir a Draco y Blaise junto con él, pero no se quedaría así, ella investigaria de que trataba todo esto, no era normal que tantas anomalías estuvieran pasando al mismo tiempo.
-¿cómo es posible? - pregunto Harry mirando detalladamente al joven frente de ellos...
-Tengo mucho que explicar, sobre todo a ti Hermione -
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Enamorada Del Slytherin
FanfictionDRAMIONE: La historia se desarrolla en él cuarto año en Hogwarts, La castaña de ojos avellanados a fijado su atención a cierto platinado de ojos color grisáceo príncipe de Slytherin. Pero quien lo diría, este año tanto Malfoy como Granger conocerían...